Valneblina

Capítulo 10: Ecos del Pasado**

La verdad tiene una forma de emerger de las sombras, y en Valneblina, las sombras eran tan profundas como los secretos que ocultaban. Yo, Lian, había vivido toda mi vida bajo el peso de un legado familiar que nunca comprendí completamente, hasta ahora.

Mi abuelo había sido el fundador de la biblioteca de Valneblina, un hombre de vasto conocimiento y profundos secretos. Después de su misteriosa muerte, mi familia se había retraído, hablando en susurros y mirando por encima del hombro. Siempre supe que había algo más en su historia, algo oscuro y sin resolver.

"¿Lian, estás bien?" preguntó Sofía, notando mi distracción.

Sacudí la cabeza, intentando despejar los pensamientos. "Estaba pensando en mi abuelo," confesé. "Creo que él sabía más sobre la historia de Valneblina de lo que nos contó."

Tomás se inclinó hacia adelante, interesado. "¿Crees que su muerte está relacionada con los asesinatos?"

"No lo sé," admití. "Pero hay registros en la biblioteca que solo él podía acceder. Tal vez la respuesta esté allí."

Decidimos investigar, desentrañando los archivos que mi abuelo había guardado celosamente. Entre documentos antiguos y notas personales, encontramos una conexión sorprendente: una lista de nombres, fechas y eventos que coincidían con el patrón del asesino.

"Tu abuelo estaba investigando lo mismo que la señora Ramírez," dijo Sofía, su voz llena de asombro.

"Y tal vez llegó demasiado cerca de la verdad," agregué.

La revelación nos golpeó con la fuerza de un vendaval. Mi familia estaba intrínsecamente ligada al misterio que envolvía a Valneblina. El asesino no solo seguía un patrón; estaba terminando lo que había comenzado hace décadas.

Con cada pieza del rompecabezas que encajaba, la imagen se volvía más clara y más peligrosa. El asesino conocía los secretos de mi familia, y ahora, yo, Lian, estaba en el centro de su juego macabro.

"Tenemos que actuar rápido," dijo Tomás, su voz firme. "El asesino podría estar tras de ti ahora."

Asentí, sintiendo el peso de la responsabilidad sobre mis hombros. "Resolveremos este misterio," prometí. "Por mi abuelo, por las víctimas, y por Valneblina."

La lucha por la verdad nos llevaría a través de las páginas de la historia, enfrentando los ecos del pasado que resonaban en el presente. Y juntos, desvelaríamos los secretos que habían permanecido ocultos durante demasiado tiempo.