Ecos Del Corazón

-14-

Los dias pasaban y Eric no salia de su habitación hasta que,
En la penumbra de su habitación de hotel, Eric se encontraba sumido en su propio tormento emocional, abrazando su almohada mientras las lágrimas mojaban sus mejillas. El vacío dejado por la ausencia de Bruce parecía abrumador, y Eric se sentía perdido en la oscuridad de su dolor. De repente, el sonido de la puerta al abrirse lo sacó de su tristeza. Era Paul, quien había llegado con la llave de la habitación y había venido a brindarle apoyo en ese momento difícil.

Paul se acercó a Eric con delicadeza y lo abrazó con fuerza, tratando de transmitirle algo de consuelo con su gesto de solidaridad. Aunque Eric seguía sintiéndose desolado, el abrazo reconfortante de Paul lo ayudó a sentirse un poco más tranquilo, al menos por un momento.

PAUL: Estoy aquí, Eric. Todo va a estar bien.

Eric sollozó, aferrándose a Paul como si fuera su ancla en medio de la tormenta emocional que estaba atravesando. Aunque no podía evitar sentir el vacío dejado por Bruce, la presencia reconfortante de Paul le recordaba que no estaba solo en su dolor.

ERIC: No puedo soportar esto, Paul. Me siento tan perdido sin él.

Paul apretó el abrazo, compartiendo silenciosamente el dolor de su amigo mientras luchaba por encontrar las palabras adecuadas para consolarlo. Decidió abrirse con Eric, revelando un aspecto de su propia historia que hasta ahora había guardado en silencio.

PAUL: Sabes, antes de que tú ingresaras a la banda, yo también tuve que enfrentar una pérdida muy dolorosa. Estaba junto a Peter, mi pareja Peter Criss. Él me amaba, Eric, pero llegó el día en que tuvo que irse de la banda debido a problemas personales.

Eric levantó la mirada, sorprendido por la confesión de Paul. Escuchó atentamente mientras su amigo compartía su experiencia, sintiendo una conexión profunda con él en ese momento de vulnerabilidad compartida.

PAUL: Su partida me afectó mucho, al igual que la ausencia de Bruce te está afectando a ti ahora. Pero después de un tiempo, me encontré con Peter de nuevo, solo para descubrir que tenía una familia propia. Fue un momento difícil para mí, pero me hizo darme cuenta de que el amor sigue presente, incluso después de la separación. Y quiero que sepas, Eric, que Bruce y tú también se encontrarán de nuevo algún día. El universo tiene formas misteriosas de reunir a las almas gemelas.

Las palabras de Paul resonaron en el corazón de Eric, ofreciéndole un rayo de esperanza en medio de su desesperación.

ERIC: Gracias, Paul. Significa mucho para mí saber que no estoy solo en esto.

Los minutos pasaron y el abrazo reconfortante de Paul, junto con sus palabras de aliento, ayudaron a calmar el tumulto de emociones de Eric. Poco a poco, ambos se quedaron dormidos, encontrando un momento de paz en medio de la tormenta emocional que los rodeaba.

Eric se despertó y vio a Paul aún dormido abrazándolo. Se movió un poco y Paul despertó, abrazándolo por última vez antes de levantarse.

PAUL: Buenos días, Eric. ¿Te sientes un poco mejor?

ERIC: Sí, gracias a ti, Paul. Realmente lo necesitaba.

PAUL: Me alegra escuchar eso. Tengo buenas noticias. Tendremos dos días libres antes de nuestro próximo concierto.

Eric abrió los ojos en sorpresa, una chispa de emoción iluminando su rostro.

ERIC: ¿Dos días libres? ¿De verdad?

Paul sonrió, acariciando el cabello de Eric con afecto.

PAUL: Sí, puedes ir a donde quieras. Relajarte, despejar tu mente.

ERIC: ¿Crees que podría ir a Nueva York? Quiero ver a Bruce.

PAUL: Claro que sí, Eric. Haz lo que necesites para sentirte mejor. Bruce estará feliz de verte.

ERIC: Gracias, Paul. Eres el mejor.

PAUL: Solo quiero verte feliz, amigo. Ahora ve y empaca tus cosas. Tienes un avión que tomar.

Con una renovada sensación de esperanza y propósito, Eric comenzó a preparar sus cosas, ansioso por reunirse con Bruce en Nueva York y reconectar con el amor de su vida.