Cap. 46 "Al cuidado de los amigos."

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(junio 30, 2020, Suburbios de Londres, Inglaterra.)

(John Colbert segundo/ estudiante de Derecho)



Pase el resto del día pintando, termine el retrato en colores ocre y comencé el cuadro a colores, no pare hasta que escuche que llamaban a la puerta.


Cuando fui a abrir, me topé con Anna y sus hermanas que traían bolsas de comestibles, detrás llegaron Albert y Alfonse, yo les dejé pasar, tras lo cual corrí a cubrir el cuadro de Anna.


Las chicas se fueron a la cocina y comenzaron a guardar todo lo que trajeron, luego se pusieron a hacer de cenar, los chicos pusieron la mesa mientras yo escondía el cuadro de "Anna y las flores" y comenzaba la pintura de "Depresión"


En ese momento recibí un mensaje, era de mi profesor, los bocetos le habían gustado y me decía que quería verlos, así que solo le di mi dirección.


Un rato después, llamaron a la puerta, cuando abrí, vi a mi maestro, así que saqué los bocetos para que los viera. Mi maestro los observo durante un rato, las chicas habían terminado de cocinar y estaban sacando la comida, los chicos las ayudaron.


Mi profesor solo me dijo

-Son magníficos, sigue así, pero no olvides hacerlos al óleo, todos estos bocetos son muy buenos, sigue así.


Poco después se fue y los chicos y yo cenamos, Anna vio los bocetos y solo me dijo

-Pintar te hace bien, es una buena catarsis, entiendo por qué la tristeza y la desolación; pero sé que pronto pasara y volverás a ver el brillo del sol.

-Eso espero, pequeña. - le digo

- ¿Por qué me dices pequeña? – me pregunto curiosa Anna.

-Porque lo eres. - le respondo mirándola a los ojos, ella es poco más de treinta centímetros más pequeña que yo, que mido un metro y noventa y ocho centímetros.

-John, a tu lado todo el mundo es pequeño. - dijo en ese momento Albert en tono burlón.


Todos nos reímos pues era verdad, los gemelos son diez centímetros más bajos que yo, a su lado parezco Hulk, todo altura y músculos, sin el color verde en la piel.


En un momento Anna y yo estuvimos hablando casi solos y ella me dijo

-Si en verdad te quieres separar de tu familia puedo ayudarte, soy buena con las inversiones y necesito muy poco para hacer mucho. - me le quedo viendo, por lo que le dije

-Si te doy un cheque ¿crees que puedas duplicarlo? – ella me observa y asiente así que me levanto y voy a la habitación hago un cheque por cien mil libras y salgo para entregárselo diciéndole

-Ten, confío en que harás buen uso de ese dinero y podrás duplicarlo.


Albert y Alfonse me escucharon al igual que sus hermanos y ellas dicen

Amor para cuatroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora