Treinta y nueve

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Sin televisión, ni datos en su teléfono, ninguno de los dos se enteró de lo que había pasado con el matrimonio Pruk, más que nada porque tanto Nut, como la organización que lo respaldaba se ocupó de hacer creer a todos sus empleados que habían vuelo a irse de viaje.

Cuando al fin sus celos terminaron del todo y consiguieron la estabilidad de una pareja, Pavel y Pooh decidieron volber al mundo real.

Pavel acudió a la agencia de modelos, lo cual a todos les extraño pues su omega guardaespaldas no lo acompañaba, por lo que este tuvo que contarles que eran novios y al irse de la casa de sus padres, ya no tenía que tenerlo como escolta.

Michael no se tomó muy bien la noticia pues realmente Pooh le gustaba pero ya no podía hacer nada por hacerlo suyo, si el guapo alfa modelo se le había adelantado.

Mientras, el omega regresó a la casa de su madre, donde también terminó contando lo sucedido a su familia, la cual se apenó mucho por su difícil situación.

May le invitó a que viniesen a casa pero le dijo lo que su alfa tenía pensado hacer con respeto a buscarse un lugar para los dos con su sueldo de modelo.

El omega también les informó de su idea de trabajar en la Academia de defensa personal y así no solo llevarse su parte de los beneficios, dejando todo el trabajo a Garfield y Benz.

Era lo más conveniente por el momento pues además, el omega de su hermano cada vez estaba más pesado y le costaba moverse con su pancita.

En el descanso de la comida, Pavel y los demás modelos fueron al restaurante de la esquina, donde este y sus dos mejores amigos se sentaron en una mesa.

Ninguno de los tres dijo una sola palabras durante un buen rato pues estaban ensimismados en sus propios pensamientos.

...—Joder... la próxima semana nos iremos a China para el desfile—se lamentó el más bajo—… apenas podré ver a mi nuevo novio y estar con mi familia

El alfa resopló con molestia.

—Bueno, al menos tú tienes padres a los que ver, alegrate de que esa minucia sea el mayor de tus problemas

Jimmy asintió conforme.

—Joder... yo si que tengo un problema grave, no sé como demonios convencer a Tommy de que estoy loco por él...le gusto pero se cree que sigo siendo un picaflor

Pavel volvió a soltar un sonoro bufido.

—Joder, sois patéticos

Sus amigos entonces lo miraron con desagrado.

—Oye ¿y a ti qué demonios te pasa?, ¿Acaso solo existen tus problemas o qué?—preguntó el más alto.

—Es que estoy asustado por Pooh

—¿Por qué?, ¿Acaso crees que pueda ocurrirle algo?—habló Sam de nuevo.

Este chasqueando la lengua con fastidio.

—Aún tengo que decirle que cambié su medicación y conociendo su carácter.....

Jimmy resopló.

—Pues no sé lo digas y ya...ahora sois felices, estáis juntos. Ya no es importante

Este negó.

—No, yo no quiero mentirle, lo amo pero...

—Pues usa la voz, sabes que sirve para que los omegas nos obedezcan—replicó el beta.

—Con él no funciona, ya lo intenté una vez.

Sus amigo suspiraron profundamente.

—Bueno pero eso fue antes, ahora seguro te obedecerá, tenéis el lazo hecho y si omega te desea, ¿no?

1. Soy tu dueño - PavelPooh TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora