𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟔𝟐

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María no dijo nada, su voz parecía estar atrapada en su garganta, y cuando tragó saliva duramente y movió los labios, notó la carencia de lengua en el sutil movimiento de la boca. Clay miró esto perturbado... Parpadeó sorprendido después de abrir los ojos en estado de shock. La joven rubia vaciló, las marcas circulares en cada articulación parecía darle cierto aspecto de muñeco inanimado, pero estos tatuajes no eran una limitación de movimiento... Clay no emitía un aura hostil, fue por ello que la rubia agarró su mano para levantarse del suelo, sus piernas temblorosas y sus pies descalzos vacilaban al andar.

- ¿Puedes andar?- quiso asegurarse.

Ella asintió lentamente con la cabeza. Llevaba un vestido color cactus estilo griego, con una banda de un verde más oscuro que cubría desde un hombro hasta la cadera, pero parecía ser parte del propio vestido, algo decorativo...

- Sígueme...- sin soltar su mano, recorrió a la inversa el camino tan inestable que había tomado, dándose cuenta de que parte del camino estaba descuartizado por los ataques, placajes, golpes o sacudidas.

El palacio parecía estar desintegrándose lentamente, aquella visión era escalofriante.

Cuando Clay subió la vista hacia el espacio vio desperdigados todos los trozos del palacio, Scarfire recibiendo un golpe que pareció ser fatal y que lo estampó contra uno de los pasillos, lugar del cual no se levantó.

- ¡Scarfire!- gritó Rostian, el eco resultó doloroso, y Clay no se quedó impasible ante ese tono de voz tembloroso y quebradizo.

Clay sintió su corazón palpitar con fuerza, unas punzadas tan dolorosas que le robaron el aire, era como si estuvieran azotándolo o pateándolo de forma horrible y poco piadosa; mientras trataba de recorrer los irregulares escombros del palacio dorado para salir del lugar, tomando la ruta por la que Scarfire estaba... Aunque no importaba mucho, puesto que el dragón se encontraba prácticamente cercano a la salida por el efecto rebote de su cuerpo. En el fondo agradeció esto, pues podría poner a María a salvo al mismo tiempo que se acercaba a Scarfire.

Sebaque entró en el lugar corriendo y tendió sus palmas hacia Scarfire. Sus palmas se iluminaron en verde esmeralda y un aura cubrió el cuerpo del dragón de escamas rojas en su totalidad.

- ¡NO!- gritó Sharxor recuperando la forma humanoide y lanzando un ataque de ráfaga con un movimiento del brazo, parecía como si sus garras se hubieran extendido enormemente para golpear a sus enemigos a larga distancia.

- ¡Sebaque!- gritó Bechter histérico, se abalanzó y lo apartó.

- ¡BECHTER!- chillaron Clay y Hearst al mismo tiempo.

Sharxor se quedó blanco en ese mismo momento y sus pies tocaron el suelo dorado del palacio. Su corazón palpitó con fuerza, era debido al temor de Hearst y la reacción que esta podría tener.

Hearst palideció...

Corrió hasta el lado de su hermano, deslizándose los últimos centímetros arrodillada, igual que Clay, que dejó a María detrás, aunque esta entendió perfectamente el motivo y no se detuvo... Rostian corrió al lado de Clay. Maeva también se adentró en el palacio y sujetó la mano de María gentilmente para guiarla hacia el exterior.

Las palmas de Sebaque brillaron con verde esmeralda y el aura curativa pasó de cubrir el cuerpo de Scarfire— quién había retomado consciencia—, a cubrir el cuerpo de Bechter, que había caído casi inerte al lado de Sebaque.

El dragón de escamas rojas se sentía bastante mareado, algo desorientado, y vio la cara llena de desesperación de Clay, tratando de despertar a su hermano Bechter sacudiendo su cuerpo un poco, casi como si intentase despertarlo de una pesadilla en la que este estaba sumido.

Bechter, al mismo tiempo, estaba siendo curado por Sebaque, como Rostian estaba a su lado asegurándose de su bienestar, pero más pendiente de Clay y su hermano menor. Intentando apartarlo de Bechter para que Sebaque pudiera concentrarse, pero sin aplicar fuerza autoritaria porque entendía el dolor por el que estaba pasando...

Sharxor por un momento se había quedado inmóvil, sus manos temblaron por lo que había hecho, completamente arrepentido de haber calculado tan inadecuadamente por la presión del momento y el estrés por el que estaba pasando. Debería haber golpeado el suelo, ese ataque no se suponía que—

Dual aprovechó esto para atacarlo. Un grito de cólera de parte del dragón de escamas negras fue suficiente para que Dual se diera cuenta de la inestabilidad emocional del dragón. Libra también percibió esto al ver sus ojos temblando y sus manos vacilando en su atacar o no.

María estaba a salvo, eso la mantuvo un poco más tranquila, pero no fue suficiente, quería ver a Sharxor muerto.

Movió sus manos una vez más para intentar apaciguar sus alaridos y el ataque frontal con el que nuevamente les aplacó.

Dual usó su única mano para intentar golpearlo en un ataque físico. Únicamente el aura de Sharxor fue suficiente para que la mano faltante de la entidad de piel azulada se desintegrara inmediatamente y este palideció, retrocedió asustado, quedando por detrás de Libra al ya no poder usar su magia y tampoco sus manos. Libra también sintió que la desesperación iba en aumento.

También al escuchar el grito de Clay y de Hearst, una negativa frenética y dolorosa...

El verde de Sebaque seguía brillando con intensidad... Pero ese verde se vio opacado por un tono morado tan intenso que incluso Sharxor se quedó congelado en el sitio con su forma humanoide.

- ¡SHARXOR!

Su alma se congeló, sus movimientos se paralizaron, sus manos retrocedieron. Tembloroso, se giró hacia Hearst, encogido del miedo.

Cosa inédita.

- H-Hearst... Mi reina; te juro que yo no—

- ¡LO MATASTE!

Libra y Dual también se quedaron paralizados, los ojos de ambos se abrieron hasta su punto máximo. Un poco más y se saldrían de sus órbitas.

La presencia de Hearst no era únicamente su pequeño cuerpo, estaba totalmente enfurecida, sus manos eran puños apretados con un aura morada rodeándolos, sentía tanta rabia que estaba totalmente descontrolada, su rostro estaba lleno de lágrimas: estaba furiosa y se sentía impotente.

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Aquí las opiniones ---------------->

Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo

Bye~

By Silvia Line

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67.- Protección, ingenuidad y confianza (Medieval - Fantasy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora