¿Estarías dispuesta a ir a una subasta fuera de lo común?
¿Serías capaz de subastar tu cuerpo solo por un beneficio económico?
¿Qué serías capaz de hacer por salvar a tus padres?
Atención: Contenido Adulto ( escenas explicitas sexuales, agresión fís...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Abrí la puerta de Lèa sin preguntar, no sé inmuto y siguió escribiendo en su laptop sin verme. Las cosas no habían cambiado a pesar de haberle dado un par de días.
—¿Puedo sentarme? — hablo bajo.
Sigue escribiendo en su teclado—Si, claro.
No me mira y eso me decepciona un poco, y me siento despacio observándola.
—Yo quiero...— empecé a hablar.
Cierra la laptop molesta y me mira con sus ojos negros de manera intensa—No voy a disculparte — frunció su ceño.
Relamí mis labios y traté de mantenerme tranquila —Sé que me he obsesionado pero no quiero que esto interfiera entre nosotras Lèa— digo bajo.
—Está bien Roseanne, no hay nada de que hablar— su tono de voz hostil me hizo fruncir el ceño.
—Sé que he estado metida en mis asuntos, pero quiero que sepas que cualquier cosa cuentas conmigo— digo buscando su mano pero ella la aleja.
—Ya es demasiado tarde — me dice y abre la laptop de nuevo molesta.
—¿Qué?, ¿por qué? — pregunté sorprendida y levantándome de la silla dispuesta a insistir.
Me mira por unos segundos —Bien lo dijiste, cada quien tiene su vida y cada quien tiene que resolverlas — responde tajante y cruzándose de brazos.
—Lèa — la llamo con voz suave y si entiendo una frustración creciendo en mi vientre.
—Tiene influencias — suelta de pronto — y tiene una familia, ¿vas a meterte en eso?, ¿te parece justo que ella crezca sin un padre? — me cuestiona.
Confundida la miro pero a los segundos entiendo, habla de Selena y su familia —No es mi problema— respondí.
—Es verdad, no lo es...— relame su labio inferior —y lo entiendo, es muy linda.
Fruncí el ceño — ¿Por eso no habías venido?, ¿estuviste en su casa?, ¿por qué? — la cuestioné.
Asintió —Mi papá— respondió y con eso lo entendí.
Pensé que era un viejo amor, pensé que era otra cosa y lo que tenía tan nerviosa y molesta a Lèa es que vería a su papá, y su padre la obligaría a estar a su lado como siempre lo ha hecho, donde sea y como sea, ni siquiera entiendo porque ella lo obedece en todo, quizás sea miedo, quizás sea algo más.
—No lo sabía — intenté abrazarla pero no cedió.
—Fue una fiesta privada y por mi desgracia tuve que estar ahí — me miró por unos segundos más y suspiró — Bueno, voy a seguir trabajando.
Sabía que quería terminar la conversación pero no lo permití.
—Tenías que haberme dicho, y quizás yo podría haber hablado con el — solté molesta.
