CAPÍTULO 51

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NARRAS TÚ

Los dos días que pasé en el hospital fueron muy especiales. Estuve acompañada de mi hijo Henry, y de mis esposas Katie y Mel, que se turnaban para estar conmigo. También recibí la visita de mis mejores amigas Emma y Sophie, que me cuidaron y me hicieron reír. Y por supuesto, de nuestras familias, que vinieron a conocer y a mimar a nuestro bebé.

Fue una experiencia llena de amor y de alegría, pero también de cansancio y de dolor. Tuve que recuperarme del parto, que fue muy intenso y agotador. Tuve que aprender a amamantar a mi hijo, que a veces me hacía daño y me dejaba los pezones irritados. Tuve que adaptarme a los cambios hormonales, que me hacían llorar y reír sin motivo.

Pero todo valió la pena, cuando vi la carita de mi hijo, sentí su calor y su olor. Cuando lo tuve en mis brazos, lo besé y lo acaricié. Cuando lo escuché llorar, y lo calmé con mi voz y mi leche. Cuando lo vi sonreír, y me llenó el corazón de felicidad.

DÍAS DESPUÉS…

Al tercer día, la Dra. Taylor nos avisó que ya podíamos irnos a casa. Nos dijo que el bebé estaba sano y fuerte, y que yo estaba recuperada y lista. Nos dio las indicaciones correspondientes, como los cuidados que debíamos tener, las citas que debíamos seguir, y los documentos que debíamos tramitar. Nos felicitó, y nos deseó lo mejor.

Salimos del hospital, con nuestro hijo en brazos. Lauren nos esperaba en el coche, pero cuando nos íbamos a subir aparecieron un grupo de reporteros, nos felicitaron y preguntaron algunas cosas.

Les respondí de forma amable al igual que Katie luego nos disculpamos y despedimos de ellos agradeciéndoles por estar preocupados por nosotras, ingresamos al auto mientras que Mel se quedó a conversar más con ellos.

Nos acomodamos en el asiento y observamos en silencio a nuestro pequeño Henry quien dormía plácidamente en su sillita, un momento después ingresó Mel apenas se acomodó, Lauren nos llevó a nuestra casa.

MINUTOS DESPUÉS…

La fiesta de bienvenida fue una sorpresa que nos habían preparado con mucho cariño y esmero. Cuando entramos en la casa, nos recibieron con aplausos y vítores. Había globos de colores, carteles con mensajes de felicitación, y una gran pancarta que decía “Bienvenido Henry”. Nos sentimos muy emocionadas, y les agradecimos por el detalle.

Nos llevaron al comedor, donde habían puesto una mesa con un pastel de chocolate, galletas, cupcakes, y otras delicias, es decir, algo más saludable para mí. Había también una mesa con regalos para el bebé, como ropa, juguetes, libros, y mantas. Nos dijeron que era un gesto de cariño, y que esperaban que nos gustaran. Nosotras les dijimos que eran unos detalles preciosos, y que nos encantaban.

Nos sentamos en el sofá, y les cargaron a nuestro hijo, pero él empezó a llorar así que inmediatamente Katie y Mel se acercaron para cargarlo, Katie al ver eso le dejó a Mel para que lo calmara. Todos observaron la escena con admiración, cuando Henry se calmó lo bajamos en su carrito quedándose dormido.

Luego, se sirvieron un trozo de pastel disfrutando mientras que a mí me dieron un poco de frutas. Hice un pucherito y mis esposas me dieron un beso tierno dándome ánimos para poder comer, al final terminé disfrutando.

Después, nos entregaron los regalos, y nos ayudaron a abrirlos. Nos mostraron cada uno de los obsequios, y nos explicaron por qué los habían elegido. Nos dijeron que eran cosas útiles, hermosos y divertidas. Nosotras les dijimos que eran cosas maravillosas, originales y especiales. Les dimos las gracias, y les dimos un abrazo. Les dijimos que eran unos regalos increíbles, inolvidables, y generosos.

Más tarde, me despedí de ellas excusándome que estaba cansada, Katie y Mel inmediatamente se ofrecieron a ayudarme así que acepté encantada.

Nos dirigimos con nuestro hijo hasta su habitación y cuando llegamos él se despertó así que le dimos la bienvenida correspondiente diciéndole que a partir de hoy este va a ser su nuevo espacio, Henry nos miró y sonrió haciendo que nuestro corazón se derritiera de ternura.

El amor más allá de la fama (Katie McGrath, Melissa Benoist & Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora