ACHLANT [El demonio de mis sueños]

Capítulo 38:"La profecía Final"

Llegaba a la ciudad de Lisboa por un mensaje que me había enviado el profesor de la universidad por estar investigando a Achlant estaba muy baja en algunos cursos, tenía que presentar un proyecto con urgencia para no perder la beca que me mantenía en esa universidad de niños ricos.

Pero algo dentro de mi no me dejaba tranquila apesar que estaba en mi escritorio trabajando en mi proyecto, sentía una extraña inquietud que no me dejaba concentrar, derrepente escuche una voz que me llamaba, se me hacía muy familiar, acaso era Clear, no sabía que había venido para hacerme compañía

"Noa, ven" "Noa"

Baje a ver y el abrir la puerta no había nadie, llame a Clear y le pregunte donde estaba y cuando dijo que estaba mirando la televisión junto a Laura senti unos escalofríos, intente disimular, pero el miedo me consumía.

Si no era ella entonces ¿quien había sido? ¿Acaso estaba perdiendo la cordura? talvez fue solo una mala jugaba de mente, talvez al sentir la presión de culminar el proyecto cuanto antes me pareció escuchar eso.

Me di la vuelta para subir por las escaleras cuando en esto tocan la puerta abro y no era nadie, solo encontré una nota que decía " Ve a la biblioteca" y en la parte trasera decía " Siempre estuve ahí " al leer eso la piel se me herizo, era la misma carta de las otras veces, será la misma persona que envio los correos anónimos, tenía miles de preguntas en mi mente.

Agarre valor y me dirigí a la biblioteca tenía que resolver este misterio cuanto antes...

El lugar estaba sumido en un silencio opresivo, y se podía sentir un aire frío que rozaba mi piel, en los rincones polvorientos de la biblioteca, desenterró antiguos manuscritos sobre los masones e iluminatis, las páginas amarillentas revelaban conspiraciones, símbolos ocultos y una red de influencia que se extendía siglos atrás.

Empecé a leer cada uno de ellos y tuve mis dudas, así que corrí a mi habitación y prendi mi computadora, cada vez que inangaba más me sentía cerca de saber quien era Achlant hasta que una valiosa información, coincidía con el, miré el reloj eran las 3 de la madrugada pero el sueño no me iba a detener, derrepente sentí un ruido me alarme pero al prender la lámpara no vi a nadie, así que continue con mi investigación

- No puede ser, el es Achlant...

No podía creer lo que estaba viendo, había descubierto la verdad, por fin estaríamos a salvo le contaría a todos mis amigos, por fin evitaríamos que se cumpla la última profecía, me sentí muy aliviada y a la vez decepcionada por que jamás imagine que el seria el demonio.hasta que escuche un susurró en el aire.

¡Llegaste demasiado ,lejos niña genio!- susurró una voz siniestra

¿Quien eres?- pregunte asustada

Mis ojos se abrieron de horror cuando sentí una presencia detrás de mi, el aire se volvió más denso y el frío se aferró a mi piel, giré lentamente, y ahí estaba un demonio imponente, su piel era de negro azabache que absorbía la luz circundante, creando un aura de oscuridad palpable. Sus ojos en la penumbra me observaban con una intensidad que helaba la sangre. Su cabeza adornada con cuernos retorcidos que se elevaban hacia el cielo como torres de catedral profana se inclinaba con una gracia que contradecía su grotesca forma, en su torso, sus músculos definidos se entrelazaban bajo la piel como serpientes vivas y sus brazos terminaban en garras afiladas como cuchillas.

- "Achlant" Es lo único que pude decir mientras lo vi transformarse por completo en un demonio.

" Si, él mismo"

El demonio Achlant se inclinó hacia adelante, su aliento gélido rozando mi rostro. "Noa, has desentrañado secretos que muchos han buscado durante siglos. Pero el conocimiento tiene su precio."

Tragué saliva, intentando mantener la calma. "¿Por qué haces esto?" pregunté, mi voz apenas un susurro.

Achlant sonrió, una mueca que revelaba dientes afilados como navajas. "Tu curiosidad te ha llevado lejos, ahora vine por tu alma"

Achlant la atrapó en un abrazó gélido, la levantó en el aire, sus pies flotando a centímetros del suelo y la comenzó a golpear contra la pared una y otra vez, él dolor se extendió por su cuerpo mientras su visión se nublaba y podía sentir como la vida se le iba. Mientras Achlant y sus secretos se desvanecian en la oscuridad.