Inmarcesible

CAPITULO 28

Keira

Una semana a pasado desde que encontre la verdad de mi pasado.

Una semana en la que no e salido de mi habitación, incluso despues de peticiones de los chicos e intentos de distrairme, mi vista estaba solo centrada en un punto perdido, lloraba por las noches y tambien en las mañanas.

Ultimamente Eamon pasa por mi habitación para buscar conversar, y se me hace un gesto muy noble pero no le contesto, y al ver que no tengo interés en hacerlo, solo busca venir a hacer acto de presencia. Aun que a veces hay cosas que trae con el, como comida, libros, juegos de mesa, tuvo el tiempo de ir a la ciudad y traer cosas que sabia que me gustaban, solo para que mostrara interés en algo que no fuera mi trauma, pero me era imposible regresar, no despues de recapitular mi pasado y durante esta semana, tuve mas recuerdos que mi memoria bloqueo, donde fui forzada a hacer cosas que nunca me imagine que haria, y saber que era una asesina y no solo de una vez, si no de docenas de veces, me asquea con mi misma, e intentado borrarlo cuando me baño pero solo verme al espejo me da asco, saber que no solo mate criaturas, mate humanos, niños, personas y criaturas de todas las edades, las voces donde me rogaban por piedad invadian mi cabeza cada noche dejandome sin dormir y las veces que lo hacia, despertaba con una pesadilla, que resulta ser mas un recuerdo.

Pero esto cambio hoy, si, estoy podrida, pero no puedo cambiar lo que paso, en cambio, quiero buscar respuestas como el ¿Por qué tengo recuerdos donde era feliz y mis padres me amaban? ¿Por qué siempre actuaron como si les importara cuando en realidad mi creación solo fue por su legado? La tristeza se vuelve en enojo, el cual se convierte en sed de venganza. Venganza por aquellos infelices que me arruinaron la vida, a tan solo temprana edad, pero para ello, necesitaba primero respuestas, por lo que sabia que me llevaria tiempo, tiempo donde los veria, y tendria que actuar como si no supiera nada, cuando el veneno me ardia en mi garganta.

No podia poner marcha mi plan acostada en una habitación esperando que solo sea la noche para volver a dormir, por lo que decidi reanudar mi estancia aquí, solo que ahora tenia un proposito mas, no solo saber quien soy, si no usar mis habilidades para prepararme para el dia del enfrentamiento.

Levantarme de la cama fue dificil, las piernas no me respondian, y la cama era como un iman de depresión, pero logro alejarme, tomo una ducha para despertarme y alejar pensamientos pero sigo atormentada. Finalmente me miro al espejo y miro mi cuerpo desnudo, ¿Cómo es que a pesar de haber sido golpeada, quemada y maltratada no tengo ni una cicatriz? Busco algun rastro de ellas pero lo unico que encuentro son imperfecciones del cuerpo humano, mi mandibula de tensa al tener recuerdos de las veces que fui castigada y yo rogaba por que pararan.

Decido cepillar mi cabello rapidamente y vuelvo a tapar el espejo, voy al closet y busco algun atuendo perfecto para empezar el dia y lo encuentro, veo mi ropa de ciudad y juro que en un tiempo libre la voy a quemar, me visto con rapidez y ya con mas practica, decidiendome por una camisa blanca bombacha de las mangas con una abertura dejando un pequeño escote, encima de esta un chaleco olivo corto, unos guantes de cuero cafes un poco largos, un corset café se acomoda en mi cintura con bolsas suficientes y estuches para cualquier arma que elija, unos pantalones de cuero cafes y unas botas largas del mismo color que el pantalon, un listón café esta perfectamente amarrado alrededor de mi cuello en forma de decoración, amarro mi cabello en media coleta dejando la mitad de mi cabello suelto y otra amarrada en un moño desordenado.

Ni siquiera me tomo tiempo de arreglar mi habitación, solamente salgo y me dirijo a la cocina, no habia comido bien ultimamente y si queria esforzarme y dar lo mejor de mi en los entrenamientos, necesito el estomago lleno, lo ultimo que necesito son problemas de salud, ya tengo muchos mentales.