CAPÍTULO 20

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La llama de una fogata improvisada alumbraba y calentaba el interior de una oscura cueva llena de humedad en donde aguardaban dos ninjas gravemente heridos, los suspiros y jadeos llenaban el espacio.

—¿Hasta cuándo podrás usar tu chakra? —preguntó el pelinegro, hace horas que se habían refugiado en aquella cueva y la chica aún no daba indicios de mejorar. Él se encontraba acostado boca arriba y la pelirosa estaba sentada a un lado.

—No lo sé... —respondió en un susurro.

—Deberías curarte... —La miró con culpa, la pelirosa llevaba horas quitando el veneno con burbujas de chakra verde, y ya había cerrado la herida que tenía en el abdomen, ella solo se había curado superficialmente, estaba seguro de que la Senju se encontraba en peor estado.

—Si no saco el veneno de tu sistema morirás —mencionó sin dejar de hacer su labor, tenía la esperanza de que en cuanto regresara su flujo de chakra a la normalidad su cuerpo se curaría automáticamente, pero... ¿Realmente recuperaría su chakra antes de morir?

Temía que necesitara un antídoto para contrarrestar lo que la castaña le había inyectado.

Tenía que sobrevivir su boda estaba a unos días de celebrarse. Las lágrimas se acumularon en sus cansados ojos, el solo pensar que jamás volvería a ver a su amado la hacía sentir un dolor en el corazón aún más intenso que el de su abdomen.

—Tal vez sería lo mejor —dijo el Uchiha, con una sonrisa de medio lado.

—Cállate, esas delirando —Lo miró con burla.

—Hmp... ¿yo delirar?, estás loca, el gran Obito Uchiha nunca haría eso —Cerró sus ojos y negó como si de un niño pequeño se tratase.

—Oh si, el gran Obito Uchiha nunca quedaría de piedra al ver a una mujer —Los ojos del pelinegro se abrieron de golpe.

—Tsk... no se lo digas a nadie, es tan humillante...

—¿Ah sí?, me estás dando un arma para amenazarte en un futuro —Levantó una ceja.

A pesar de sus estados trataban de tranquilizarse mutuamente, ambos sabían que estaban a un paso de la tumba.

—Si es que hay un futuro y no morimos aquí —Rio el pelinegro.

—No vamos a morir... te prometo que no vamos a morir —La expresión de la pelirosa fue de tristeza y esperanza mezcladas con determinación.

La cueva quedó en silencio, la pelirosa cabeceaba, el pelinegro jadeaba cada que le retiraban veneno, eso era peor que un Sasuke en el culo..., espera un momento así no iba era un grano en el culo, si eso...

—Lo siento... —El Uchiha rompió el silencio después de varios minutos.

—¿Por qué?

—Por todos los ratos amargos que te he hecho pasar...

—Por dios..., creo que ya estoy delirando —La pelirosa no podía creer lo que había escuchado, supongo que ya estoy muerta... pensó.

—Mocosa estúpida —murmuró el pelinegro con el ceño fruncido.

—No, parece que no estoy delirando —dijo después de escuchar la forma en la que la había llamado.

—Lo dije en serio —El pelinegro hablaba enserio cuando soltó un "lo siento", esa niña tenía que aprovechar que su estado era vulnerable, obviamente en sus cinco sentidos jamás diría eso, ¡jamás!

—Te creo..., ¿Cómo te sientes?

—Bien, muy bien, de hecho, podría saltar y correr sin problemas —contestó sarcásticamente.

EL CLAN UCHIHA... ROSA?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora