𝘊𝘢𝘱í𝘵𝘶𝘭𝘰 54

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Los muertos de la montaña
⋇⊶⊰ 🍃 ⊱⊷⋇

En horas avanzadas de la noche, la princesa de Rohan corrió alarmada hacia la tienda de su amiga elfa ______. Irrumpió, apartando la cortina mientras jadeaba. _______ despertó abruptamente, estaba segura de que no había pasado ni una hora desde que había dejado a Éowyn en su tienda.

-¿Éowyn? ¿Qué pasa?- cuestionó la elfa, levantándose de su lecho y tomando por los hombros a la rubia.

-¡Lord Aragorn!- explicó con un nudo en su voz, y ojos cristalinos -¡Se ha ido, ha dejado el campamento junto al señor Gimli y Legolas y han entrado a la montaña!

-...¿qué?

En pocos minutos, ______ ya estaba empacando todas sus cosas y guardándolas en los compartimentos a cada lado de su caballo. Refunfuñaba sin parar, se le veía muy molesta.

-______, no puedes irte tú también- pidió Éowyn -No puedes desampararnos.

-Lo siento, Éowyn- suspiró la elfa -Pero esos tres me van a escuchar. Ni siquiera pensaron en avisarme. Mala suerte para ellos, voy a ir así me quieran o no. De verdad que todos los hombres son iguales, siempre se van sin decir nada o por lo menos despedirse, pero ya me harté. Me rehúso a ser abandonada otra vez.

-Solo...- Éowyn suspiró, bajando los hombros -Cuídate mucho. No se dicen cosas muy agradables de esa montaña.

-Lo sé- murmuró ______, dándole un fuerte abrazo a su amiga -Espero que Ilúvatar me dé valentía, eso de enfrentar fantasmas me pone nerviosa.

-¿Regresarás?

-Cuenta con ello, primero debo averiguar qué trama ese trío de... idiotas- dijo la elfa mientras se subía a su caballo -No sé cuánto me tarde, pero ten presente que no te estoy abandonando. Despídete de Merry por mí, ya sabes cuánto me duele separarme del último de mis hobbits.

-Así lo haré- sonrió la princesa -Adiós,
______.

Devolviéndole la sonrisa, ______ no dijo más, y tomando las riendas de Philip, cabalgó hasta la montaña. Escuchó los murmullos de los hombres que la veían irse mientras se alejaba, hasta que se alejó lo suficiente, y no hubo nada más que silencio.

Pasó una hora o dos de cabalgata. Philip estaba visiblemente nerviosos y asustado, relinchando con cada pequeño sonido ya fuera de una roca que había pateado sin darse cuenta o de alguna rama seca que había pisado. La montaña estaba rodeada con una extraña niebla espesa que imposibilitaba ver más allá del camino, el cual solo se iba revelando según avanzaban.

Hace poco había amanecido, así que por lo menos la terrible oscuridad de la noche no se mezclaba innecesariamente con el espectral escenario.

En una media hora más _______ llegó finalmente a un extraño umbral que había sido tallado en la piedra de la montaña. Tenía extrañas marcas, runas y calaveras alrededor, y dentro, solo podía verse oscuridad. Esa debía ser la entrada, y a juzgar por los tres pares de pisadas que adornaban el suelo arenoso, _______ supo que sus compañeros habían entrado allí.

La elfa se bajó de su caballo y se asomó con temor. El silencio de muerte no le daba ni un poco de confianza. De repente arrepintiéndose, ________ giró en sus talones para volverse a subir a Philip y volver al campamento, pero de la cueva salió una brisa abismal que ahuyentó a Philip al instante. El caballo relincho y corrió con toda su fuerza de nuevo al campamento, dejando a ______ sola en aquel desierto rocoso.

"Cuídalo, _______, cuídalo por mí."

Su mente recordó tales palabras como si estuviera regañándose a sí misma por su cobardía.

𝔗𝔥𝔢 𝔖𝔦𝔩𝔢𝔫𝔱 𝔓𝔯𝔬𝔪𝔦𝔰𝔢 || ᴸᵉᵍᵒˡᵃˢ ᴳʳᵉᵉⁿˡᵉᵃᶠDonde viven las historias. Descúbrelo ahora