Close to an angel ( Genji x Mercy )

CAPITULO 11. LA ÚNICA MEDICINA QUE NECESITO ERES TU.

-¿Entonces?...-Exclamo Genji de nueva cuenta al no recibir respuesta alguna. Angela despertó de su pequeño trance y volvió a la realidad, parpadeo varias veces y miro a Genji a los ojos, se mordió el labio inferior levemente y con su mano derecha acaricio suavemente su propia mejilla como para comprobar ella misma que estas estaban ardiendo.

-No, no...no era nada importante- Dijo tímidamente después de haber pensado mejor en su propuesta. Genji la miro, ladeo la cabeza a la derecha y parpadeo muchas veces seguidas.

-¿Ósea que no es nada?... pero si hace unos segundos querías preguntarme algo ¿Puedo saber que era? - Angela abrió los ojos como platos y se quedó en blanco.

-N..no creo que sea una buena idea, es que...es que ya lo pensé mejor y no creo que te valla a interesar, o bueno...es más bien algo raro, ¿sabes? Preferiría no decírtelo ahora que lo pensé mejor- Dijo mientras bajaba la mirada y trataba de ocultar su cara roja por los nervios.

Genji entre cerro los ojos de manera sarcástica y negó con la cabeza.

-Pues ahora tengo curiosidad, vamos dime, solo somos tú y yo en esta habitación, no hay nadie más que pueda escuchar lo que sea que te da tanta pena-Genji hizo una pausa y al ver que Angela solo dejo salir un pequeño ruidito tipo sollozo, extendió su mano derecha, y le dio unas ligeras palmaditas a Angela en su cabeza agachada- Vamos Angela, puedes confiar en mí, puedes confiar en este cadáver que salvaste, no hay manera de que yo te juzgue o señale, soy incapaz de si quiera pensar en verte triste o muy avergonzada- Las palmaditas se convirtieron en sueves caricias sobre el cabello de Angela- Pero tampoco te obligare a nada...-Genji la miro con unos ojos llenos de ternura y compasión.

Angela:

Al escuchar sus palabras mi corazón se sintió extrañamente aliviado, una calidez increíble inundo mi pecho, y a su vez un escalofrió recorrió mi espalda al sentir la suave mano de Genji jugar con mi cabello. Mi vista se clavó en el suelo y una sonrisa asomo entre los mechones de mi tupe que cubrían mi rostro; completamente rojo por la inercia del momento, un momento muy bello con uno de los pacientes que más eh llegado a querer.

-Bueno... tomare eso como un no... creo que sería bueno que...-Interrumpí a Genji al levantarme de manera repentina y sin avisar.

-Claro que te lo diré Genji...-Aun volteando mi cabeza hacia otro lado porque sentía que el contacto visual con aquel chico haría que perdiera aún más el control sobre mí misma.

-Oh, bueno, ¿y que es entonces? - A Genji se le iluminaron los ojos y se enderezo rápidamente, a lo que yo solo me reí.

-Te diré una parte ahora y la otra cuando vuelvas de tu misión- Dije mostrándole una sonrisa coqueta. El nuevamente se encorvo ligeramente y puso sus ojos en blanco.

-¿Y eso por qué?- Dijo mientras agachaba los hombros.

-Así sabre si de verdad te interesa saber- Le respondí aun con una sonrisa en mi rostro.

-Bueno...-Exclamo mientras ponía unos ojos suplicantes que brillaban de una manera hermosa. - ya dime la primera parte- Dijo aun con sus ojitos suplicantes.

-Pues quería saber si te gustaría hacer algo conmigo, cuando tengamos tiempo claro, esto del trabajo me tiene muy agobiada y bastante estresada...-Acerque mis manos a las suyas, y tome sus dos manos entrelazando sus dedos con los míos; la mano de metal y la de carne y hueso...-Y me gustaría que me ayudaras a desestresarme un poco...claro solo si tú quieres...

Narrador:

Genji se puso nervioso al escuchar las palabras de Angela, además el hecho de que ella lo hubiera tomado de las manos entre lazando los dedos de ambos hacía que sus mejillas ardieran y su piel se pusiera roja y su pulso aumentara considerablemente.