Beso e inconveniente

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Una peliblanca y un rubio se encontraban sentados en un parque comiendo plácidamente un helado.

Hace un poco más de una semana Hawks se había animado a invitar a Fuyumi a una "cita" y desde ese día habían tenido más.

Ahora mismo se encontraban en una.

Durante ese tiempo, el hermano más pequeño de la chica fue a un campamento.

El joven rubio le coqueteaba a la chica de a lado y en cada "cita" le daba un regalo como chocolates, dulces o pequeños presentes, por su parte, la chica no podía evitar sentirse especial con ese trato de parte de su amigo.

No entendía por qué al ser detallista, coqueto, caballeroso o simplemente le hablaba con tanta confianza le provocaba sonrojos y que su corazón latiera al punto de sentir que se le saldría del pecho, no lo entendía o simplemente no lo quería ver.

Normalmente cundo alguien tenía el comportamiento coqueto que Keigo tenía con ella, se solía sonrojar, sí, pero también se sentía algo incómoda. En cambio con él, era todo lo contrario, con él sentía que podría recibir halagos para toda la vida. Cuando estaban a solas sentía como si sólo existieran ellos 2 y a la hora de despedirse sentía que no fue tiempo suficiente el que pasaron juntos. Al estar separados, en momentos, él se colaba en su mente.

Hawks: ¿Te gustan mucho los helados?.

Fuyumi: ¿Por qué lo dices?.

Hawks: Es que siempre pides uno, o algo congelado.

Fuyumi: Tienes razón, me gustan mucho, creo que debe ser por mi quirk. Al ser un quirk de hielo me hace sensible ante el calor, por alguna razón más que a mi madre y mi hermano.

Hawks: Entonces ya se que traer mañana.

Fuyumi: Keigo.

Hawks: ¿Sí?.

Fuyumi: Verás, te quería invitar a ver una película que se estrena mañana en la noche en el cine de aquí cerca, es una comedia romántica - no obtiene respuesta -. Claro que no estás obligado a ir, si no quieres puedo ir sola.

Hawks: Claro que voy a ir, lo que pasa es que justo tenía la misma idea en mente, pero te me adelantaste.

Fuyumi: Jajaja estábamos pensando en lo mismo.

Hawks: Parece que sí - su alarma suena - Rayos, ya se me hizo tarde, me tengo que ir, nos vemos mañana a la hora de estreno.

Se levanta rápido para irse a Fukuoka, pero Fuyumi lo sostiene de la muñeca para detenerlo. Se miraron directamente a los ojos. Dejo que sus instintos la dominarán y rápidamente se levantó y pego sus labios con los contrarios dándole un corto beso, se separó toda roja y sin darle tiempo de decir algo a el chico, se dio la vuelta y salió  corriendo mientras se despedía.

Mientras tanto Hawks estaba totalmente paralizado ¿Encerio había sucedido?¿No era otro sueño?¿Ella lo había besado?. Tuvo que pellizcarce para cerciorarse de que fuera real y valla que lo era.

Su corazón dio un vuelco cuando sintió esos suaves labios sobre los suyos y al comprobar que era real dio otro aún más grande.

Lleno de felicidad fue a casa de Mirko para ponerse su traje de héroe y contarle a sus amigos lo sucedido. No le importaba llegar a Fukuoka más tarde de lo usal, estaba seguro que si algo sucedía los héroes de su agencia se ocuparían sin ningún problema, además desde que conoció a Fuyumi, no era la primera vez que lo hacía.

Mirko y Edgeshot estaban algo incrédulos de que Hawks avanzará tan rápido y más porque Fuyumi era alguien bastante tímida, pero aún así la noticia les alegro y felicitaron a su amigo.

Después de tomar unos tragos para celebrar, Hawks regreso a su ciudad.

Lo que resto de día estuvo patrullando y justo cuando ya se dirija a casa recibo una llamada de la comisión de héroes para que fuera de inmediato, esto no le daba buena espina, pero tenía que obedecer.

Al llegar le dijeron que fuera a la sala de reuniones principal, donde lo estaban esperando la presidenta de la comisión y algunos de los jefes ejecutivos.

Hawks: Buenas noches ¿Para que me necesitan?.

Presidenta: Olvida las formalidades y dejémonos de rodeos, iremos directo al grano - definitivamente esto no era bueno.

Hawks: ¿Que pasa?.

Jefe 1: Hemos notado que últimamente no te encuentras haciendo tus deberes de héroe como es debido.

Jefe 2: Has estado tomando descansos para comer más largos de lo que son.

Hawks: Bueno, sí, pe... - es interrumpido.

Jefe 3: También tenemos entendido que has estado llendo a la ciudad de Musutafu.

Presidenta: ¿Nos podrías explicar que está sucediendo?.

Hawks: La razón por la que he ido a Musutafu es porque Mirko me a invitado a comer y charlar, y se a vuelto una costumbre - dijo lo más convincente que puedo, además de que no era una mentira del todo.

Jefe 2: Esa no es escusa para tus ausencias.

Jefe 4: Por una irresponsabilidad como esa podrías poner muchas vidas en riesgo.

Jefe 1: Por ejemplo hoy, tardaste horas en regresar ¿Qué hubiera pasado si un villano poderoso aparecía?.

Hawks: Mi agencia se hubiera encargado y de haber sido algo muy grave me llamarían y yo llegaría en un momento, no por nada tengo el título del héroe más rápido del mundo.

Presidenta: Pero en ese tiempo ¿Crees que no habrá daños, heridos, perdidas y bajas?

Hawks: ... - no respondió y bajo la mirada.

Presidenta: Que no se vuelva a repetir. Eso es todo, te puedes retirar.

Hawks se fue para intentar conciliar el sueño, pero con esto le iba a resultar complicado. Mientras tanto los demás en esa sala no se fueron.

Presidenta: No creí que nos fuera a mentir.

Jefe 1: Si tan solo supiera que lo estuvimos vigilando y sabemos todo.

Jefe 4: ¿Que deberíamos hacer?.

Presidenta: Por ahora nada, los romances no le suelen durar mucho.

Jefe 3: Pero esta vez parece ir en serio.

Jefe 1: Tines un punto. Ahora se esfuerza demasiado por darle una buena imagen, incluso le a revelado su nombre, uno que se supone ya no existe.

Jefe 3: ¿Y si esa mujer se vuelve un estorbo?.

Jefe 1: Aún peor ¿Qué tal si sabe sobre quien es y con quién trabaja, y le quiere sacar información para venderla a los villanos o usarla en nuestra contra?.

Jefe 2: Deberíamos investigarla.

Presidenta: ¡Basta! Ya callense. No haremos nada de eso, nadie hará nada, no podemos perder el tiempo con esto. No creo que Hawks sea tan tonto para no darse cuenta de que esa chica tenga una doble intención y en dado caso o si se vuelve un estorbo tenderemos que meternos en el asunto - dice con mirada siniestra.

Mi otra mitad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora