Cap. 42 "De camping." (Segunda Parte)

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(junio 27, 2020, Bosques de Sherwood, Nottingham, Inglaterra.)

(Valeria McCloud/nana de las gemelas Maxwell)


Tras haber tomado el control el día de ayer, sé que hoy debo hacer que los padres se entretengan, pero sin perder de vista a las pequeñas. Así que despierto de las seis de la mañana y salgo de mi tienda, comenzando por poner más leña en las fogatas, tomando agua y poniéndola en la cafetera sobre la parrilla, de las hieleras saco, jamón, huevos, cebollas y tomates y así como unos pimientos y comienzo a picar todo, es cuando veo salir de su tienda a Smithy que tras saludar me ayuda, dos de los escoltas, el marine Steve y Patrick se ofrecen a traer agua para que todos se laven; así que dejo a Smithy picando todo y yo preparo masa para pan y lo pongo a hornear.


Para este momento ya los demás han comenzado a salir de sus tiendas.

-Señorita, encontré estas zetas no sé si serán comestibles, no conozco bien la vegetación de este lugar. - me dice Steve el marine

-Oh si, son comestibles, hay que lavarlos y picarlos para el desayuno.


Cuando el desayuno estuvo listo era una mezcla de huevos revueltos con tomate, cebollas, pimientos y zetas con jamos; el café estaña listo, pero no para los niños a quienes les di leche que saqué de una de las hieleras, son pequeños para tomar café.


Como estábamos en el bosque de Sherwood que es bastante grande, después del desayuno, lleve a los niños a explorar, encontrando frutillas silvestres y hasta algo de menta. También conseguimos nabo silvestre, setas y otros vegetales, seguramente semillas germinadas dejadas por algún campista descuidado, pues encontramos un arbusto de limón.


Llevamos nuestro tesoro a la carpa cocina y como pasaban de las once, nos preparamos para pescar. Pude notar que el joven Edward está molesto, mas no es el motivo. Fuimos al rio y nos posicionamos para pescar, Smithy, Tomas y el marine escolta Steve nos siguieron, como éramos muchos necesitábamos pescar en cantidad.


Así que hicimos una poza bastante amplia casi un metro de diámetro y unos veinte centímetros de profundidad, luego pusimos carnada; las cuatrillizas llegaron con sus cañas y bueno los pequeños y yo terminamos cediendo nuestras cañas y pescando con el arco y una flecha.


Como no es lo mismo, un lago tranquilo que un rio en movimiento, estamos tardando bastante en capturar los peces. Motivo por el que nos vimos en la necesidad de hacer dos pozas más.


Para las dos de la tarde, teníamos cuarenta peces capturados, así que Smithy y Patrick los limpiaron y con los limones que habíamos recogido, un poco de sal y pimienta, sazonamos los pescados y los pusimos a las brasas. Las señoras hicieron una ensalada verde y se encargaron de lavar los trastes sucios.


Después de la comida, todos nos fuimos a caminar por los alrededores, digo estamos en el bosque de Sherwood en Nottingham, el lugar del mítico Robín Hood. Tras explorar un rato, dimos con unas cuevas, pero no entramos ya que podía resultar peligroso.

Amor para cuatroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora