CAPITULO 42. YA HICISTE MUCHO POR MI.

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Angela corrió a auxiliar a Genji, que apenas respiraba.

-No, no, no, no, no, por favor no, Genji —Repetía Angela al ver la herida sangrante de Genji—. Tiene que haber algo por aquí con lo que pueda... —Genji sujeto a Angela por el antebrazo con las pocas fuerzas que aún le quedaban.

-No... —Dijo Genji con voz temblorosa.

Angela lo ignoro y lo arrastro hasta la entrada del lugar, viéndose obligada a detenerse por un dolor abrazador en su vientre. La herida de bala sangraba mucho y comenzaba a sentirse mareada. Ocultando la herida camino en busca de un botiquín de primeros auxilios y un kit para operar, o cualquier cosa que remotamente le ayudara. Lo único que podía pensar era en que Genji no se muriera mientras ella buscaba el equipo para ayudarlo. Pero fue inútil, únicamente encontró un botiquín de auxilios primario, que solo tenia una venda muy acabada y unas pocas suturas, que apenas servirían para unas dos heridas de bala. Golpeo con fuerza el estante donde estaba aquella cajita y luego dejo escapar un desgarrador grito de dolor.

-Eso se ve grave —Murmuro Genji.

Angela se giró al escucharlo.

P-por favor, atiéndete a ti y a Cassidy, yo ya cumplí con mi misión —Dijo Genji con un tono apagado y mirando a Angela con un rostro sereno. Una sonrisa cálida se dibujó en su rostro pálido.

A Angela le temblaban los labios y las cuencas de los ojos eran un mar de lágrimas.

- ¡No digas eso Genji! ¡No te dejare morir! —Caminó hasta donde estaba el y dejo el botiquín, por un lado. Se arrodillo junto a él y como pudo lo subió en sus rodillas— No te des por vencido Genji, por favor —Dijo en un llanto entre cortado.

Tomo la venda, y justo cuando iba a desenvolverla Genji la detuvo con un gesto sutil.

-Ya has hecho m-mucho por mi... —Dijo con un tono apagado.

-No...no...no es justo, no lo es, por favor Genji.

Genji extendió su mano y acaricio suavemente la mejilla derecha de su doctora. Estaba helada y reseca, pero, aun así, el poco calor que emitía le provocaba a Genji un sentimiento de alivio.

-No Angela... t-tu debes continuar sin mí, sería un desperdicio que trataras de usar esos pocos recursos en mi —Siguió acariciando la mejilla de su doctora y limpio unas cuantas lagrimas que descendían por su rostro—. Me iré en paz sabiendo que saliste viva de aquí. Hazlo...hazlo por mí, ¿sí? —Genji comenzó a temblar y su respiración se veía muy forzada. Además, el frio no ayudaba.

Angela:

Nunca creí que un corazón rompiéndose fuera tan doloroso. No podía con lo que mis ojos veían. El hombre al que amo, agonizando entre mis brazos. Nunca creí que tendría que repetir esta horrible escena de nuevo.

Detuve su nuca con mi mano izquierda y con la derecha sostuve su mano izquierda.

-No me hagas esto por favor, una vez casi te pierdo, no quiero perderte ahora— Le suplique con miles de espinas punzando mi corazón.

-Perdóname —Entonces comenzó a llorar—. C-créeme, que...que desearía p-poder vivir una vida...una vida a tu l-lado —Su voz iba apagándose poco a poco al igual que su vida se extinguía. Yo solo negaba con la cabeza y los ojos entre cerrados hechos un mar de lágrimas—. Pero aun así...f-fue una buena vida —Genji apretó con más fuerza mi mano derecha—. P-perdóname por no haberte hecho feliz Angela, lo l-lamento mucho... Me hubiera g-gustado protegerte una vida entera, p-pero...n-no lo logre.

-Genji...

Mi corazón lloraba amargamente al verlo así, y el pensar que de nuevo lo perdería todo me aterraba. ¿Por qué? ¿Por qué tengo que volver a perderlo todo otra vez?

-Angela, p-prométeme una cosa.

-S-si, lo que sea Genji... —Asentí con la cabeza mientras limpiaba mis lagrimas con mi hombro.

-V-vive una vida feliz por mi...se feliz, s-sin importar que, t-te prometo que estaré a tu lado s-siempre mi Ángel —Trago saliva con mucha dificultad—. Me hubiera gustado haber podido colocarte un anillo, y p-pedirte q-que v-viera...v-viéramos una vida feliz. Me hubiera gustado haberte hecho feliz —Genji sonrió con dificultad entre aquellos temblores constantes y yo me rompí a un más al escuchar sus palabras, sus últimas palabras.

-Lo hiciste Genji, si lo hiciste, fueron los mejores momentos de mi vida, y no quiero que se esfumen así nada más —Rompí en llano de nuevo. Apenas podía hablar—. Y mi respuesta, m-mi respuesta hubiera sido si, si me hubiera gustado compartir el resto de mi vida contigo Genji— Vi como el sonreía con dificultad, pero con esa inocencia y pureza que nunca desaparecieron, incluso en sus últimos momentos ahí estaban. Yo sonreí cuando vi que el lo hizo, pero aun así seguía sufriendo amargamente—. Y No puedo seguir sin ti, no puedo, cuando te fuiste...cuando te fuiste, simplemente no pude seguir, y ahora te perderé para siempre... Y-y, ¡Y no quiero Genji, no soportaría perderte!

Genji ahora me sujeto por la nuca y me acaricio con delicadeza. Su rostro se tornó melancólico y arrepentido.

-Perdóname Angela, fui un idiota, p-pero no debes ser t-tu quien pague p-por eso... y-ya has pagado suficiente... — Concluyo y exhalo con mucha dificultado.

Sentí como su mano soltaba mi nuca y como la mano izquierda dejaba de aportarme. Sentí miedo y mis ojos eran la clara prueba de ello.

-A-Angela, te... te amo... y siempre lo hare.

-Yo también te amo Genji, yo también te amo— Acerque mi frente a la suya. Estaba helada.

Narrador:

Angela se ahogaba en un mar de amargas lágrimas, sufría por lo inevitable, y se aferraba a una realidad que poco a poco se esfumaba. Con mucha delicadeza, cerro los ojos y acero sus labios a los de Genji, plantándole un tierno beso, el ultimo beso. Genji presiono suavemente sus labios contra los de Angela, y durante unos segundos ambos volvieron a entrar en ese lugar en el que solo ellos dos existían, un lugar fuera del tiempo y la realidad, un lugar del que Angela no quería salir nunca, pero entonces Genji ya no pudo mas y sus labios, como una hoja en otoño, cedieron por la gravedad y dejaron a los de Angela en una soledad que marcaría un antes y un después en su vida.

Angela envolvió el cuerpo de Genji entre sus brazos y lloro acurrucada en el pecho de su amado, rehusándose a pasar la página. Un llanto apenas audible, un llanto ahogado en el pecho sin vida de Genji.

Close to an angel ( Genji x Mercy )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora