SPY X FAMILY - ¿HACE FALTA DECIRLO CON PALABRAS?

Capítulo 16.- El primer paso hacia una gran amistad

Este es un capítulo muy especial... (como todos, de hecho, jaja).

Espero que lo disfruten.

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Era el momento de que el profesor diera las indicaciones para el segundo juego. Todos los presentes escuchaban con atención.

>Estoy bastante seguro de que todos conocen el siguiente juego que estoy por mencionarles, y puede que algunos de ustedes ya hasta lo hayan jugado antes. Para nuestra segunda prueba, jugaremos "carrera a tres piernas".

En cuanto les hizo saber el nombre, prácticamente todos los niños supieron de inmediato lo que tendrían que hacer ahora.

>Este juego no será muy diferente del anterior. Tan sólo tienen que ir de un extremo del gimnasio al otro, y volver, pero lo harán estando atados de las piernas con su pareja. Una persona deberá atarse la pierna derecha, junto a la pierna izquierda de su pareja, y tendrán que sincronizarse para ir avanzando, por supuesto, tratando de no caerse. Sin embargo, esta vez sí les voy a pedir que corran tan rápido como puedan, pues les voy a medir tiempos. En un momento les haré entrega de una cuerda a cada pareja. Eso sería todo, dudo que se me haya pasado explicar algo, pero si alguien tiene una duda, son libres de levantar la mano y hacérmela saber.

Y viendo que ninguno de los niños pareció no haber entendido algo, el profesor se dispuso entonces a entregarle una cuerda a cada pareja, para que ellos mismos se ataran las piernas.

Y justo esto estaba haciendo Damian, quien se había colocado en una rodilla para atar la pierna de Anya a la suya, cuando entonces hizo un comentario.

> ¿Qué opinas? ¿Crees que nos podamos coordinar bien en esto?

>No lo sé... no soy buena corriendo.

>Es lo que me temía...

> ¡Pero aún así quiero intentarlo! Si tuviera que correr sola, se me haría aburrido, ¡Pero si vamos a correr los dos juntos, entonces me parece mucho más divertido!

>Puedo ver que al menos optimismo no te falta... es bueno saber que te encuentras mejor, a comparación con días anteriores. Luces más feliz, y te ves mejor así, me recuerdas a la Anya que no para de reír por cada cosa.

> ¿Tú crees que siempre estoy feliz? – Genuinamente no se esperaba que le hiciera ese tipo de comentario.

>Para bien o para mal, así eres tú. Una niña tonta, pero muy alegre y risueña. No te voy a negar que a veces llegas a contagiarme tu sonrisa, es por eso que me molestaba verte tan triste últimamente. Listo. – En cuanto terminó de decir esto, terminó también de enredar sus piernas, por lo que nuevamente se puso de pie.

Anya no podía creer que le hubiera dicho eso... pese a no quitar la expresión seria que siempre tenía en su rostro, era la primera vez que Damian le decía algo tan lindo... y lo más sorprendente de todo, es que lo hacía sin ningún tipo de malicia o doble intención. Tan sólo se limitaba a decirle honestamente lo que pensaba y punto. Sin darle rodeos.

Eso...

Eso provocó que, inconscientemente, las mejillas de Anya se llenaran de un tono rojizo.

> ... Gracias. – Fue lo único que se le ocurrió decir.

Y viendo que ya todos se habían colocado las cuerdas, el profesor concluyó entonces que era hora de empezar con el juego.

>Muy bien. Como veo que ya todos están listos, es hora de iniciar con esto. Pónganse todos en la línea de inicio para dar comienzo. Aunque sólo se trate de un juego, den lo mejor de si, ¿De acuerdo?