𓂃 ࣪˖Capítulo 43. ִֶָ𐀔

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૮꒰ྀི⸝⸝PARK ROSEANNE⸝⸝꒱ྀིა

—Así que esta es la casa, si entran espero que no toquen nada, todo estará merodeado por estos policías —Do-yun señaló a los policías que nos acompañaban—. Y si les permito estar aquí hoy es solo porque soy el jefe y me desperté de buenas.

—Eso dice mucho —murmuró Dahyun.

—¿Cómo dijiste?

—No, nada —se aclaró la garganta—. Que el día promete.

—Sí, parece que sí. Entremos.

Todos seguimos a Do-yun, quien en cuanto entró a la casa se cubrió la nariz, todos imitamos esa acción. El mal olor que desprendía era insoportable, tanto que mis ojos comenzaron a lagrimear y sentí mi estómago revolverse. Arrugué el ceño y todos seguimos avanzando. Do-yun le ordenó a dos de sus policías revisar las habitaciones de arriba.

Mientras que nosotros revisamos la parte de abajo, nos tendió unos guantes y ordenó que buscáramos con precaución, que no tocáramos nada y siguiéramos sus pasos.

—Lisa me dijo que podía estar enterrado atrás —le recordé.

—Pues más vale que busquemos ahí.

Nos movimos hasta allí, Do-yun agarró la pala y empezó a cavar, pero no lo hizo solo, recibió ayuda por parte de sus policías, tanto Dahyun como yo nos pusimos a un lado. Solo los observábamos, pero no tuvieron que cavar mucho, porque antes de lo esperado encontraron la señal de que había algo enterrado ahí.

Do-yun me dio la razón y le pidió a sus hombres que lo ayudaran, colocándose una mascarilla encontraron lo que estaban buscando. Sacaron el cuerpo de Jimin desnudo, sentí una arcada y me giré lo antes posible para no presenciar aquella escena.

—Qué puto asco, es de las peores escenas que he visto —Do-yun simplemente no podía creer la escena—. Necesito que llames al forense y que en cuanto antes el abogado esté aquí, tenemos alguna que otra prueba para poner en investigación a la Señorita Kim, junto a la declaración de Lisa podemos actuar.

—¿Se puede hacer algo más? —preguntó Dahyun.

—Sí, que ustedes se vayan a casa, de lo otro me encargo yo, ya hicieron suficiente.

—Pero queremos seguir ayudando —musité.

—Ayudaron, gracias a ustedes, la asesina de mi hija será atrapada, pero no les puedo prometer la libertad de Lisa, no por completo. Tiene mucha culpa.

Lo sabía.

Sé perfectamente que Lisa no será liberada al instante, pero tenía la esperanza de que por lo menos ella tuviese la libertad bajo fianza. Por mientras, ni Dahyun ni yo podíamos hacer algo. Por eso mismo, viajé a mi departamento y me aseguré de que todas mis puertas estuvieran bien cerradas.

No era lo único, Do-yun se había encargado de poner un policía en mi puerta, el cual me avisaba antes de que alguien siquiera tocara mi puerta, por eso tenía una preocupación menos.

Estaba agotada y solo quería dormir, así que me di una ducha y me puse mi pijama, me preparé un té y me senté unos segundos a meditar sobre el cómo la seguía pasando Lisa, siempre que pasaba por allí me decía lo mucho que extrañaba su libertad, y no la culpo, yo extraño su libertad.

Cuando estuve a punto de irme a dormir, el policía me llamó avisándome de que había una joven en mi puerta. Yo le pregunté quién era, y me agarró por sorpresa de que fuese Jisoo. Obvio corrí a la puerta y le pedí que pasara, sonará irónico, pero yo confiaba en Jisoo.

Jupiter. (Jenlisa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora