Dominantes [2ho]

ANGUSTIA

- ¡¿Qué diablos pasó?, ¿Dónde están los detenidos?!- Yunho gritó con voz gruesa abriendo de golpe la puerta del alfa a cargo que al escuchar la voz de Yunho, un alfa dominante, bajó la mirada de forma sumisa ante el príncipe heredero de la manada.

La vestimenta de un príncipe no podría estar mas desaliñada y en algunas partes incluso hasta rasgada, los ojos rojos inyectados en sangre y las garras luchando por salir de sus dedos daban testimonio de la ira que estaba tratando de mantener a raya para que Jun no saliera a la superficie y comenzara a rasgar gargantas con el único propósito de localizar a su omega.

- No... no hubo detenciones- tartamudeó el alfa enseñando a medio llenar su informe sobre la redada.

Yunho no dudó ni un segundo en acercarse para tomarlo por el collar de la chaqueta acercándolo a sí para susurrar entre sus dientes- Dime dónde mierda están los omegas que encontraron- siseó intimidándolo con la mirada sin estar dispuesto a esperar otro maldito segundo a que el incompetente frente a él le dijera lo que quería saber.

- No se encontró ningún omega- dijo el hombre sintiendo su vida escapársele de las manos.

- Es cierto, no se encontró ni rastro de algún omega en Yiling- una tercera voz llena de calma habló en la entrada de la oficina, era Hanbin, el hijo de Taehyun y con quién Yunho había hecho el trato para adelantar la operación.

[...]

Yunho terminaba su desayuno por la mañana cuando Soyeon entró al comedor con el rostro alterado por el temor- Tenemos que hablar- dijo la pelinegra con urgencia en la voz mirando alrededor al ver al servicio atendiendo la mesa dando a entender que la conversación requería privacidad.

Dirigiéndola a su estudio con aun el remanente del sentimiento de dicha que su omega le hacía sentir a través de su lazo no le dio importancia a la urgencia de la chica que lo seguía mientras se torcía las manos.

- ¿Qué rayos está sucediendo en Yiling?- preguntó Soyeon en cuanto la puerta se cerró tras los dos inundando la estancia con un olor demasiado acido dejando ver su angustia- Dijiste que sólo los ibas a asustar y ahora no puedo localizar a Miyeon.

- Hanbin prometió mantenerlo como una revisión de rutina, nada más allá de revisar algunas viviendas- dijo Yunho tomando asiento sin tomar demasiado en cuenta a su prometida... o "¿ex-prometida?".

- Pues algo se salió de control- apunto Soyeon- Miyeon se comunicó conmigo, se escuchó un estruendo y la llamada se desconectó- trató de explicar con calma- sentí más que sólo temor y después nada. No logro sentirla de ninguna manera y tampoco comunicarme con ella.

Yunho la analizó por unos minutos. Conocía a Soyeon lo bastante para saber que no era una chica que hiciera drama por cualquier cosa, de hecho, era bastante centrada y controlada sobre sí misma para ceder por cualquier pequeñez.

De inmediato sintió la ira que estaba experimentando Jongho, de seguro al enterarse de la operación adelantada en Yiling, también fue consciente del momento en que Jongho dejó salir a Ho, entonces pensó en algo que no había considerado, que su omega se acercara a Yiling a proteger a quien sea que quisiera proteger ahí y si eso era lo que estaba ocurriendo, entonces estaba en peligro. Su omega se estaba dirigiendo a las tropas de Hanbin.

Los fuertes sentimientos que estaba experimentando Jongho estaban afectando de más a Yunho "Mi omega" rugió Jun muy fuerte en la mente del alfa luchando por salir para ir detrás de Ho y protegerlo.

Yunho intentó por todos los medios comunicarse con Hanbin sin éxito alguno.

- Yunho, ¿qué está sucediendo?- preguntó Soyeon al ver cómo con cada segundo que pasaba Yunho parecía estar perdiendo el control- ¿qué les ha pasado? Tenemos que encontrarlos ahora. ¡Maldición, si los han encontrado...!- la chica se interrumpió sin querer imaginar esa terrible posibilidad.