𝐌𝐋 | Levantó ligeramente su mentón y sus ojos se encontraron con los míos con determinación. Tomé una nota poco profesional sobre cómo el color azul cristalino brillaba a la luz, casi como el sol que brilla en el océano danzante. A pesar de ser un...
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Caminé hacia la sala específica que el Doctor Kenobi me indicó para tener mi primera sesión con Skywalker. Mantuve su expediente bajo mi brazo mientras un guardia abría la pesada puerta de metal por mí; haciendo que las bisagras chirriaran ensordecedoramente. —Gracias—, le sonreí amablemente con un asentimiento antes de entrar en la habitación.
Miré la mesa que tenía una barra de metal atornillada en el centro, que estoy segura es donde planean esposar sus manos por mi seguridad. Tomé asiento en la incómoda silla de aluminio y coloqué su expediente frente a mí, comenzando a hojearlo mientras esperaba su llegada.
Hasta ahora, lo que he recopilado es que muestra comportamiento narcisista y tiene múltiples tendencias psicopáticas relacionadas con la sicopatía. Un trastorno de personalidad antisocial que afecta su remordimiento y empatía, e incluye rasgos como problemas de comportamiento, incapacidad para amar, impulsividad, irresponsabilidad, mentiras patológicas, etc. Podría seguir durante horas.
El asesinato de sus padres no fue su último crímen, tengo antecedentes penales que datan de su adolescencia hasta los veinticuatro años; actualmente tiene veintiséis. Y según las notas de su anterior médico, incluso se involucró en una pandilla clandestina, aunque su papel en la misma sigue sin identificarse. Finalmente, fue atrapado por múltiples cargos de asesinato y drogas debido a un informante anónimo, y diagnosticado con un trastorno psicótico, lo que lo trajo aquí. Y ha estado aquí desde los veinticuatro años, lo que supongo explica por qué no hay nuevos antecedentes penales.
La puerta de la habitación se abrió, apartándome del expediente; lo cerré mientras levantaba la vista para ver a tres guardias escoltando a mi paciente. Sus ojos se encontraron con los míos y sonrió mientras los hombres que lo sostenían lo empujaban agresivamente hacia la silla al otro lado de la mesa, frente a mí. —Es bueno verte de nuevo, cariño—, me guiñó un ojo mientras los guardias aseguraban sus manos con esposas conectadas a la varilla de metal entre nosotros.
—Es Doctora (t/a), no cariño—, sonreí antes de mirar a los guardias que aún estaban junto a él. —Pueden esperar afuera, prefiero privacidad durante las sesiones.
Uno de los hombres negó con la cabeza, —No, señora, tenemos órdenes de permanecer aquí por su seguridad.
Bajé la mirada hacia las manos de Anakin esposadas de manera segura, sin mencionar las esposas en sus tobillos como si fuera un prisionero. —Estaré bien, hay una ventana en la puerta por la que pueden echar un vistazo si eso les hace sentir mejor—. Me recosté en la silla mientras giraba mi bolígrafo en mi mano, esperando impacientemente a que se fueran.
Muchos pacientes prefieren no hablar si hay otras personas en la habitación. Pero si es a solas, tienden a ser más receptivos; que es exactamente lo que necesito que él sea.
El guardia cuya identificación dice 'Kit' me miró con irritación antes de indicar con la cabeza a sus hombres para que lo siguieran fuera de la habitación. Cerraron la puerta de manera agresiva y rodé los ojos antes de volver a mirar a mi paciente, que me observaba con intriga.
