𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟓𝟓

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La exclamación de Sharxor fue continuada con una limpia carcajada llena de maldad. "Tonterías" siguió resonando con un eco escalofriante. Con serias dificultades logró ponerse en pie, sin apoyar la pierna incinerada en el suelo, se tambaleó un poco, pero pudo estabilizarse, también porque Hearst estaba allí y le entregó su hombro casi como si fuese un bastón o una muleta.

- ¿Esa es la excusa que le contarás a los herederos de los Medi? ¿Que Mesina fue limpiada bondadosamente? ¿Que no había ninguna intención egoísta de dejar de vivir en una simulación horrorizados por que los Malditos estuvieran de parte de los humanos y los ayudasen a destruirlos todo? ¿De verdad crees que tus hijos se van a creer esa palabrería?- frunció el ceño.- Oh... cierto...- musitó con cierto dramatismo en su voz.- No tendrás... Perdona...- sonrió con cinismo.- Te sientes atraído por los varones...- rodó los ojos de forma burlona.

- Los dragones tampoco pueden reproducirse.- se cruzó de brazos sin verse intimidado por aquella burla.- De hecho, los dragones han estado en decadencia y desaparición desde hace siglos precisamente por la caza de la última dragona con vida... Scarfire y tú sois los únicos que aún seguís con vida después de tantos siglos...- Sharxor frunció el ceño, aunque Rostian no estaba mintiendo; solo Scarfire pudo haberle contado aquello y no le hizo ni pizca de gracia que hicieran mención a alguien tan importante para él con tan poco respeto...- Tú legado termina contigo y el de los Mowet terminará con ellos.- entrecerró los ojos.- El de mi familia seguirá gracias a Maeva.

Maeva sonrió con satisfacción, no porque todo el legado estuviere sujeto a ella, sino porque ciertamente la respuesta de su hermano había sido muy buena.

- Una pérdida de tiempo...- rodó los ojos.- Delegar tu obligación en los demás es el acto más egoísta que puedas—

- ¡Suficiente de tanta palabrería!- exclamó Scarfire.- ¿¡Dónde está la Vasija!?- sus ojos ascuas brillaron, parecía ser alguna clase de amenaza.

- No me intimida alguien tan cobarde y débil como tú...

- Yo al menos tengo alas con las que sobreponerme contra los demás...- sonrió burlón.

Un profundo gruñido se dejó escapar de los labios de Sharxor que cerró uno de sus puños, acto que inmediatamente provocó que Scarfire retrocediera varios pasos, pues, además de la amenaza implícita, la mera presencia del dragón de escamas negras se volvió repentinamente tenebrosa. Sebaque y Maeva tuvieron que retroceder también, Rostian intentó mantenerse firme, pero en su expresión se pudo ver la crispación y el sufrimiento de aquella aura tan intimidante desprendida únicamente por el puño cerrado.

- No necesito alas para demostrar que soy más fuerte que tú.

- Dependes de tu magia para poder vencer.- dijo Scarfire entrecerrando los ojos de forma amenazante.- Por eso engañaste a los hermanos Mowet para que destruyan el libro por ti. Por eso engatusaste a Hearst para que se fuera contigo; lamentablemente se terminó enamorando, y ese es un error del que yo no pienso hacerme responsable si termina herida, porque no eres más que un maldito ególatra sin sentimientos. Lo más seguro es que ni siquiera la consideres tu reina igual que me hiciste a mí.- reclamó con el ceño fruncido.- Y precisamente porque dependes de la magia ha sido que Lion casi termina contigo. Y hubiera sido mejor que lo hubiera hecho...

- Soy perfectamente capaz de matarte a puñetazos... No te atrevas a volver a insinuar que Hearst no es mi reina... No te atrevas a compararla contigo.- entrecerró los ojos.- Ella, al contrario que tú, es fuerte, tiene potencial, y fue capaz de destruir tu libro con facilidad... Prueba suficiente de que ella es cientos de veces mejor que tú.

- Demuéstralo. ¡Demuestra que de verdad estás dispuesto a lo que sea por—!

- ¡BASTA!- Rostian miró a Clay con los ojos muy abiertos, lo mismo para Scarfire.- Ni una palabra más. Ninguno de los dos.- miró fijamente a Hearst, después a Sharxor, su mirada era fría y amenazante.- No pienso permitir que objetices a mi hermana menor. Si tanto la quieres, y tanto la respetas, no te atrevas a hablar de ella únicamente por sus cualidades mágicas.- dijo de forma fiera.- No todo es el potencial, ni la magia, ni lo físico... ¿Acaso no te importa lo más mínimo lo que sientes? ¿O acaso estás demasiado obsesionado con tomar el control del mundo que no te importa lo que los demás sienten por ti?- musitó de forma inspirada.- Hearst te quiere, y no le importa que quieras destruir o que puedas matar a todo lo que se te antoje con un maldito chasquido de dedos. Te quiere y no le importa que hayas asesinado a los protectores y que la hayas manipulado a tu gusto.- musitó firmemente.- Te juro que como desprecies esa confianza, cariño y ese sentimiento que tiene por ti, yo mismo pienso destrozarte la cara a puñetazos.

Scarfire y Rostian se quedaron mirando a Clay fijamente, ambos con el mismo sentimiento en el pecho, parpadeando con incredulidad por la forma tan natural con la que Clay expresaba sus sentimientos y su forma de ver el mundo. Era absurdo, ridículo e incluso irónico que tuviera esa forma de ver y concepción del mundo después de haber pasado toda su vida, sus veinte años de existencia encerrado en la prisión de Alca. Que tan solo con lo poco que había vivido estando en libertad tuviera esa idea tan clara y pura...

Dralilac Sharxor bajó la mirada hacia Hearst, cuyos ojos estaban brillando y sonrió emocionada ante las palabras de su hermano, incluso sujetó su mano al escuchar aquellas palabras, casi como si ella fuera quien las estaba diciendo, muy a pesar de que no se había atrevido a pronunciar una sola palabra después de la pelea que Scarfire y él habían tenido, y que casi llegaban hasta los puños por su mero orgullo. El dragón se mantuvo serio durante unos segundos.

- Será mejor que me vaya...- hizo amago de apartar la mano del hombro de Hearst, pero esta no lo dejó.

- Estás herido...

- Me recuperaré...- respondió.- Eventualmente...- giró los ojos hacia sus alas.- Tal vez...- desvió los ojos.

Hearst lo miró con duda en sus ojos.

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Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo

Bye~

By Silvia Line

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67.- Protección, ingenuidad y confianza (Medieval - Fantasy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora