✿ Una expedición de búsqueda y rescate en la espesa selva del Amazonas, que pone a prueba la resistencia y cordura del grupo.
Jungkook, un arqueólogo novato, que por suerte sigue vivo en esa misión, su vida da un giro de 180º luchando por sobrevivi...
☙ La noche llegó pesada y silenciosa y Jin limpiaba en silencio las heridas de su sobrino, él volvió a perder la conciencia por la alta temperatura, y meditaba en su corazón la conversación que tuvieron minutos antes, esa misma noche sin poder conciliar el sueño, salió muy silencioso como llevaba haciendo todas esas noches, y se alejó un poco tan silencioso como pudo, husmeo en la bolsa de su pantalón y sacó una navaja igual a la de Jungkook, y comenzó a raspar la corteza de un árbol, haciéndolo de la manera más silenciosa que podía, y así como cada noche marcaba dos o tres árboles a distancias considerables, cuando llegó al tercera árbol que planeaba marcar un poco alejado del campamento, una enorme mano lo sujetó de la muñeca y lo amagó por la espalda pegándolo al tronco del árbol, quedando su bello rostro pegado de una mejilla a la corteza del árbol y un codo ageno haciendo presión en su nuca para inmovilizarlo.
― ¿Se puede saber que maldita sea estás haciendo? ― Shueltame eshtupido ― al tener la cara muy presionada contra el árbol, su pronunciación se veía distorsionada. ― ¿Por qué demonios estás marcando estos árboles Jin? ¿qué carajos crees que estás haciendo? ― El enorme hombre soltó a Jin con un último empujón sobre el árbol. ― Eres un completo imbécil, maldigo la hora en que Jungkook te contrato para esta expedición, eres una bestia y espero que sea la última vez que me pones tus asquerosas manos encima.
Y en un movimiento ágil, el moreno tapó la boca de Jin y lo arrinconó contra el árbol, pero esta vez de una manera diferente, enfocó sus oscuros ojos, sobre los castaños del tío de Jungkook, Namjoon hizo el gesto con un dedo sobre sus labios haciéndole entender a Jin que guardara silencio y procedió a quitar suavemente la manos sobre sus labios, recibiendo inmediatamente un tremendo cachetadón de parte de Jin.
Namjoon le regresó la vista con una mirada de fuego, el profesor iba a comenzar a hablar cuando el enorme sujeto tomó a Jin del brazo y comenzó a correr entre la selva a toda velocidad arrastrando al más bajo a tropezones y arrastrones cuando perdía el paso.
― ¿Qué rayos? Namjoon…― exhalaba Jin apenas con el poco aliento que le quedaba, ya que Namjoon había corrido como desquiciado a través de la oscuridad de la selva.
El fortachón se detuvo súbitamente y pasó a Jin detrás de su cuerpo sosteniéndolo aún muy cerca de él a su espalda, ambas respiraciones estaban muy agitadas y Namjoon blandía un machete frente a ellos que fue lo único que se llevó para seguir a Jin, la oscuridad de la selva era aterradora, te absorbe y se apodera de tu tranquilidad y cordura, haciéndote temblar y aferrándote, volviendote loco, pero eso solo sucede a los de mente débil, por que en esos momentos Namjoon se mantenía con un temple de acero, no dejándose perturbar por la obscuridad, y mucho menos por los sonidos nocturnos.
El podía sentir que algo los estaba acechando, pero su visión no era tan buena como su temple por lo que no podía percibir precisamente de donde o por donde se encontraba su cazador, ni tampoco podía decir con certeza de que se trataba.
― Cuando cuente hasta tres, tienes que salir corriendo a toda carrera, al campamento y despertar a Yoongi y hacer que venga con un rifle. ― ¿Qué rayos?, yo no… no veo nada .. tire mi linterna cuando me atacaste… yo… yo… ― Jin balbuceaba aterrado por toda la situación, entendía que estaban escapando de algo pero no sabía de qué o de quien, además de que la comunicación con Namjoon no era tan buena como para comunicarle que diablos estaba pasando en ese momento― Dime ¿lo harás?, porque no correremos ambos al campamento y llevaremos algún animal o salvaje a que se coma alguno mientras duermen, o asesinen en todo caso. ― Y..y …y tú ¿qué harás? ― Intentaré sobrevivir para cuando Yoongi llegue, ¿estás listo precioso? ― No estoy listo y no me digas así, soy más que una cara bonita ― TRES
Jin no era una persona muy deportista incluso su condición física era bastante deficiente, pero hasta él se sorprendió de él mismo, por la velocidad y agilidad que mostraba al correr y evitar obstáculos, cual gacela, está seguro que incluso Tae, su mejor amigo Tae, jamás le creería su gran hazaña cuando se la contase.
Jin llegó despavorido al campamento, y entró a la tienda de Yoongi estrepitosamente que terminó con un helado cañón apoyado en el cuello y un furioso Yoongi por haberlo despertado y por haberlo asustado al haber entrado a su tienda tan escandalosamente.
―¿Acaso te estás vengando por lo de Jimin? ― ¿Qué?... No…Namjoon… Nam… Namjoon me … me mandó… por el rifle…. por ti y el rifle …
En cuanto escuchó esas palabras el chico malhumorado se levantó a toda prisa para ponerse sus botas y salir corriendo después de preguntarle hacia qué dirección debía ir.
― Quédate aquí y despierta a todos, no sabemos de que se trate. ― Pero… pero... per… ― Sólo haz caso.
Y sin más el chico pálido salió corriendo en la dirección indicada, Jin aún dudoso de que hacer, sólo despertó a Thom y Will, y los puso alerta de que no se encontraban Namjoon y Yoongi en el campamento, a causa de una situación.
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