El hilo rojo del destino (Radioapple)

CAP XVI "NO IRÉ CONTIGO"

-¡Mamá!

-¿Qué pasó mi niño?- mi madre extendió sus brazos para que la abrazara y claro nunca me negaría

-¿Puedo ir a la tienda?

-Pero ya casi comemos y es tu favorito por tu cumpleaños

-Pero mami solo uno porfa

-Bien pero regresas rápido- mi mamá me dio un beso en la mejilla mientras me daba vueltas

-Mmm

-¿Qué? ¿Ya muy grande para los besos de mamá?

-Ya soy grande tengo siete pero no quiero que mamá se vaya- Abrace más fuerte a mi mamá me dio sentimiento de la nada

-¿Por qué dices eso?

-Es que el niño de ultima casa dijo que te ibas a morir y no es cierto ¿Verdad? Tu no morirás- empecé a llorar quería ir a la tienda pero ¿Y si regreso y mamá ya no está?

-No, no cielo yo no me iré de tu lado al menos hasta que tú ya estés grande estaré a tu lado muchos años más ya no le hagas caso ¿Si? Después hablaré con su mamá para que no te vuelva a decir eso ¿Te a dicho o echo algo más?- solo negué con la cabeza aunque fuera mentira. -Bien ahora una sonrisa recuerda uno nunca está completo sin una sonrisa

Mi mamá me bajo y me beso en la frente.

-entonces ve a la tienda amor y regresas para comer.

Dude mucho pero salí para ir a la tienda contento.

-Pequeño Alastor ¿Ya estás más alto?- me preguntó la señorita de la tienda.

-Si señorita, si crecí más porque ya cumplí siete años- estaba orgulloso porque si me sentía más alto, deje mi paleta en el recibidor para comprar mi paleta.

-Hagamos una cosa solo por tu cumpleaños te regalaré la paleta ¿Te parece?

-No señorita como cree

-Vamos no tengas pena solo por hoy- la señora me extendió la paleta que ahora era un regalo, solo di un brinquito y le gradecí, salí de la tienda con mi paleta en mi boca de regreso a mi casa.

Caminando por la calle sentí como ¿Una bola de papel? Choco con mi cabeza.

-"no como cree señora" "si estoy alto porque cumplí siete años"- dirigí mi mirada a aquella voz burlona que era para mí, vi a un niño más alto que yo y que dijo esa mentira de que mi mamá iba a morir, preferí ignorar lo y seguir con mi camino. -Pequeño ¿Por qué me ignoras? Creí que éramos amigos

-Mi mamá dijo que los amigos no se molestan entre ellos ahora déjame ir a mi casa

-¿La futura muerta te dijo eso? Ya que, oye pero es tu cumpleaños no debes pasarlo solo- Ignóralo Alastor solo es un niño que no tiene nada que hacer.-Oye traes de mis paletas favoritas- al mencionar esto saco con fuera la paleta de mi boca para el ponerla en su boca

-Oye dámela es un regalo que me dieron- quería quitársela pero se alejaba de mi.

-¿Quieres tu paleta? Pues ten- agarró la paleta para meterla a mi boca ahogandome en el proceso con su mano que sobraba me agarró del cabello para no librarme. Me estaba quedando sin aire y mis lágrimas salían, ¿Alguien podía ayudarme?

-Que idiota ni siquiera pudiste liberarte de eso- me soltó empecé a toser por lo sucedido dejándome caer al piso intentando recuperar el aire y mi paleta termino en el suelo. -Bueno feliz cumpleaños Ali, nos vemos en la escuela.

Me levanté limpiandome las lágrimas, algún día el también sufrirá y no lo ayudaré, mi paleta realmente quería comérmela, bueno ya fue mucho lamento y recuerda uno no esta completo sin una sonrisa.

Llegué a mi casa como si nada hubiera pasado y comí junto con mi mamá estar con ella me hacía sentir mejor con lo que pasaba a mi alrededor. Le gustaba hacer oración antes de comer no podré creer mucho en la iglesia pero espero que mi mamá logre ir al cielo ya que eso es lo que desea pero eso pasara dentro de mucho, sería lindo ir con ella.

Regrese a la escuela y como era de costumbre ese niño me molestaba cada que podía no quería decir nada porque no quería preocupar a mi mamá ¿Y si en realidad iba a morir y lo adelantaba por preocuparse por mi?

Día tras día lo mismo, regreso a mi casa solo ya que mi mamá no oído salir del trabajo para ir por mi peor no importa puedo ir solito, llegando a mi casa subí a mi cierto a hacer tarea pero una piedra choco con mi ventana la abrí para ver de dónde venía eso.

-¿Por qué no bajas Ali?- ese niño me estaba colmando la paciencia ¿Cómo es posible que un niño de diez años sea así con alguien más y menor que el? ¿Sería correcto bajar?

Baje con el chico que me dirigió a un callejón me daban escalofríos ¿Fue correcto bajar? -¿Qué es lo que quieres?- antes de buscar su rostro para esperar una respuesta sentí como un empujón hizo que golpeara contra la pared.

-Bien dejemos la cosas en claro te detesto mi madre solo habla de lo perfecto que es el hijo de la señora Irene sabe tocar el piano, sabe cantar, es bueno en la escuela es amable y quién sabe que mas es detestable así que- Vi como sacaba una navaja y empezó a jugar con ella meciéndola de un lado a otro tenía miedo ¿Qué debía hacer?

-Pero eso no es mi culpa- sentí como me cacheteaba sentí como me ardía la mejilla.

-claro que es tu culpa si no fuera por ti mi madre no me golpearía ni me odiaría, quería sentir lastima por el pero piso la navaja en mi cuello ¿Iba a morir? Poco a poco la navaja iba acercándose más y más. -Después de esto tu madre estará sola y al poco tiempo morirá tu linda madre dejará de existir por culpa de su hijo.

Aquellas palabras me hicieron enojar ¿Por qué querían vernos mal? ¿Qué les hicimos? Solo queremos tener una vida tranquila desde que papá murió.

-Tu y madre estarán destinados a sufrir.

Sus palabras ardieron en mi cabeza no se de dónde saque fuerzas y agarre la navaja con la que me estaba amenazando encajándosela en el ojo y sacarla después.

-Mi mamá no merece sufrir pero tú si.- Volví a encajar la navaja pero ahora en su otro ojo seguí haciéndolo en las partes de su cuerpo nada me detenía, todo era mi enojo.

La sangre de su cuerpo empezaba a teñir mis manos, solo ví a ese chico tirado en el piso no sabía que pasaba por su cabeza solo miraba como mi pie goleaba su estómago haciendo que sangre saliera de su boca. Todo el lugar se torno de rojo y nada haría que parara.

-¿Alastor?

-¿M..mamá?- en ese momento que ví las lágrimas de mi mamá saliendo de sus ojos que me miraban con miedo hizo que reaccionara la escena era peor que hace un momento el cuerpo inerte del que era mi bullying su cara ya era irreconocible ya que ni sus ojos tenía ¿Se los había sacado? Lo que miraba era espantoso pero para la vista de mi mamá era aún peor, empecé a temblar y el miedo se apoderó de mi ¿Qué acababa de hacer?

Mi primer instinto fue correr a dónde mi mamá estaba abrazándola nuestras las lágrimas salían sin poder detenerlas. -Mamá yo no quería yo no sé yoo- No podía hablar bien mi garganta dolía, no sabía que iba a pasar.

-Tranquilo mi niño ya veremos cómo solucionar esto, todo tiene solución claro jaja - mi mamá se agachó para abrazarme pero solo seguía viendo aquella escena que yo había echo ella tenía miedo ¿Me tenía miedo?-No te preocupes yo solucionare esto- me abrazo con mas fuerza pero en ese abrazo sentí que realmente me estaba protegiendo. Lo lamento mamá ya no podré ir al cielo contigo pero la protegerte lo que me quedé de vida.

Después de unas semanas nos mudamos nunca quedé como sospechoso de aquel suceso así que mudarnos no fue difícil, solo esperaba comenzar desde cero y olvidar lo que pasó.