Peligroso Deseo +18 [libro 1]

Capítulo 45

"Amarte es como caminar al borde del abismo... y me encanta caer."

Emily.

—¿Está usted bien, señorita?.— Davide me estaba esperando Justo afuera de la cafetería.

—En realidad, no lo sé.— por dentro estoy enojada, por las palabras indirectas de Grace Lee ¿Quién diría que la persona a la cual admiraba, se follaba a mi ahora prometido?.

Pero... si de algo estaba segura yo, era de que ese hombre, me pertenecía.

—Solo dígalo, mi señora.— mis cejas se fruncieron.

—¿Decir qué cosa?.— mis manos hormiguean.

—Si usted quiere hacer desaparecer a alguien, lo hago sin preguntas. Le juré al jefe entregarle mi lealtad a usted y créame que la tiene en sus manos.— una risa salió de mi garganta.

—Gracias.— sus palabras se quedaron grabadas en mi mente. Me volteé a observar por el cristal de la cafetería a Grace, mientras me preguntaba a mi misma, que tanto cruzaría la línea por Cole.

—¿Ahora, hacia donde se quiere dirigir?.

—A casa.

***

Mientras miro por la ventana observo a Cole conversando con sus hombres, y aunque no puedo escuchar nada desde aquí, me doy cuenta de que el asunto es muy serio. Hoy lleva camisa blanca Armani y pantalones de vestir negro, su cabello negro como cuervo está desordenado, y eso le da un toque mucho más atractivo a su piel blanca.

Una sonrisa toca mis labios, mientras me hago una idea de a quién se parecerá más el bebé, me muerdo los labios de los nervios, se supone que se lo diré hoy, pero no sé de que forma.

—¿Qué desea llevar en su equipaje?.— me doy la vuelta encontrándome con Belina.

—¿En mi equipaje?.— me regala una sonrisa.

—El señor Torrance me pidió que armara sus maletas. Pregunto, por si desea llevar con usted algo en específico.— ¿Para qué necesitaría yo equipaje?.

—¿El habló sobre qué yo iría a alguna parte?.

—Escuché que salían para Sicilia en dos horas. Ya que el clima en Sicilia es invierno e otoño, le empaque chaquetas y suéteres, créame es bueno para las noches mas frías.

Me pregunto ¿porqué iríamos a Sicilia? Mi mirada vuelve a la ventana donde Cole aún sigue conversando con sus hombres, parece que tiene una acalorada discusión.

—Lo entiendo. Solo me parece raro que no me avisará con antelación, se me hace raro.— Belina me regala una sonrisa compasiva.

—Mi dulce niña... en este mundo al que ahora te encuentras, te encontrarás con cosas peores, solo tienes que tratar de lidiar con ello.— lo sé, sé que si quiero estar con Cole, tengo que adaptarme a su mundo también.

—Lo sé. Pero eso no hace que deje de cuestionarme cosas, es como si sintiera que un momento dado lo perderé todo. Algo en lo profundo de mi corazón me dice que lo disfrute mientras pueda...

—En está familia puede pasar de todo, solo confíe en el señor, no en nadie más.— mi garganta traga saliva.

—¿Qué cosa más mala me podría pasar? Siento que ya e vivido lo peor.— Belina suelta una risa amarga y observo cómo juega con sus dedos entre ellos.

—Créame, que no. Aquí han pasado cosas peores, desgracia tras otra.— me acerco más a ella.

—¿Desde hace cuánto trabajas para ellos... para la familia Torrance?.—su mano se posa en mi mejilla izquierda.