Yu Jimin – 17 de febrero (Horas antes de despertar)
≪ °❈° ≫ VELO DE FENRRIR (Dimensión espiritual) ≪ °❈° ≫
¿Cuántos días llevaba aquí? No tenía idea, el tiempo funcionaba algo diferente a la vida real. Siempre era de noche y solo el brillo de la madre luna podía permitirnos ver más allá de los tupidos árboles del bosque. Era como Sherwood, pero sin la nieve invernal.
Caminaba descalza sobre la hojarasca húmeda que cubría el suelo. Al velo de Fenrrir podríamos considerarlo otra dimensión, o tal vez solo ese sitio espiritual donde podías estar frente a frente con tu animal interno.
Es aquí donde desde niño debes aprender a equilibrar tu vida. Pocas veces me vi en la necesidad de entrar y generalmente lo hacía por medio de sueños como esa vez que Minjeong fue atacada por Hailee, pero ahora la verdad era otra. No encontraba salida, mi loba no estaba en ningún lado.
Volver era tan simple como tocar al animal, aunque sin ese animal la situación era difícil. ¿La bebé ya había nacido? Seguramente, solo pedir a la luna que Minjeong la protegiera en mi ausencia.
Aquella mujer de ojos rojos logró que volviera unos segundos a la realidad, pero tan pronto como sentí ese dolor desgarrador en mi interior, volví a sumergirme aquí.
Aparté la mirada del suelo cuando un suave sonido del crujir de hojas llegó a mis oídos. Me apresuré en ir hasta el lugar de origen con la esperanza de toparme con la loba negra. Pero fue grande la sorpresa que me llevé al notar unos amarillos ojos de beta.
¿Había alguien más aquí? Era posible ya que era la dimensión sagrada de los licántropos, todos podíamos venir aquí cuando quisiéramos, pero jamás coincidí con nadie.
—Preséntate beta —hablé enseguida.
Aquel lobo de pelaje marrón un poco grisáceo provocó una oleada de emociones en mi interior. No pude reconocerlo al instante, pero ahora completamente frente a la luz de la noche. Yu Suno me observaba silencioso.
Mi cuerpo se tambaleó haciéndome retroceder algunos pasos por el inesperado encuentro. Luego de meses sin saber de él, enterarme de todas sus traiciones... era doloroso.
—Jimin.
Intenté regular mi respiración, él no podría hacerme nada aquí solo éramos espíritus sin cuerpos físicos.
—¿Qué haces aquí? —pregunté molesta.
Quería lanzarme contra él, pero no podíamos pelear en esta realidad.
Era un lugar sagrado.
—He estado viniendo hace un par de días, con la intención de encontrarte —confesó colocando una pata delante de la otra para acercarse.
Aun con su forma de lobo era capaz de entender sus palabras. Cada centímetro que se adelantaba hacía que mi corazón latiera a gran velocidad.
—¿Qué te hace pensar que deseo verte? Eres un traidor sin honra.
ESTÁS LEYENDO
Cruzada, Nieve y Caos [WINRINA 2]
FantasySegunda parte de "Cruzada, Sangre y Luna" Tras una violenta confrontación con la implacable Orden Europea, las vidas de Winter y Jimin cambian para siempre. Un desenlace inesperado las lleva al hospital, donde un descubrimiento impactante sacude los...