LONDON BOY [[GEORGE RUSSELL]]

Capítulo 41

Maratón 2/2

Boston, Estados Unidos

Ava

Abro los ojos lentamente, sintiendo una sensación de pesadez en todo mi cuerpo. Al principio, todo es borroso, una neblina confusa que se disipa poco a poco. Entonces, mi mente comienza a aclararse, y me doy cuenta de que estoy en una habitación de hospital. Las luces brillantes y el olor a desinfectante me confirman mi ubicación.

Mis recuerdos comienzan a regresar como un torrente incontrolable. Recuerdo el disparo a mi papá, el secuestro, el terror que sentí cuando me llevo a la fuerza.

Recuerdo a Scott, su rostro retorcido por la maldad mientras me mantenía prisionera antes de que vinieran a rescatarme, puedo volver a escuchar el disparo que le dio el agente a Scott aunque ni una sola vez voltee a ver, puedo saber lo que paso, el abrazo que me dio cuando le agradecí el haberme rescatado.

Cierro los ojos por un momento, cuando una punzada se hace presente en mi cabeza.

Al recorrer la habitación con la mirada, mis ojos se posan en un rincón donde yace un sillón. Y allí, dormida con una expresión serena en su rostro, está Rachel. Mis labios se curvan en una sonrisa temblorosa al verla allí, pero al mismo tiempo, una oleada de emociones abrumadoras me embarga.

Las lágrimas comienzan a brotar de mis ojos sin control mientras observo a mi mejor amiga,Rachel ha estado conmigo en cada paso del camino, desde los momentos más felices hasta los más oscuros y aterradores.

-Rachel-Llamo con voz temblorosa, sintiendo un nudo en la garganta.

Rachel se despierta al instante al escuchar su nombre y se incorpora rápidamente. Sus ojos se llenan de alivio, de lagrimas al verme despierta y se apresura hacia mí, envolviéndome en un abrazo reconfortante.

-Ava-Exclama, con la voz quebrada -estaba tan asustada por ti, no sabes cuánto.

Sus palabras me llegan al corazón, y me aferró aún más a ella, sintiendo el calor de su abrazo y la fuerza de su amor.

-Fue horrible, lo juro pero estoy bien.-Le aseguro, tratando de controlar mis emociones.

Rachel me suelta ligeramente para poder mirarme a los ojos, sus ojos llenos de preocupación y amor.

-Estaba tan desesperada, la sola idea no volver a verte me hubiera destrozado- Le limpio las lagrimas del rostro y ella hace lo mismo.

-Todo ya terminó, Rachel -Digo con un nudo en la garganta, buscando las palabras adecuadas-estoy a salvo ahora -Pero mi corazón pesa con otra preocupación, una que he estado evitando enfrentar desde que desperté-¿sabes algo sobre mi papá? -Pregunto con voz temblorosa, sintiendo el miedo revoloteando en mi pecho-Scott le disparó cuando me secuestró.

Rachel me mira con tristeza, y puedo ver las lágrimas asomándose en sus ojos.

-Está en cuidados intensivos, Ava -Dice con voz entrecortada-está grave.