Inmarcesible

CAPITULO 17

Keira

Eamon se coloca detrás de mi, siento su respiración detrás de mi, mientras sus manos van a las mías y las toma, guiándome a posesionarlas sobre mi pecho.

-Es importante que te creas lo hábil que eres, si no te lo crees, por mas practica no lo vas a lograr- murmura detrás de mi oído y una sensación se acumula en mi vientre.

Ay madre mia.

El me suelta para luego colocarse nuevamente enfrente mío. -Tus emociones son lo que manejan tus habilidades, son aquellas que debes sentir para poder usarlas, puede ser una arma de doble filo, por que puede salir mal o salir bien, por eso, tienes que aprender a manejarlas, saber cuando parar y no dejarte guiar por ellas.-

Entonces extiende sus manos hacia mi dejando las palmas hacia arriba, sus ojos se concentran en ella y en menos de dos segundos unas llamas largas invaden sus manos. Mi instinto es buscar algo para apagarlas, pero al ver que su rostro era calmado, pude asimilar el echo de que el las creo y que no le quemaba.

Mis ojos se abren con sorpresa y doy un paso atrás.

-Puedes manejar el fuego, agua, tierra, aire y hielo, y eso son solo los básicos, nosotros nos vamos mas por la transformación y defensa propia, también sabemos manejar fuego pero a diferencia usamos magia negra, que nos permite facilitarnos cualquier cosa- un movimiento en sus manos hace elevar una rama y moverla por el cielo -Levitación- luego aprieta su mano y la rama se destruye -Destrucción de la materia- sus ojos se centran en una rana que se encontraba saltando de un lado a otro, nuevamente con su mano hace que esta levite y se sacuda en el aire, para después ser transformada en una mariposa negra. -Transformación- para después abrir mas su palma en su dirección y la mariposa empieza a volar mas bajo, cada ves mas bajo, hasta quedar en el piso sacudiendose en este para de un momento a otro quedarse quieta y secarse por completo -Muerte- dice con frialdad y chasquea sus dedos desapareciéndola.

Siento un escalofrío al ver como la mato e hizo que sufriera de agonía, Eamon ve mi rostro y comprende mi choque de pensamientos -No te preocupes, es una plaga con veneno que terminan matando a ciertas criaturas con solo su toque-

Camina rodeándome mientras me mira fijamente, de pies a cabeza.

-Esas son las habilidades mas importantes que manejamos, pero tenemos muchas mas que notaras en otro momento, por ahora, centrémonos en ti, ¿Qué te hace enojar Keira?- me quedo pensando un poco. – No encontrar comida en la cocina- veo como Eamon solo rueda los ojos ante mi comentario quedando frente de mi nuevamente.

-Algo que te haga enojar de verdad, que te arda tu cuerpo con solo pensarlo, y quieras gritar- por mas que intento encontrar algo que me enoje de esa manera no lo encuentro, o tal vez si lo sepa pero prefiero no decírselo.

Solo alzo los hombros y escucho el suspiro de Eamon.

-Eres una niña caprichosa y fastidiosa Keira- murmura con un poco de enojo notorio en su voz -No se como es que tu lograste ser hija de una bruja con tantas habilidades cuando tu eres tan inútil- comenta y sus comentarios empiezan a enterrarse como dagas en mi corazón haciendo que mi sangre empezara a hervir- Ahora entiendo por que tus padres te ocultaron algo tan importante, sabían que no podrías manejarlo -Mis ojos se cierran con fuerza al escuchar esas palabras, y escucho ecos a mis alrededores, voces que empiezan a decir lo inservible que soy -Me imagino que no están orgullosos de que su única hija y manera de mantener el linaje, resulto ser una buena para nada- suelta esas ultimas palabras y yo ya me encuentro yendo hacia el a una velocidad inhumana, tomándolo del cuello y colocándolo contra el tronco de un árbol alzándolo del piso, mientras que en mi otra mano algo se ilumina mientras suena algunos toques, entonces una bola de luz azul eléctrica sale iluminando amenazando con tocar el rostro de Eamon, pero el reacciona rápido y se abalanza contra mi, sacándonos volando cayendo a varios metros de distancia, tumbándome contra el suelo dejándome a el sobre mi presionando su cuerpo contra el mío, su mano va hacia mi cabeza para evitar el golpe.