Peligroso Deseo +18 [libro 1]

Capítulo 33

Emily

Cole es como la serpiente que atrae a Eva dando camino hacia el Edén, a veces me pregunto si Cole es el fruto o la serpiente y estoy muy segura que para mi es ambas cosas a la vez, él es adictivo, un sabor agridulce que va profanándome y  joder eso me gusta y estoy segura que ya no tengo defensas contra el para proteger mi corazón porque cada día me vuelvo adicta a él, a Cole Torrance, el se a convertido en un peligroso deseo.

—Estoy segura que te haré una mierda— el ladea la cabeza con una sonrisa maniaca. El olor a tabaco se siente en el aire. Hace unas cuantas semanas no lo había visto fumar, más bien desde que pasamos aquellos días en la cabaña en Cambridge. Mientras voy dibujando con el Mast pen que actúa igual que una máquina de coser. Esta loco de la cabeza al ordenarme tatuar su piel, sin haber hecho nunca un tatuaje en mi vida, él ni siquiera se inmuta y es como si fuera inmune al dolor. Con cada punzón se inserta en su piel diminutas gotitas de tinta.

—Quiero que uses tú arte en mi piel y el arte es lo que dejas salir.— juro por Cristo que siento mis mejillas sonrojarse.

Estamos sentados en el piso, yo en sima de el mientras le hago un tatuaje y desnudos, luego de tener unas cuantas horas de sexo luego del desayuno. Estar desnuda frente a él no me avergüenza, él ya conoce cada rincón de mi cuerpo. Estar con Cole es como vivir en un sueño en el que jamás quisiera despertar y ver que él ya no está en mi vida o me aleje. Todas las cosas buenas que llegan a mi vida al final terminan yéndose.

—Ven aquí.— Me mira con esa mirada oscura, como si en verdad pudiera ver través de mi.

—¿Si?— aparto mis ojos del tatuaje a medio terminar de su pecho y me encuentro estudiando su rostro detenidamente. Inclino mi rostro cerca del suyo, el se lleva su cigarro a los labios, inhala y me observa con una media sonrisa mientras que el lleva sus manos hacia mí nunca y me inclina hasta sus labios, tan cerca que puedo escuchar su respiración acelerada hasta que  deja salir el humo y yo abro mi boca y lo absorbo, lo contengo por un unos segundos después de soltarlo, él suelta un gemido de aprobación y besa mis labios y introduce su lengua en mi boca, no es un beso suave, si no un beso que se siente con hambre y trato de seguirle el ritmo mientras me devora la boca, me besa tan fuerte y muerde mis labios que puedo sentir la sangre en mi lengua y eso me gusta, es como si estuviéramos haciendo un pequeño ritual.

Observo el tatuaje terminado en su pecho, una corona. Me siento como una colegiala enamorada o como si estuvieran teniendo mi romance adolescente y es el hecho de saber su significado, mayormente tiene como significado la prosperidad y la abundancia, pero en este caso no, está inspirado en mi, en lo que significo para el, su reina.

— Háblame de tú familia. ¿Qué te trajo a Londres?— pregunta mientas se mira el tatuaje en un pequeño espejo. Trago fuerte, no me gusta hablar de mi pasado y mucho menos compartirlo con él, por el simple hecho de que me tome pena.

—Mi madre y yo llegamos a Londres consiguiendo trabajo y decidiendo empezar una nueva vida.— trato de cortar la conversación.

— ¿Y porqué empezar una nueva vida?.—pregunta con interés. Sé que si le miento se dará cuenta. Cole suele observar todo, es como si en realidad viera a través de ti, como si entendiera perfectamente el cuerpo humano y sus emociones. Cole es muy parecido al elemento con el cual lo asocio, el diablo y eso me hace entender porqué el emprende tanto temor en sus hombres, Cole controla el miedo en ellos y en sus enemigos y eso lo convierte en el amo de sus armas.

—Luego de la muerte de mi... padre y Dios no quiero un "lo siento mucho o un que pena". Eso es lo que siempre e escuchado toda mi infancia. yo y mi madre quedamos desamparadas luego de que mi padre partió, el salario de una mujer que nunca terminó una carrera era muy poco. Después mi madre volvió hacer su vida y a casarse con un hombre llamado Nicolás — me quedo callada con miedo de seguir y terminar soltando todo, Cole me mira detenidamente sin pestañear y ni mostrar pena y eso me relaja, no quiero que sientan pena por mi.

—Tranquila, no te diré un "lo siento mucho". Y.. entonces, ¿Qué sucedió con Nicolás ?.— mi mirada se dirige al enorme ventanal que tenemos de frente. Me gusta lo caliente y dura que se siente su piel desnuda contra la mía. Cole parece un ángel y no cualquier ángel, me atrevo a decir que es tan hermoso como lo fue la estrella de la mañana.

—Se fue— mis ojos se llenan de lagrimas y no las dejo caer. — y apostó lo único que nos había dejado mi padre, nuestra casa.

Cole me agarra por la nunca junto con mi cabello y me lleva hacia su pecho y meto mi nariz en su cuello, inhalando su olor a bergamota, cedro y lavanda que tanto me calma.

—Entiendo.

***

Cole

Estoy en mi oficina en la mansión mientras miro aquel punto rojo que aparece en mi computadora, me aparece que mi pequeña futura esposa está en la tienda del centro, así como me dijo mi hermana, se fueron con el nuevo chofer que le designe a mi reina y me siento ansioso cuando la tengo lejos pero por lo menos me calma saber dónde está cada momento. Emily es un veneno, un maldito veneno que es como si se hubiera instalado en mi sangre.

El teléfono suena en mi bolsillo haciéndome desviar mi mirada del localizador, mis labios se inclinan hacia arriba al ver el nombre.

Alistair Rossi

—Que alegría recibir tú llamada hombre.— me levanto hacia el bar de mi oficina y me sirvo coñac.

—me da gusto escucharte decir eso amigo.— Alistair Rossi es un muy buen viejo amigo, junto con Dytran. Ambos éramos inseparables. Alistair posee también gran parte de la mafia y es el líder de la mafia Rossi luego de asesinar a su padre. Y pesar que también es el enamoramiento secreto de mi pequeña hermana Sofía, siempre lo supe en la forma en que ella lo miraba a escondidas y Alistair nunca la notó, y eso fue lo mejor, porque le hubiera sacado los dos ojos si alguna vez se atrevería hacerlo. Aunque es idiota pensar eso, Alistair siempre a tenido fascinación por las mujeres mayores y mi hermana en ese tiempo era una niña.

—Me han dicho que te vas a casar, y que también terminaste un compromiso. ¿Porqué coño no e recibió mi invitación?.— escucho música electrónica de fondo a través del celular. Sonrió, ese hijo de Puta está en el Club y seguro apostando en cantidad con personas igual de peligrosas, pero ningunas de las partidas que juega sale limpia.

—Aún no hay fecha. Tengo muchos enemigos, y ella no pertenece a ninguna familia tan jodida como la mía.— el silencio se instala.

—Quería avisarte que pronto estaré en Londres.—me tomo todo el coñac de un solo trago y vuelvo a llenar.

—Perfecto hermano. Sofía estará encantada en verte.

—Yo también estaré encantado de ver a la pequeña Sofía...

Les aviso que Alistair Rossi es él personaje del segundo libro.🍿