El hilo rojo del destino (Radioapple)

CAP X "Piano y Violín"

Me encontraba en una casa ajena a la mía, tenía olor a manzana y su grande ventana dejaba que el sol entrara iluminando toda la casa, estaba sentado con las piernas temblado por el nervio esperando que luzbel me hablara ya que buscaba algo y todavía me preguntó ¿Cómo llegué a este punto?
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-Vamos Alastor solo ven mañana en la noche a tomar un trago con nosotras- Rosi me intentaba convencer de volver a ir al bar, la última vez que pasaron muchas cosas que no me desagradaron pero volver a salir no es mi fuerte.
-No lo sé querida es mucho ruido para mí ya lo sabes-
-Entonces lo tomaré como un si, puedes llevar acompañante tal vez a esa personita especial para que lo conozcamos- Para el colmo no me preguntaba y ya era decidido que iría reclamaría pero ella a sido tan linda conmigo que esto no sería nada.
-Bueno iré y tal vez lleve acompañante como dices- lo último lo dije murmurando porque todavía es algo que no me avergüenza pero soy nuevo en esto.
Quería invitar a luzbel pero no sabía cómo y menos sabiendo que ese lugar le puede traer malos recuerdos, sigo pensando que aventarme de la ventana es una opción pero por fin algo me salía bien y no lo echaría a perder tan fácilmente. Cómo a sido costumbre desde hace una semana y media e acompañado a luzbel cuando regresa de su casa cuando tienen el horario de la tarde y estamos fuera de su casa hablando así que este es el momento.

-Oye luzbel em, mañana en la noche saldré con unas amigas al bar de la otra vez y me dijeron que podía llevar a una persona para no estar solo o algo así- Era difícil bajar la cara por pena ya que al hacerlo lo miraba las detenidamente, así que miraba al cielo pero el podía ver mi nerviosismo.
-Me encantaría acompañante aunque son tus amigas ¿No haría mal cuarto? No quiero ser una molestia o así-
-No no al contrario me encantaría poder seguir viéndote incluso mañana- luzbel se sonrojo ante mi comentario y desvió la mirada creando una sonrisa en su cara seguía siendo precioso no importa cuánto tiempo lo siga viendo.

Llego la noche y llegué al lugar acordado dónde ya se encontraban mimzy y Rosi entre para saludarlas pero me mandaron una sonrisa que se veía que era por malas intenciones.

-es que ella es tan hermosa aah que ya no pienso en otra cosa ella es sencilla y parece una diosa- ambas empezaron a cantar simultáneamente mirándome con malicia se notaba que no tenían mejor cosa que hacer que burlarse de mí, solo sonreí viéndolas esperando que se callarán

-O tal vez era la de, se que no ahí nada como tú y yo sé que te juro que- seguían cantando burlándose de mí, ¿Era evidente que eran para alguien? Porque no solo mi mamá se dio cuenta ellas también o solo son unas locas que sacan conclusiones.
-Jaja que chistosas ¿Ya terminaron?- Pregunté para sentarme alado de ellas donde solo seguía recibiendo esas sonrisas
-Es que Alastor se escucharon con tanto sentimiento que es inevitable no reírnos de ti al chico que pensábamos que terminaría solo y virgen hasta la tumba- hablaba mimzy riendo
Pasaron unos minutos y ellas estaban emocionadas por saber quién sería esa persona que invite esa noche ninguna de las dos sabía que se trataba de un hombre y no sabía que tan necesario era decirlo no es que sea algo que deba de importarles pero no quiero que se incomoden, tras un rato de espera luzbel entro al bar con un hermoso traje negro y si peinado para atrás no pude evitar sonreír ante aquel escenario hermoso que veían mis ojos, me saludo desde lejos note que mis amigas se sorprendieron y empecé a dudar que tan buena idea era haber traído a luzbel y más que aún no somos nada.
-Hola Al, y mucho gusto soy luzbel- saludo a mis amigas que en automático sonrieron
-Doctor luzbel así que es usted el novio que nuestro querido alastor quien lo diría- Rosi empiezo a hablar con quién parecía ya haber conocido, bueno luzbel se había echo fama por el bien doctor que era y su florería era de esperar que  lo conocieran.

-¿Novio? ¿Así me presento?- luzbel se puso nervioso empezando a sonrojarse enserio debi aclarar las cosas con estas dos
-No, el no es mi novio Rosi así que calladita, luzbel no les hagas caso por favor toma asiento
-Quien diría que Alastor estaba con el guapo doctor que tiene varias y varios pretendientes detras- mimzy hablaba para  después tomar un trago a su bebida enserio no tenían filtro estás idiotas.
-¡Chicas! Por favor- No sabía que hacer era incómodo luzbel tenía la cara roja y no quería saber cómo estaba la mía.
-Lo lamento Alastor solo estamos contentas, disculpe doctor luzbel no es por ofenderlo- Rosi de había disculpado con una sonrisa que la caracterizaba
-No te preocupes Rosi se que no es al drede y tampoco por mimzy y por favor no me diga doctor usted me dijo que no le dijera señorita- ¿El también las conoce?
-¿Me perdí de algo?- pregunté ante aquel incógnita que me generaron los tres
-Es que tuvimos que el al doctor por una señorita de rompió la pierna porque la señorita bailaba y ya no está en su mejor momento- reís Rosi
-Oye sigo estando en mi mejor momento solo fue una mala noche- mimzy se intento defender pero hasta yo sabía que ya no era como antes
-Bueno el punto es que ese día entablamos conversación con luzbel-
-Si, y me agradaron de haber sabido que eran ellas ni habría tenido tanto miedo de camino para aca-
Pasaba el raro y los cuatro hablábamos y tomábamos sin pena pero había una cosa que me desagradaba no había música este lugar se caracteriza por su música de fondo y más por su piano y violín.

-¿Por qué no tienen música chicas?
-Que curioso que preguntes querido es que has de cuenta que los músicos no pudieron asistir hoy- Rosi me comentó pero su tono era raro, espero que no pase lo que creo
-A ya pobre de ellos ni modo- Evite mirar a las chicas que no me quitaban la vista de encima no quería que me pudieran eso.
-Pero si tanto quieres música puede haber una solución ¿No crees?- Mimzy trataba de convencerme pero no, no pasaría.
-Luzbel si habría una forma de que tocaran ¿Le gustaría? -Rosi volteo a ver al mencionado quien no sabía de qué trataba la situación
-Las verdad si me gustaría, es más agradable el ambiente con música- Ahora se aprovecharían de eso a quienes llamaba amigas
-Ya vez Alastor ¿Por qué no vas a tocar el piano?-  Ya salió la pregunta
-¿Tocas el piano?-luzbel se sorprendió y me volteo a ver emocionado ¿Qué se supone que haga ahora?
-Ya vez tu lindo casi novio te quiere escuchar tocar el piano
-Nada más por esto me invitaron hoy ¿Verdad? Saben que llevo mucho sin tocar- Ya decía que algo se traían entre manos-
-Si Alastor no quiere tocar ni debemos obligarlo tal vez en otro momento- No debía caer ante la mirada de decepción de mi acompañante.

-Eso es alastor!- gritaban mis amigas desde sus asientos.

Sin darme cuenta me levanté de mi lugar dirigiéndome ante aquel hermoso instrumento para sentarme, ya estaba oxidado pero al tocar aquellas teclas todo alrededor desaparecía entrando en una calma que se vio interrumpida por el sonido de un violín
-No te iba a dejar solo Al- Un hermoso ángel sin alas estaba frente a mi con un violín tocando simultáneamente conmigo, nunca antes había amado más la unión entre aquellos instrumentos, su sonido había que todo se volviera blanco alrededor solo quedando en el mundo nosotros dos y nuestra armonía musical que parecía querer expresar más que solo sonidos.

Terminamos de tocar y todo volvió a la normalidad sacándome de mi grande aquellos aplausos dirigidos hacía luzbel y a mi, aquella hermosa melodía que acabo espero se repita mas veces.
La noche termino y luzbel y yo nos encontramos caminado en la calle en silencio solo viendo el cielo obscuro.
-Me gusto tocar contigo, entonces no solo cantas bien si no aparte el piano eres una cajita con muchas sorpresas-
-Usted tampoco se queda atrás no sabía que podía tocar aquel instrumento con tanta belleza.
Nos seguimos alabando mutuamente hasta llegar a mi casa.

-Gracias por ahora dejarme a mi llevarte a tu casa ¿No era tan difícil o si?
-¿Es reclamo o como lo debería tomar?  - me incline para quedar a su altura, sonreírle y poder apreciar mejor su rostro
-Si, ya te he dicho que quiero que sea recíproco esto, no solo yo te gustó tu me gustas también y quiero demostrártelo- Luzbel me agarró de cuello a lo que quede más sorprendido y más a mi corazón que empezó a palpitar demasiado ¿Porqué siempre mi corazón me latía así estando con el?
-Lamento eso, dejaré que también me cortejes ¿Te parece?
-Entonces quiere decir ¿Qué puedo invitarte a comer a mi casa mañana?- me quedé paralizado ¿A su casa? Eso era nuevo no podía moverme y menos por sus manos seguían en mi cuello generando más pánico a mi pobre corazón a este paso moriría de un infarto- Tranquilo no te haré nada malo.. aún- puedo jurar que mi cara estaba roja no sabía que decir

-M..Me encantaría comer en tu casa mañana- Nos quedamos viendo un rato y no pude evitar ver sus labios, aquellos labios que ya había sentido antes y quería volver a sentir.
-Sabes aunque no seamos novios aún es común darse un beso después de una cita- Luzbel se acercó más a mi dejándonos más cerca casi juntando nuestros labios pero se estuvo me imagino el esperaba que fuera paso a un beso y claro que no me iba a negar, corte la poca distancia que nos quedaba para besarlo, no puedo describir las emociones que me había sentir estar tan cerca de el, y en esos momentos que lo sentía cerca era aún mejor, nuestros labios se movían simultáneamente si querer separarse sus labios tan suaves eran increíble.

Nos separamos después de unos minutos y solo Vi sus ojos abriéndose con un hermoso brillo en esos ya precioso ojos azules.
-Nos vemos mañana Al- se fue no sin antes darme un beso en la mejilla
Y volvemos al presente yo sentado en el sillón de luzbel esperándolo
-Ven Al, ya está listo lo que te quería mostrar- fui a dónde provenía la voz de mi anfitrión y al entrar a aquel pequeño cuarto a luzbel sentado en un hermoso piano.

-¿Y esto?- Estaba sorprendido de que el tuviera un piano y en tan buenas condiciones
-Lo tengo desde hace mucho tiempo quería aprender a tocarlo pero siempre se me dificulto y ayer mencionaste que no tocaba desde hace tiempo pero aún así tocaste de tal manera que mi corazón se aceleró-mando su mano a su pecho para dame una hermosa sonrisa que deja ver sus hermosos dientes blancos- y aunque es difícil moverlo si gustas puedes venir cuando sea a tocar, y si es posible me gustaría estar presente- no tenía palabras para aquel comentario este hombre me daba la oportunidad de hacer algo que amaba y que deje
-Yo no se que decir esto es sorprendente, muchas gracias por darme está oportunidad- no pude evitarlo y fui a abrazar a Luzbel quien seguía arriba del piano

-Al ¿Podríamos volver a tocar juntos?
-Me encantaría