Sendero primigenio #2

【 Capitulo 198 】Reproche y verdad

-Llego la hora...-.
La poderosa voz celestial de aquel joven, retumbó en el aire antes de que pudiera darse cuenta de que toda la compañía de la milicia de seguridad restante, había sido casi incinerada por aquel despiadado rayo de energía sagrada.

Bator gruño con molestia, aun estando el presente, Saharam se había atrevido a desafiarlo..y no solo a eso, si no que también parecía querer ganar tiempo.

Los salvajes ya habían hecho suficiente alboroto, muchos imperiales habían muerto tratando de detenerlos, y el no estaba dispuesto a tolerar que esto se extendiera por más tiempo.

-¡¡¡ES SUFICIENTE, SAHARAM!!!-.
El maestro Elitezard había hecho un barrido hacia Coraline,
Frenando en seco el descenso de su arma sobre sus desprevenidos alumnos.

Estos se giraron, y quedaron anonadados pues estuvieron a punto de morir partidos en pedazos sin haberse dado cuenta.

-Ya han causado suficientes problemas...y lo peor de todo,
Es que yo pude frenarlo a tiempo-.

-¡¡Concéntrate maldito!!-.
Rugio Demian mientras se impulsaba hasta el y arrojaba por el impacto de su vórtice, a los alumnos Elitezard que recién se recuperaban del shock.

~Maldición..debo, concentrarme~.
Octavio plantó sus pies en el suelo, y lanzó una barrera de energía para detener el avance del salvaje.

Este se estrello contra ella, antes de poder impactar contra Bator,
Y el maestro Elitezard aprovecho la potencia del estruendo para arrebatarle el arma a la chica de piel gris.

Coraline no estuvo muy contenta con este acto, y giro todo su cuerpo de una manera brusca, para así recuperar su arma y dar un corte profundo.

Pero de nuevo, su rival la esquivo con facilidad, y ya se había puesto detrás de ella.

-Su convicción es asombrosa, lastima que luchan por la causa incorrecta-.
Les reprochó.

-¡¡Querer ser libres no es una causa incorrecta!!-.
Saharam se lanzó al vuelo, su recorrido fue rápido y una estela pitante de ruido anunció su llegada por el cielo.

Bator no tuvo de otra, más que hacerse aún lado para que un tajo no cayera justo en su cara.

-Vaya..me imoresionas hermano, parece que ahora si lucharás en serio-.
Le dijo su hermana, mientras asentía con aprobación al verlo portar una espada especial.

...Esa era el arma hecha de plata, otorgada por un Glirrich hacia mucho tiempo...

-No podía desperdiciar tus esfuerzos por recuperar nuestras cosas...además,
Mi maestro no es alguien a quien podamos tomar a la ligera-.
Saharam estuvo a punto de levantar su espada, ya la había cargado con parte de su energía sagrada, y con ella planeaba lanzar un tajo de luz.

Pero un repentino cambió de temperatura hizo que cambiará toda su atención hacia sus costados.

-¡El maestro Bator no es el único al que deberías tomar en serio, amigo!-.
El alumno pelirrojo se hallaba justo a un par de metros detrás de Demian, la barrera de energía de Octavio ya había desaparecido, por lo que ahora tenía el camino libre para que su mejor ataque le diera de lleno a los tres Titanes.
-¡¡¡MUERAN Y SIENTAN EL INFIERNO CREADO POR MI IRA!!!...
¡¡¡BIG FIRE!!!-.