Extra tres

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(Arthur)

1997

Cuando llego al invernadero mi padre está inclinado frente a unas plantas, hablando con ellas. Estoy seguro de que el tío Sirius al verlo pondría los ojos en blanco y repetiría que papá está loco, y le pegó su enfermedad a Luna.  

Está vestido todo de blanco, unos pantalones, abrigo y gorrito de algodón. 

Seguramente que esté bien resguardado es obra de Lucius, que siempre se preocupa por estas cosas y ahora mucho más cuando mi padre está embarazado.

— No puedes hacer eso.  — Le regaño.

— Estoy embarazado, no invalido. — Se encoge de hombros y aleja sus dedos antes de que la planta carnívora le muerda. Luego me mira con el ceño levemente fruncido — Le has asustado con tu fea cara.

— El 99.99% de las personas piensan que soy igualito a ti, así que deberías de preocuparte por tus propias acusaciones.  — Le ayudo a levantarse y lo guio hasta la pequeña mesa de cristal que hay en medio del invernadero. Papá se deja caer con pesar y se acomoda sus orejeras blancas.

— ¿Que se te apetece? — Después de un momento pregunta mirándome intensamente.

 — ¿De qué hablas? — Me hago el loco, sirviéndole una taza de café.

— De que te la pasas todo el tiempo con tus novios y te has acordado de tu padre, algo debes de querer. — Habla acusadoramente.

 — Sabes que te amo...— Sonrío inocentemente.

— ¿Dinero? No, dinero no te hace falta ¿Tienes un problema? No, eres capaz de solucionar todo, aunque... bueno, si es algo emocional se te dificulta, aunque eres cariñoso no eres bueno para decir siempre lo que sientes porque te sientes como un tonto, además-

— ¡Papá! — Exclamo avergonzado. Papá hace un mohín y se queda callado. Pero por su mirada, estoy seguro de que quiere que le hable directamente de mi problema. Suspiro. — Solo... Vine hasta ti para pedirte un consejo, ya sabes, tu relación es también un trio. No sé qué más hacer, me siento mal cuando estoy haciendo algo con Harry y de repente llega Draco, o estoy haciendo algo con Draco y llega Harry. No siempre disfruto del tiempo los tres justos, ¿Es ser pésimo novio querer pasar tiempo a solas con uno y el otro no de vez en cuando?

Padre no responde rápidamente, está distraído jugueteando con la taza de café y por un momento temo que no me haya prestado atención.

— Cariño, no es obligatorio que cada que quieras salir con alguno tengas que llevar a ambos. Puedes tener momentos a solas con cada uno y ellos contigo.

— Pienso que alguno se pondrá inseguro si eso pasa. — Me encojo de hombros inseguro, recordando nuestros primeros años en Hogwarts, mis propios celos cuando éramos niños.

— Entonces trata de hablarlo con ellos y poner todas sus reglas y necesidades sobre la mesa para que eso no pase. No se qué tendría que ver yo ahí. — Miró sus uñas pintadas con esmalte de uñas transparente, cortesía de mi hermana Luna.

— Es raro todo esto para mí.

— Por supuesto que sí. — Murmura tajante.

— ¡Papá!... — Le advertí. Él puso los ojos en blanco y se cruzó de brazos.

— No es que yo pueda ayudarte mucho, mi relación es poliamorosa como la tuya, pero nosotros somos diferentes a ustedes, más liberales y permisivos.

— Tampoco es para que sean infieles. A veces lo haces ver así — Murmuré. Intenté cambiar el sentido de la conversación. Me gusta cuando me habla de él y su relación. Papá hace una pausa, martillándome con sus ojos azules iguales a los míos, dándose cuenta de que estoy evitando hablar directamente de mí.

🍃Como debía de ser 🌿| Harry Potter y Draco Malfoy.[1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora