Park Jimin es el CEO más poderoso y el hombre más rico de Seúl, deseado por todas las mujeres. En su vida pública, es conocido por ser frío y tosco. Sin embargo, al cruzar la puerta de su hogar, se transforma en el esposo más tierno y amoroso, un la...
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La mañana siguiente, Yoongi se despertó con un sentimiento de emoción. Estaba feliz de tener a su esposo en casa luego de largas semanas dificiles. Se levantó de la cama con una sonrisa, sintiéndose renovado y listo para enfrentar el día.
Bajó las escaleras y entró a la cocina, pero notó que Jimin no estaba allí. Al mirar por la ventana hacia el patio trasero, vio a su esposo hablando por teléfono con expresión seria. A pesar de que Jimin lo vio y le sonrió, Yoongi sintió un ligero nudo en el estómago. Sabía por la expresión en el rostro de Jimin que algo no estaba bien.
Cuando Jimin terminó la llamada, se acercó a Yoongi con una expresión preocupada.
— Bebé, necesito hablar contigo —dijo Jimin, llevándolo hacia un rincón tranquilo del patio.
—¿Qué pasa, Jimin? —preguntó Yoongi, preocupado por la seriedad en la voz de su esposo.
Jimin suspiró antes de responder. —Recibí una llamada esta mañana. Una situación inesperada ha surgido en Londres y necesito viajar allí lo antes posible. Tengo que tomar un vuelo esta noche.
Yoongi se sintió desconcertado. No esperaba escuchar eso, especialmente después de haber recuperado a Jimin apenas ayer. Sin embargo, sabía que las responsabilidades de Jimin como CEO a veces requerían decisiones rápidas, viajes repentinos y más con sus nuevos proyectos.
—¿Qué pasa en Londres? —preguntó Yoongi, tratando de entender la situación.
Jimin le explicó brevemente los detalles de la situación empresarial que requería su atención urgente en Londres. Aunque entendía la necesidad de Jimin de viajar, Yoongi no pudo evitar sentirse un poco desanimado.
—Lo siento, Yoon. No planeé que esto sucediera tan pronto después de mi regreso —dijo Jimin, acariciando suavemente la mejilla de Yoongi.
Yoongi asintió, tratando de ocultar su decepción. — Lo entiendo, Jimin. Sé que tu trabajo es importante y a veces surgen emergencias. ¿Cuándo estarás de vuelta?
Jimin miró a Yoongi con tristeza en los ojos. —Espero que no sea por mucho tiempo. Haré todo lo posible por resolver esta situación rápidamente y regresar a casa lo antes posible.
Yoongi forzó una sonrisa, tratando de mantenerse positivo. —Está bien, Jimin. Entiendo. Haz lo que necesites hacer. Estaré aquí esperándo cuando vuelvas. — hizo una media sonrisa.
Jimin lo abrazó con fuerza, sintiendo el amor y el apoyo de Yoongi incluso en medio de las circunstancias difíciles. Sabía que no era fácil para Yoongi enfrentar estas separaciones repentinas, pero también sabía que su amor era lo suficientemente fuerte como para superar cualquier distancia.
—Te amo, Yoongi. Gracias por entender —dijo Jimin, besando la frente de Yoongi con ternura.
—Yo también te amo, Jimin. Cuídate y mantente a salvo allá afuera —respondió Yoongi, devolviendo el abrazo con fuerza.
