Cuatro

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Pooh esperó a su protegido dando vueltas por el gran jardín pues luego de conocerse alegó que dormiría por más tiempo ya que no saldría hasta después del mediodía para ir nuevamente a la agencia de modelos.

El omega estaba molesto pues no sabía muy bien que intenciones llevaba este pero a simple vista, ya le había mostrado que no se lo pondría nada fácil.

Hubiera preferido mil veces custodiar al viejo alfa empresario pero sin embargo, por el momento debía cumplir con el cometido de cuidar de un joven, egocéntrico y caprichoso alfa.

Finalmente lo vio salir, con un nuevo look y dirigirse al garaje.

Finalmente lo vio salir, con un nuevo look y dirigirse al garaje

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-Yo conduzco-dijo al acercarse.

-Debería hacerlo yo, puesto que soy su guardaespaldas

-De eso nada. Nadie conduce mi coche y mi moto más que yo

Pooh soltó un sonoro resoplido.

-Me temo que su padre no estará de acuerd...

-No es padre, es mi padrastro y la verdad me da lo mismo. Desde un principio yo no quería otro guardaespaldas

El omega chasqueó la lengua con desgana y siguió a este, quién se estaba subiendo al deportivo sin hacer caso alguno.

-Jodido niño rico

Este se subió al asiento del copiloto y tras ver sonreír con malicia a Pavel, salieron de allí a toda velocidad, por lo que se tuvo que sujetar al asiento.

-¿No tendrás miedo a la velocidad, guardaespaldas?

-No pero debería ir más despacio o lo multarán

El alfa soltó una sonora carcajada.

-Primero tendrían que atraparme y segundo, por si no lo has notado, estoy rodeado de dinero

Pooh miró a este con extrañeza, al verlo enterrar el pie en el acelerador, haciendo que una corriente eléctrica le recorriera el cuerpo.

-¡Aaaaaahhhhhh!, ¡reduzca o nos mataremos!

-Soy un gran piloto, no te preocupes, no morirás, al menos no en mi coche

Tiempo después, el deportivo se detuvo frente a la agencia de modelos, entonces Pavel salió como si nada, mientras que Pooh se tuvo que sujetar a la pared para controlar su mareo.

-Ya no pareces tan temible guardaespaldas. Creo que mi padrastro te ha subestimado

-Oh mierda- Susurró el omega entre dientes -esto va a ser más duro de lo que había creído

En el interior, este vio que había muchos otros modelos pero no solo alfas, sino que había betas, deltas e incluso omegas y todos realmente lindos, aunque Pavel Babe era con diferencia el que más destacaba pues además de su belleza, portaba un aire de superioridad y misterio que lo envolvía.

1. Soy tu dueño - PavelPooh TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora