Seis

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Tras bajarse del ascensor, Pon ayudó al ebrio y caliente alfa a llegar hasta la puerta de su apartamento, donde a continuación abrió.

...-Date prisa, pequeño, no sé cuánto tiempo resistiré

-Ni se te ocurra transformarte aquí, por favor espera a llegar al dormitorio

Ambos entraron a trompicones hasta el salón.

-Arrrggg... a-apenas me queda tiempo—gruñó el alfa— ...no puedo entender como puedes estar tan lúcido. Otro omega en tu lugar estaría gimiendo y temblando de deseo por ser follado, ¿No serás una anomalía de esas, como mi hermano pequeño?

Pon rió, mientras caminaron hasta el dormitorio.

-¿Anomalía?, no que va, solo son años de práctica y los supresores de contrabando

Sailub con un hilo de lucidez se apartó.

-¿Contrabando?

El omega asintió mientras comenzaba a quitarse la ropa, moviendo sus caderas y mordiéndose el labio inferior.

-Es por mi trabajo, soy modelo y estaba harto de que todos los alfas y betas de ese mundo quisieran follarme a cada rato. Quiero controlar mi celo, no que me controle a mi

-Mi hermano toma de eso, son muy caros

-Si, lo son pero soy un modelo muy bueno tranquilo

-¿No eres muy bajo para ser modelo?

Pon sonrió comenzó a gayear sobre la cama, mostrando su entrada.

-¿Vamos a hablar o a follar?

Sailub gruñó y rápidamente se quitó la ropa antes de destrozarla y a continuación se subió al colchón y agarró al omega.

-Oh joder, eres tan jodidamente hermoso, necesito follarte ya pero no sé...

El omega besó sus labios y sonrió con lascivia.

-Tengo un amigo que me suministra unos supresores ilegales pero muy efectivos, los cuales me permiten controlar mi celo y evitan que mi olor y demás debilidades omega me dominen. Tranquilo no son tóxicas, ni tengo nada raro

El alfa lo miró con extrañeza.

-Pero ¿eso no evita mostrarte como realmente eres y encontrar a tu destinado?

Pon asintió.

-Si pero es un riesgo que debo correr, mi carrera es muy importante para mi y por el momento prefiero follar con mis sentidos alerta

El alfa gruñó una vez más, sintiendo sus músculos crecer sin poder soportarlo más.

-On joderrrr....ojalá pu-pudiera decir lo mismo, precioso pero me temo que no podré, ya no lo soporto más. Mi lobo me dominará y quizás quiera marcarte

El omega negó soltándose rápidamente del agarre y subiéndose encima con una asombrosa destreza, la cualdejó al alfa impresionado.

-Tranquilo, me las arreglaré... anda metemela. Solo debes preocuparte de eso.

El alfa maravillado por la hermosa visión dejó que su celo lo dominase totalmente, mientras sus ojos se volvían totalmente negros y su mandíbula se ensanchaba.

-Mío, mío-Gruñó sujetado la cintura del hermoso y dispuesto omega-...mío, mío

Su nublada mente y su deseo fueron más fuertes, por lo que con hambre besó la desnuda piel de Pon, mientras este lo abrazaba totalmente entregado a la pasión.

-Si, soy tuyo, soy tuyo.

Sailub entonces soltó un fuerte gruñido y enterró su nariz en el pelo revuelto del omega, aspirando profundamente y haciendo que una envolvente lujuria se apoderase de los dos.

Pon respondió a sus besos de una forma entregada, mientras gemía y jadeaba complaciente y haciendo que el empresario enloqueciera aún más.

Pronto esos besos se convirtieron en pequeños mordiscos y lamentones de placer.

-Oh joder, eres el alfa más guapo que he visto, me alegra haberme acercado a ti, escapando de ese imbécil-dijo el omega ardiendo de deseo.

El alfa estaba totalmente dominado por su instinto, mientras sentía su erecta polla palpitar al rozar con el trasero del omega, por lo que tras comprobar que este estaba sorprendentemente lubricado, probablemente por el también gran deseo que sentía, lo alineó y luego de introducirlo, comenzó a penetrarlo suavemente.

-¡Ooh si!...¡aaah siii!... ¡eres enorme aaah!, ¡siii... !, ¡siii ...!, ¡más!, ¡más!- gritaba el omega desquiciado por el placer saltando sobre el alfa.

-Aahh... si pequeño... Ahhh-Gruñía este muy extasiado, en cada profunda estocada que le propinaba.

Varios minutos después, Pon sintió su próstata vibrar y acto seguido se corrió sobre el vientre del alfa, soltando un gran gemido que hizo contraer su esfínter, apretando la dura polla de este.

Cegado ya por el frenesí que le provocaba cada espasmo del omega, Sailub siguió penetrándolo desde abajo, con fuerza, hasta que minutos después sintió su nudo hincharse, entonces intentó olisquearlo de nuevo, mientras sus colmillos crecían.

La intención del alfa era morder siguiendo el instinto pero entonces rápidamente el omega puso un cojín, el cual cegado por el éxtasis el alfa mordió con furia, mientras se derramaba en su interior.

-Ooooh....grrrrr....aaaaah

Cuando el alfa terminó de morder, lamió el cojín, mientras Pon soportó con fuerza su embiste, mientras aún tenía el nudo soltando la semilla en su interior.

Poco después el alfa paró y entonces  el omega se incorporó, sacándose de su interior la flácida polla de Sailub, quién todavía con sus ojos oscuros, jadeaba recuperando el aliento y sin percatarse de nada.

Pon se bajó de la cama y se limpió, aliviado por haber tenido fuerzas suficientes y evitar la marca del único alfa, el cual le parecía realmente que merecía la pena ser un omega normal y entregarse al fin a una vida monógama y normal.

Pon se bajó de la cama y se limpió, aliviado por haber tenido fuerzas suficientes y evitar la marca del único alfa, el cual le parecía realmente que merecía la pena ser un omega normal y entregarse al fin a una vida monógama y normal

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-Oh joder, ha sido increíble- escuchó hablar a este

-Si, si lo ha sido- dijo subiéndose nuevamente a la cama.

Tras recobrar el aliento completamente, el empresario miró al hermoso omega.

-Quiero que seas mío y yo ser tuyo para siempre

Pon le sonrió, aunque evitó mirarle a los ojos.

-Eres tan adorable. Siento que que tú podrías ser mi alfa pero ya se verá, de momento vivamos esto, ¿De acuerdo?

El joven empresario lo abrazó.

-Aunque no lleves mi marca, yo sé que somos destinados. Mi celo nunca se me había adelantado, solo ha ocurrido esta noche y ha sido contigo ...aunque las circunstancias de conocenos no hayan sido las mejores, algo mágico se cumplió entre nosotros, lo sé

El pequeño omega asintió en un suspiró y a continuación cerró los ojos para dormir un rato, antes de que llegase la siguiente copula, las cuales no sabía cuantas serían pero probablemente se sucederían a lo largo de esa noche y quizás en el día siguiente pues el celo de los alfas que había conocido anteriormente, habían durado por varias horas.
......

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1. Soy tu dueño - PavelPooh TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora