ENAMORADA DE MI AMO

CAPITULO 28

SOMMER

No tenía palabras para expresar la experiencia que había vivido el día de junto con Alessandro. Realmente nunca pensé que se prestaría para recrear una de la escena de uno de los libros en los que he estado sumida. Últimamente le he tomado el gusto a leer ese tipo de género. Quería saber cómo se sentía, y anoche cuando Alessandro me tenía en sus brazos le conté lo que deseaba, por su puesto él estuvo encantado, es fanático de los juegos de roles.

Me causo gracia el gesto que puso cuando le conté que era lo que quería exactamente, me dio un par de idea. Para ser sincera me gustó mucho, nunca pensé que explorar esta parte de mi sexualidad y hacer este tipo de cosas con el hombre que me gusta me satisficieran tanto. También es una manera de entregarle el control a él, ya que sé que es un fanático de él.

No voy a negar que también quería que supiera que no le hace falta buscar en otra parte lo que yo puedo darle, no necesitamos de un maldito contrato para vivir al máximo nuestra sexualidad. Con esto le he demostrado lo abierta que estoy a entrar a su mundo, pero no como una sumisa más, si no como la mujer que desea amarlo.

Nos tomó unas horas llegar al hotel donde teníamos una reserva. Alessandro tenía varios planes para el día de hoy y yo solo me dejaría consentir por el hombre.

Al llegar al hotel, uno de los empleados nos llevó a la habitación, Alessandro me tapó los ojos antes de bajar del auto. Me dijo que encontraría una sorpresa al llegar a nuestra habitación. Estaba muy ansiosa, me encantan las sorpresas. Mis manos sudan, el corazón me late tan fuerte que me da miedo que se salga de mi pecho. Puedo sentir el latido de mi corazón en mis oídos, el pulso lo tengo acelerado, el nudo que se me ha formado en el estómago es del tamaño de una pelota de beisbol.

Siento que caminamos kilómetros antes de detenernos, no puedo ver nada dado el trozo de tela que cubre mis ojos. Una voz profunda y bastante varonil habla a mi oído.

- ¿Estas preparada? – Jesús solo escucharlo me hace erizarme, es como si tuviera el dónde de excitarme con solo sentirlo cerca.

-¿Qué es todo esto? – Inquiero nerviosa y ansiosa. Todo este misterio está haciendo que quiera comerme las uñas.

Sus manos se posan en mis caderas y siento su duro pecho posarse detrás de mí, el olor de su perfume me embriaga. El hombre es como una estufa humana, siempre es tan cálido, tan fuerte, tan...

No.

Me regaño.

No puedes ir ahí Sommer, debes controlarte.

– Solo quiero darte todo lo que te mereces. Bambola, no soy un hombre romántico. Nunca he sentido la necesidad de hacer esto por una mujer. Pero si quiero que funcione, te juro que me esforzaré por ser el hombre que deseas para tu vida – Si esto es un sueño mataré al que intente despertarme. Siento el sonido de una puerta abriéndose - ¿Lista?

-Por favor, dime de que se trata – Musito, no puedo esconder el tono ansioso de mi voz.

Las manos me siguen sudando, el corazón me sigue tamboreando en el pecho, es una mezcla de muchas emociones, un coctel bastante cargado que logra embriagarme. Con Alessandro he descubierto muchas cosas que no sabia de mí, pensé que me conocía a la perfección, pero con cada interacción que tengo con este hombre algo nuevo descubro.

Pensé que entendía que era el amor, aun cuando no era experta en el tema, pero dado los sentimientos que albergaba por Antonio creía que era amor verdadero. Ahora lo entiendo, en algún momento de tu vida va a llegar la persona que te enseñe lo que es sentir el amor de verdad, las ganas de estar a su lado siempre, las ganas de correr a esa persona cuando sienta que tu mundo abajo. Sabrás que el amor tienes muchos matices, y que hay una alta gama del sentimiento.