CAPÍTULO 18

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La puerta de la mansión Uchiha era tocada fuertemente con desesperación. Era de madrugada, las 4:40 para ser exactos. La pelinegra se levantó rápidamente de su cama y corrió hacia la entrada, abrió y se encontró con un joven ninja respirando con dificultad.

—¿Qué sucede? —preguntó Mikoto con el ceño fruncido.

—Es... es Óbito-sama —dijo tomando aire —, Esta en el hospital.

Mikoto miró por encima del hombro, toda su familia se había despertado y escuchado el mensaje, la Uchiha agradeció al mensajero, todos se apresuraron a vestirse para ir al Hospital.

Cuando llegaron a la recepción preguntaron por el Uchiha a lo que la recepcionista les informó que tenían que esperar en la sala de espera a que saliera del quirófano.

Itachi vio a Hinata Hyuga sentada con las manos en su pecho, parecía estar rezando y a su lado Neji Hyuga con su rostro inexpresivo recargado en la pared.

—¿Por qué están aquí? —preguntó acercándose al Hyuga.

—Encontramos a tu tío y a Sakura al borde del colapso, estamos esperando a que nos den noticias, la familia de Sakura no debe de tardar en llegar —respondió el Hyuga.

La que había llegado en segundos había sido Tsunade pasando directamente a urgencias a atender a su hija, después llegaron los Uchiha y justo en ese preciso momento estaban llegando los Senju.

—Tsk..., esto es tu culpa Hashirama, debiste haberme avisarme que enviarías a Sakura con ese monstruo —Tobirama estaba molesto con su hermano mayor.

Madara ni siquiera los miro, estaba preocupado por su hijo que en ese momento se encontraba en urgencias, no tenía tiempo para discutir.

—¿Sabes dónde está mi hermano? —preguntó Itachi al Hyuga.

—Lo más probable es que siga en Barba Q con los demás.

—Gracias, iré a buscarlo...

—No te preocupes, hace unos minutos fue un mensajero por él.

La puerta del quirófano fue abierta de golpe, de esta salió Tsunade con su rostro serio —. ¡Traigan otro maldito desfibrilador! —gritó, entró nuevamente a urgencias.

Todos se tensaron al escuchar esa palabra.

—¿Para quién carajos necesitan eso? —preguntó Sasuke llegando a la sala de espera junto a sus amigos.

—Hijo, no lo sabemos —contestó Mikoto.

Una enfermera salió de urgencias —, Familiares de Óbito Uchiha...

—Aquí, soy su padre —Madara se acercó a ella.

—El paciente está fuera de peligro podrán verlo en cuanto despierte —informó, los Uchihas estaban agradecidos de que Óbito estuviera bien.

Unos enfermeros pasaron corriendo con la máquina solicitada por la rubia. Hinata e Ino sollozaron se abrazaron de sus novios, la sala de espera quedó en un silencio que hacía que los minutos se sintieran eternos. El ambiente estaba cargado de tensión.

El Uchiha menor sintió que su corazón latía lentamente, un desfibrilador solo era usado si el paciente sufría de un paro cardíaco, se pegó de espaldas a la pared y se deslizó lentamente hasta quedar sentado en el suelo, llevó una mano a su cabeza y agachó la mirada.

Tobirama recargó su frente en la pared, esto tenía que ser un sueño, si era un sueño, y cuando despertara su pequeña nieta lo recibiría con una sonrisa.

Los alumnos de Orochimaru estaban desconcertados, solo les habían avisado que una tal Sakura y un tal Óbito estaba en el hospital, Naruto y Sasuke habían salido disparados hacia allí, Karin sintió el chakra del zorro pesado miró al Uzumaki que abrazaba a Hinata, pero su rostro estaba serio, y después sintió el chakra inestable del Uchiha menor parecía que muchas emociones pasaban por él.

EL CLAN UCHIHA... ROSA?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora