Lisa no se separa de su hermana ni un minuto, se han extrañado demasiado. La pequeña Somi le cuenta todo lo vivido durante su estadía bajo custodia del sistema y Lisa siente un alivio tremendo al darse cuenta de que al menos su hermana la pasó mejor de lo que ella hace años.
La hermana mayor le presta especial atención sin perderse ningún detalle, juntas están en el patio trasero de la casa de Jennie, Dominó recostado en el regazo de la niña mientras esta le acaricia la espalda.
Jennie las observa desde la cocina mientras prepara la cena, cuando su mejor amiga entra con aire de preocupación.
—¿Ya te contestó Jisoo?
—Nada, estoy preocupada —suspira Jennie con desespero—, ella nunca se pierde así, han pasado cuatro días.
—El portero no la ha visto tampoco, ya le dije que me avise en caso de que la vea.
—¿Será que está en casa de sus padres?
—Allá no contestan tampoco, es muy sospechoso todo.
—¡Hola mi amor grandotote! —entra corriendo Somi muy sonriente.
—¡Hola mi amor pequeñito, pequeñito muy pequeñito! —saluda Rosé con la misma alegría. Lisa se abraza a la cintura de Jennie dejando un beso en su mejilla.
—¿Podemos traer a Toulouse para jugar? Debe estar aburrido solito en casa.
—¿Quieres ir por él?
Somi recibe las llaves de la chica corriendo de inmediato a su casa para recoger al felino. Las demás chicas no temen por su seguridad, pues la casa de la psicóloga es bastante cerca y el conjunto bastante seguro. Mientras, las otras tres chicas continúan preparando las botanas para su tarde de películas.
—¿Va a venir Jisoo? —pregunta Lisa—. Yo... extrañar.
—Jisoo sigue sin aparecer —comenta la pelicorta—. No nos contesta las llamadas.
—¿Enojada?
—No sé bebé, me estoy empezando a preocupar de verdad.
Rosé vuelve a intentar con su teléfono un par de veces más y nada, hasta la misma Lisa lo intenta sin conseguir resultado.
Unos minutos después oyen la puerta abrirse, seguido del sonido del cascabel de Toulouse. Somi entra a la cocina llevando consigo una bolsa bien embalada que pone sobre el desayunador.
—¿Y eso?
—Jisoo me la entregó, me encargó que se las diera personalmente.
—¿Que Jisoo qué?
Rosé de inmediato abre la bolsa revelando dentro de ella varios sobres marcados con sus nombres.
—Jennie, Lisa, Rosé, Bambam y Somi —lee.
—¿Hay una para mí? —recibe la pequeña de las manos de Jennie.
Rosé y su mejor amiga se observan preocupadas temiendo lo peor. Cada una toma su respectiva carta y se aparta en silencio a leerla, como sabiendo que las palabras ahí escritas son de carácter privado y personal.
La chica de cabello castaño abre el pedazo de papel revelando la perfecta caligrafía de su mejor amiga comenzando a leer.
Rosé...♥
Sé que ahorita mismo me estás odiando por desaparecer...
—¿Qué comes que adivinas? —entorna los ojos.
Pero es que tenía cosas realmente importantes que hacer luego del juicio de Somi.
Una vez el mundo se me vino encima y alguien me dio el mejor consejo de todos; "Hay personas a las que no se les da muy bien hablar de frente las cosas; lo que tienes que hacer, es encontrar tu propio acto de valentía. Si se te da bien escribir, pues escribe. Si se te da bien hablar, habla. Si quieres dejar un mensaje de texto, déjalo, lo más importante es que entregues el mensaje que deseas transmitir y que seas muy sincera con este..."
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UNA PARTE DE MI ALMA // JENLISA // (JENLISA JENNIE+LISA BLACKPINK)
RomanceUna parte de mi alma" debe su nombre a lo que es literalmente: Una parte de MI alma. Lisa es esa parte de mí que es vulnerable y con un montón de trastornos; mi parte neurodivergente (esa palabra la aprendí un día y me suena de lo más genial). Es es...