Cada día se me es más complicado levantarme 30 semanas ya tengo mucha panza, pronto estarán aquí los bebés, después del susto que tuve con Max aquella tarde, puedo decir que estoy fuera de peligro pero algo no me deja tranquilo.
Pato decidió aclarar todos sus asuntos con su amigo como siempre tuve razón solo estaba confundido el pobre adolescente. También decidió tomar una buena decisión, no quiere estar solo lo que resta su embarazo justo hoy entro a la semana 32.
Si me hubieran dicho desde el principio lo que sucedió a su alrededor lo más seguro es que lo hubiera acompañado como hasta ahora, hasta el final. Ya no es momento para él si hubiera pasado, al final las cosas fueron diferentes.
No sé de dónde saqué algo de valor para advertirle a mi esposo que me iría de casa por un tiempo si seguía con su comportamiento, aunque aun así no podía dejar solo a mi patito Cuak Cuak. De ahora en adelante debo lograr que se cambien muchas direcciones en este hogar. Por el bien de mi familia.
Logré que Carlos se tranquilizara por el bien de todos, ese también es un asunto por el cual debe de aprender a manejar los impulsos que le dan, se que nunca se llevarán bien entré él y Max, les debo de recordar que todos somos familia.
Después del desayuno que tuvimos en familia mi esposo, mi hijo y yo. Me puse a leer un rato en sala junto a Pato, Max fue a entrenar un rato entonces nos dejó un momento de paz.
Le sugiero que veamos una película, tal vez pasemos un rato agradable antes de que exista mucho movimiento por los partos y los bebés.
La mejor parte se acerca cuidar a un bebé es lo mejor que uno puede sentir, no importa que con el tiempo crezcan, al final si haces un buen trabajo solos se podrán guiar por el buen camino. Esta vez haré y pensaré mejor las cosas, para no repetir este mismo error dos veces, a Pato lo que le faltó fue reforzar más la cercanía con nosotros. Se que será un gran papá y más al ser él solo, no tener pareja o a la persona que lo embarazó a su lado, no fue fácil pero tampoco difícil, eso dice mucho de él. Es muy fuerte y pude con todo me lo ha demostrado, lo maduro que se volvió con todo esto. Si no es la mejor etapa de su vida pero no indica que sea el final. Sé que pude hacer más por él mismo, eso me llena de orgullo.
Seguimos viendo por un rato la película pero se que en algún momento nos distraemos por diferentes situaciones, no le préstamos más atención a la película yo me adentre en mis pensamientos por un momento veo a Pato los dos no estamos tan lejos el uno con el otro en el sofá, se encuentra agarrándose el vientre con gesto de preocupación. Su rostro muestra una mezcla de dolor y ansiedad mientras , con nerviosismo palpable, trato de tranquilizarlo. De repente, un charco se forma a sus pies y me doy cuenta con horror de que ha roto aguas.
-Pá, me hice pipi al parecer mi vejiga no aguanto- Cuando se levantó del sofá es obvio lo mojado no es por pipí es por qué se le ha reventado la fuente. Reaccionó lento y me doy cuenta.
-No, Pato esa no es pipí, estás entrando en labor de parto- Su cara es de asombro y dolor al parecer está teniendo sus primeras contracciones. Cómo es la primera vez, al parecer no lo noto.
El ambiente en la casa se llena de acción, le indico que se tranquilice, que no se siente, debe de hacer ejercicios de respiración. Le llamó a Max para que se apresurara a subir, le explicó la emergencia y no tardó en llegar.
Busco frenéticamente la bolsa del hospital que la preparamos hace unos días. Pato lucha por mantener la calma mientras su contracciones comienzan a intensificarse, su respiración entrecortada llena la habitación.
Max salió a preparar lo más rápido que puedo el auto, por lo que llega Carlos que vendrá acompañado de mi cuñado porque él chico se quedará conmigo por el momento no pudo acompañar a mi hijo al hospital por mi incidente de la presión y las pequeñas contracciones, no puedo entrar en estrés por el momento, ya lo habíamos platicado antes que Max y Chili se encargarían, yo iría después para no entrar en el estrés del momento.
Cuando es hora de que se vayan Max carga con mucho cuidado a Pato, este solo se aferra a su padre.