Krieger es el piloto más dominante de Fórmula 1.
Es conocido por ser despiadado y letal al conducir; razón por la que ha sido 5 veces campeón del mundo.
Pero su reinado se verá amenazado con la llegada de un misterioso piloto que al parecer, es el ú...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Los medios de comunicación comenzaron a molestar a Xander con preguntas sobre la rivalidad con Krieger y el por qué de pronto se había convertido en una amenaza para. Había cosas que él no podía explicar, así que solo evadía las especulaciones sobre su vida, lo que permitió que toda esa intensidad cesara durante un día.
Pero eso fue antes de que ganara cinco carreras más, y antes de que todos se dieran cuenta que este año habría mucho drama en Fórmula 1 gracias al novato que parecía no tener limites en la pista, y que, gracias a eso, podría hacerle frente a un tipo tan peligroso como Krieger. Esto hizo que tuviéramos más promoción para el Gran premio de hoy.
Es difícil para todos lidiar con la prensa cuando hasta hace poco éramos una escudería con pocas expectativas, y de pronto, nos convertimos en rivales de un tipo implacable. Por culpa de eso, se ha vuelto complicado ocultar mi identidad, por lo tanto, Andrew ha creado nuevas medidas de seguridad y todo el equipo tiene la orden de cuidarme cuando hay periodistas cerca.
Ahora que la tensión aumentó, me sorprende que Krieger no parezca estresado o asustado. Aún después de que le gané cinco carreras seguidas, mantiene esa actitud engreída cuando tiene una entrevista.
El GP de Emilia Romana acaba de terminar, y por suerte, obtuve el primer lugar en el podio. Es todo un reto regresar al garaje después de una carrera, porque la prensa siempre está a mi alrededor en busca de respuestas afiladas que perjudiquen la reputación de Krieger o revelen alguna de mis debilidades. Pero gracias a mi equipo, pude salir de todo ese caos y ahora estoy a salvo en los vestidores.
Xander no me está esperando como de costumbre, y es muy extraño, porque siempre es cuidadoso.
Mientras me limpio el sudor con una toalla húmeda, aprovecho para enviarle un mensaje y descubrir en dónde está. No tiene permitido caminar por los alrededores mientras yo estoy en la carrera.
De pronto, la puerta se abre con brusquedad y Andrew empuja a Xander con fuerza. Este cae de espaldas e intenta levantarse cuando su padre se acerca a grandes zancadas, pero no lo logra y recibe un puñetazo en la mejilla izquierda. La sangre que brota de su labio inferior comienza a manchar el suelo y cuando su padre se da cuenta, decide detenerse.
—¡¿Te volviste loco?! —vocifero, con la mirada puesta en Andrew—. No puedo creer que tu...
—Cierra la boca, Lilith. Este es un asunto familiar y no te concierne —replica.
—¿Te das cuenta que debe salir y hablar con...?
—¡Entonces dile! —espeta—. ¡Dile que deje de actuar como un niño débil cuando sabe que tiene una gran responsabilidad por delante! ¡Convéncelo, Lilith! Porque yo no puedo hacer que deje de lloriquear.
—¿Qué quieres decir? —respondo con cautela—. Él sabe que hay un trato.
