Rostian estaba sentado en una roca pulida que actuaba como espacio de entrenamiento desnivelado, tenía algunas talladuras, armas o golpes contra el suelo, tal vez los elementos, estaba esperando, con sus ojos en el cielo y viendo las nubes pasar en silencio. Una mano mantenía todo su peso, pues su espalda estaba ligeramente inclinada hacia atrás, y la otra mano se mantenía sobre su regazo. Una pierna cruzada encima de la otra le daba más comodidad a la postura. Sus dos hermanos observaban este gesto y les parecía algo nostálgico y melancólico.
Maeva había llegado a bromear silenciosamente con Sebaque, que Rostian estaba siendo demasiado dependiente de Scarfire Tuskdeus... Evaría no podía estar más de acuerdo. Sebaque era el único que no contestaba aquellas pequeñas provocaciones o burlas que no eran maliciosas, hacia su hermano mayor. Se acercó en silencio, sentándose en el borde de aquella roca, al lado de su hermano.
- Tal vez soy un poco patético por esperar a Scarfire mirando el horizonte.
- No lo eres...- negó.- Yo rezo cada media hora para que Bechter esté bien...
- ¿Qué significa eso?
- Ha sido la primera vez que alguien de mi edad y yo congeniamos... Nadie tiene mi mismo tipo de magia, se hace un poco abrumador, y ver a alguien con tanto potencial me resulta fascinante...- Rostian sonrió un poco.- Pero no es lo mismo que te pasa con Clay.
- Algunas veces me siento mal por Scarfire.
- Él te acepta... Y si no te ha exigido que aclares tus sentimientos, es porque lo entiende y te quiere tanto como tú a él...
- Muchas veces me cuestiono si realmente soy capaz de sentir amor de la misma manera con diferentes personas...- admitió perdiendo la mirada en el cielo una vez más.- Clay es... Bueno... Me da miedo...- admitió alzando las dos cejas.- Su potencial... El potencial de esos tres hermanos me da mucho miedo...
- Ciertamente...- susurró Sebaque.- Evaría y Maeva no dejan de reírse por tus suspiros enamorados.
- Sabes que ha dejado de molestarme eso desde que Scarfire y yo empezamos a salir.
- Y de eso han pasado ya... Demasiados años.
- No hables como si tuviera treinta.
- Tienes veinticinco...
- Como si eso fuera malo...
- No, realmente no. Te haces viejo.
- Tú vas detrás...- se rio entre dientes.
- Me quedan siete años para llegar a esa edad...- picó apartando el brazo de su hermano alrededor de su cuello.- Y tú ya tendrás casi cuarenta años cuando eso suceda.
- No es cierto...
Los dos hermanos bajaron la mirada hacia Maeva y Evaría. Estas dos se estaban riendo, no a carcajadas, pero casi. Hubo un par de miradas de desconcierto con aquellas miradas divertidas de parte de las dos mujeres.
- Muchas veces me cuestiono tu edad, Rostian...- dijo Evaría cruzada de brazos.- Y tu prestigio como líder de los orcos Medi.
- Estoy orgulloso de ser el líder de mi gente...- respondió bajándose de un salto de aquella piedra pulida en la que estaba sentado.- Si fui nombrado como dirigente no fue por otra cosa que mi carisma.
- Corrección... Tú relación con Tuskdeus.- se burló entre dientes Maeva, pero sin maldad.- Tu amistad con el culto y la protección que este podía brindarle a nuestra gente fue lo que decidió que fueras el dirigente de nuestro pueblo.
- No le restes importancia a mis logros...- refunfuñó mirando a su hermana.- ¿Ya está de vuelta o todavía no?- se giró hacia Evaría, esta negó con la cabeza.
- Su energía mágica está lejos, tal vez ya atravesó todas las ruinas Titlán y la montaña Citlal... Con algo de suerte atravesó el lago Texco y ya está en la aldea Xica...- Rostian suspiró agobiado.
- Creo que estás dramatizando demasiado cuando esto ni siquiera te afecta personalmente.- Maeva se cruzó de brazos alzando una ceja lentamente.
Evaría asintió con la cabeza, dándole la razón a la de cabellos castaños con el pañuelo eclesiástico sobre su cabeza. De un segundo a otro la rubia se giró hacia su espalda, este gesto captó la atención de los tres hermanos Medi. Los ojos rojos de la joven del culto al dragón rojo parpadearon varias veces con cierto grado de incredulidad, apretó los labios.
- Ya regresa... Su poder incrementa por momentos, está volando muy rápido...
- Los vientos deben ser buenos...- murmuró Sebaque por lo bajo.- Ve al palacio a descansar, ya es tarde; no te preocupes... Nosotros nos encargamos de su llegada...- Evaría asintió con la cabeza y fue hacia los muros de Mesina para alertar a todos los integrantes que Tuskdeus estaba de vuelta...- Y tú deja de mirar el cielo por cinco minutos...- Maeva soltó una carcajada limpia por la forma en la que el Sebaque tiró del brazo de su hermano hacia aquel templo en la roca.
- ¿Por qué vas hacia el templo?- preguntó Maeva situándose al lado de Sebaque.
- Tomar la reliquia de tierra en caso de que algo malo suceda... Tengo un mal presentimiento.- reconoció.
- Es raro viniendo de ti...- musitó Maeva.- Normalmente prefieres no ser hostil, de hecho, estabas en contra de que Scarfire y los dracomantes limpiasen el burgo de malditos...
- En esta circunstancia y sabiendo que Sharxor está libre de ataduras, no confío en absolutamente nadie...
- Con razón...- emitió Maeva como si fuera evidente.
Rostian se detuvo abruptamente y se giró hacia su espalda, estando en aquella pequeña altura al subir las escaleras de piedra, casi de formación natural, podían ver en perspectiva la ciudad entera, el palacio se encontraba majestuosamente abierto para darle la bienvenida a todos los que estuvieran heridos o infestados en magia. Mesina estaba viviendo su mejor momento en aquellos instantes, pues la ciudad gozaba de una salud impresionante. Más allá de la ciudad, el valle y las montañas que rodeaban el burgo eran testigos de cómo el dragón rojo aparecía en el horizonte cuando la noche estaba a punto de caer sobre sus cabezas. Sus aleteos estaban cansados, un día entero volando era suficiente motivo para estar agotado... Rostian se puso en marcha, volviendo el camino casi corriendo. Los otros dos hermanos se miraron de reojo y acabaron optando por acercarse a Scarfire sin tener el báculo de tierra en sus manos, en aquellos momentos, la salud de Tuskdeus era mucho más importante.
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Aquí las opiniones ---------------->
Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo
Bye~
By Silvia Line
[1082 Palabras]
P.D.: Las localizaciones de Titlán, Citlán y Texco están basadas en espacios relacionados con México (Una ciudad, un lago y una montaña).
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67.- Protección, ingenuidad y confianza (Medieval - Fantasy)
FantasyLa humanidad fue castigada en la cárcel de Alca por sus pecados después de haber destruido el mundo en una guerra biológica mundial. Custodiada por el monstruo Traz, y malditos por la Diosa del fin del mundo Dealine; la humanidad se vio castigada co...