Capítulo 27

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Elle

-¿Qué eres? -pregunté asegurándome de haberlo entendido correctamente.

-Soy un maldito, Elle. -respondió de nuevo, sus ojos mirándome sinceramente.

-No, no lo eres. Lucca, no existe algo como maldiciones. -dije sacudiendo la cabeza y riendo ligeramente.

Era algo diferente.

Una sorpresa repentina cruzó rostro ante mis palabras, que luego fue rápidamente reemplazada por su habitual máscara en blanco.

-Claro, tienes razón. Viste a través de mi broma. -dijo en tono agradable pero burlón.

Lo miré extrañamente, pero luego me sacudí, -Voy a pedirle a Nathaly que te haga un sopa, mientras tanto descansa, te sentirás mejor después.

-De acuerdo. -dijo, y luego me dio la espalda.

Salí silenciosamente de la habitación y bajé a la cocina donde Nathaly se preparaba para empezar el desayuno, considerando que era fin de semana y todos tenían libre.

-Buenos días, Nathaly. - la saludé con un beso y rápido en la mejilla. 

-Good morning Elle, ¿cómo fue tu noche? -preguntó y imágenes de la noche anterior cruzaron mi mente. 

Me sorprendió que la imagen de mí inclinada con Lucca detrás mío enviara una sacudida de sorpresa a través de mi cuerpo, era extraño, pero me lo sacudí.

-Estuvo bien, gracias. ¿Cómo fue la tuya? -pregunté, evitando el contacto visual.

-Estuvo tranquila. -respondió.

-¿Cómo está el dueño de la mansión? -se rió.

-Ha contraído un resfriado. ¿Te importaría hacerle una sopa? Sé que realmente le encanta tu cocina. -expliqué.

-Claro, ningún problema. -dijo mientras comenzaba a moverse por la cocina.

-Me dijo que estaba maldito. -de repente hablé, el pensamiento aún en mi mente. 

Nathaly pareció sorprendida, pero luego sonrió y sacudió la cabeza.

-Lucca presenció el asesinato de su madre a los 5 años. Su madre tenía los mismos ojos azules que él. Su padre lo culpó por su muerte y dijo que desde que él causó su muerte, y su mamá fue la única persona que realmente lo amó, Lucca nunca encontraría a alguien que lo amara de nuevo. Al decirle esto una y otro vez cuando era niño, y de adolescente, Lucca comenzó a creer a su padre, así que cuando su padre murió, comenzó a vivir la vida de soltero sin preocuparse, creyendo que estaba maldito. Hasta que te conoció. -explicó Nathaly, y yo estaba sorprendida hasta el fondo de mi ser.

-¿Cómo le respondiste? -preguntó de repente sospechosa.

-Quizás me reí de su confesión. -admití tristemente, ahora me sentía como una completa imbécil.

-Oh, mi querida, bueno, seguro que no se lo tomará a mal, aunque no puede ser fácil para él admitir eso. -razonó Nathaly, luego nuestra conversación tomó un tono más ligero.

Para cuando la sopa estuvo lista, Lucca estaba despierto en su laptop.

-¿Qué estás haciendo? -pregunté, entrando en la habitación.

-Sólo ocupándome de algunos asuntos. -respondió, como si no tuviera fiebre ni dolor de garganta.

-Claro, porque eso es exactamente lo que te dije que hicieras. -dije, poniendo la sopa mirándolo con desaprobación.

-Elle, por favor, no es el momento. -dijo evitando mirarme.

Debí haberlo lastimado realmente.

-Lucca...

La Mujer de la BestiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora