Capítulo 43

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Wei Wuxian

Respiré hondo antes de abrir la puerta de vuelta a la sala del hospital. Todas las miradas se volvieron hacia mí nada más entrar. Qi Ren y los demás ya están allí y Huaisang se acercó a mí cuando se le pasó el susto de mi nuevo aspecto.

Me alegré de que nadie dijera nada, sería tan extraño decirles que estaba en el jardín de la diosa de la luna y que ella nos había convertido a mi lobo y a mí en uno.

Gracias a Dios que estás bien, niño.
No te atrevas a volver a hacer ese tipo de jugarretas, hizo un moín y yo me reí por lo bajo. Creo que me gusta ese ambiente del hospital, puede que venga de vez en cuando, dije riendo pero a nadie le hizo gracia.

Todos me miraron sin comprender y yo tosi un poco antes de rascarme la nuca nerviosamente. Sí no ha tenido gracia. Lo siento chicos, me disculpé con una sonrisa nerviosa y miré a mis pies.

Vamos a llevarte a casa para que descanses, dijo Lan Yi mientras me cogía de la mano y me empujaba hacia la puerta. Ya estábamos fuera de la habitación cuando recordé algo.

¿Dónde está? Pregunté y todos intercambiaron miradas. ¿Quién cariño? Me preguntó Lan Yi. Mian Mian, respondí con voz monótona y todos se callaron.

¿Qué está pasando? ¿Por qué están callados? Espera, no...

No está muerta ¿verdad? Por favor, dígame que yo no la he matado, supliqué con lágrimas en los ojos. Puede que no me gustara pero eso no significa que deseara su muerte.

Una mano me rodeó la cintura por detrás y Lan Yi y Huaisang me soltaron. Te enseñaré dónde está susurró él y debería y debieron hablar a través del enlace mental porque todos los demás se marcharon, dejándonos a los dos solos en el pasillo del hospital.

Me sentí tan seguro y en paz en sus brazos mientras me llevaba hacia dónde estaba Mian Mian, pero me negué a mirarle a los ojos. No sabía por qué me sentía tan tímido como si fuera la primera vez que lo veía.

Abrió una puerta y me condujo a la habitación. Me quedé sin aliento al ver el estado de Mian Mian, que parecía sin vida salvo por el constante subir y bajar de su pecho.

¿Yo hice eso? Conseguí tartamudear mientras señalaba su cuerpo. No podía creer que la hubiera puesto en esa situación.

Sí, lo hiciste, Wei Wuxian, Wangji habló delante de mí y yo me volví hacia él con la respiración contenida. Sus ojos no delataban nada de lo que sentía. ¿Estaba enfadado porque había dejado así a su juguete? ¿Me atacaría por herir a un compañero de la manada?

Lo hiciste y estoy orgulloso de ti, dijo y una sonrisa se dibujó en su rostro mientras sus ojos brillaban de orgullo y adoración. Estaba orgulloso de mí.

No me alegro de que hayas hecho daño a otro miembro de la manada, pero ella se lo merecía. Si no se hubiera cruzado contigo, no habrías arremetido.

Dijo con una sonrisa y sentí que mi corazón se estremecía al ver su hermoso rostro. Él debió sentir lo mismo porque me acercó por la cintura mientras me miraba los ojos. Era como si hubiera un pegamento invisible entre nosotros y yo quería empaparme de todos los sentimientos.

Tú también lo sientes ¿verdad?
Susurró y yo asentí con la cabeza. Xiao Zhan audio de excitación en mi cabeza. Volví a sentirme como la primera vez que lo conocí. El corazón Me latía con fuerza en el pecho y sentía que me iba a caer en la intensidad de sus ojos sobre mí.

¡Mío! Gruño, sus ojos se volvieron dorados lo que indicaba que su lobo tenía el control. Me cogió suavemente la barbilla y volvi al fondo de mi mente para que Xiao Zhan pudiera hablar con su compañero.

Un lobo en la oscuridad 🌑🐺Donde viven las historias. Descúbrelo ahora