Conociendo a mi ídolo |Marc Márquez| [FINALIZADA]

Capítulo 20: La pareja del año

- ¿Tú eres fan de Márquez, verdad?

- Así es, hace mucho tiempo que sigo a Marc.

- ¿Y no te da pena que no vaya a competir más en lo que queda de temporada?

- Bueno... A mí me encanta ver a Marc competir, pero yo no soy nadie para decirle qué tiene que hacer...

- Eres su novia, seguro que si se lo pides volverá.

- No somos novios, Emilio, y si le pidiese que vuelva no lo haría.

- Pero...

Su móvil comenzó a sonar e interrumpió nuestra conversación. Suspiró mientras miraba la pantalla.

- Debo contestar, pero piensa en lo que hemos hablado por favor, si Marc no vuelve esta temporada puede afectar mucho a su futuro, aunque él no sepa verlo.

Yo simplemente asentí y vi cómo se alejaba. El simple hecho de pensar que el futuro de Marc en motogp podía estar en juego me ponía los pelos de punta.

- Petita, ¿Todo bien?

Me giré y le sonreí a Marc mientras me acercaba a él.

- Todo bien, vamos a comer, me muero de hambre.

Él me sonrió y asintió mientras abrazaba mi cintura y comenzamos a andar hacia la barbacoa. Me quedaba poco tiempo en Barcelona, pero pensaba aprovecharlo al máximo.
-Narra Marc-
El jardín de nuestra casa estaba lleno de pilotos con sus parejas, de familiares y de amigos de mi hermano. Había tanta gente que tardé más de quince minutos en encontrar a Nevaeh. Cuando me acerqué a ella, decidimos ir a comer algo a la barbacoa. Allí nos encontramos a Rossi con su novia, Linda. Comencé a hablar con él mientras Nevaeh hacía el intento de hablar con Linda, que no tenía ni la más remota idea de hablar español.

- Creo que esta es la primera chica que me presentas y me gusta.

Sonreí al escuchar las palabras del italiano, yo no veía a Valentino como un contrincante más. Él era un gran amigo, y un gran piloto, así que me importaba mucho su opinión, tanto si se trataba de lo profesional, como de lo personal.

- Si supieses la sorpresa que le tengo tío...

- Eso es, cuidala Marc, no la descuides, las chicas tan especiales como las nuestras tienen a cientos de buitres alrededor para atacar desde el momento en la que la caguemos.

Yo asentí, sabiendo perfectamente que llevaba razón, y llené de comida los dos platos que llevaba.

- Luego hablamos.

Él me sonrió y asintió. Me acerqué a Nevaeh, que me arrancó uno de los platos nada más verme llegar, y me arrastró hasta las mesas.

- La novia de Rossi es muy simpática, pero debería plantearse ir a una academia de español.

Reí mientras nos sentábamos y comenzamos a comer. Mi hermano pasó a molestar, asegurando que no tenía ninguna foto con "la pareja del año", y luego se marchó en dirección a Rins, había demostrado que era un gran amigo...

- Mañana tenemos que madrugar, quiero llevarte a un sitio.

- ¿A dónde?

- Si te lo dijese no sería una sorpresa.

Ella me sacó la lengua y yo sonreí mientras la observaba comer. El resto de la tarde nos la pasamos con Rins, Pedrosa, Rossi y los hermanos Espargaro, mi hermano venía de vez en cuando, pero no tardaba en volver a irse para hablar con otros invitados. Nevaeh no parecía incómoda entre tanto piloto, e incluso se atrevió a participar cuando nuestra conversación se volvió mucho más técnica, se notaba que sabía muchísimo de motos. Pero la noche cayó, y la gente comenzó a marcharse. Los cinco estábamos bastante cansados, así que, cuando despedimos a los últimos invitados, mi padre llevó a mis abuelos a su casa y mi madre, Alex, Nevaeh y yo decidimos ir a la cama. No sabía cuáles serían los planes de mi familia para el día siguiente, pero Nevaeh y yo estaríamos ocupados gracias a mi sorpresa.
Dejé que ella se bañase primero y mientras llamé a Edgar, uno de mis mejores amigos de la infancia que no había podido venir a la barbacoa. Hacía meses que no quedaba con él, pero nos manteníamos en contacto por el WhatsApp y alguna que otra llamada teléfonica.

- ¡Qué pasa Marc!

- Tío, qué sepas que aún estoy molesto contigo, deberías haber venido.

- Me avisaste con muy poca antelación tío, lo siento. Pero ya vi las fotos que subió Alex a instagram y vi que no lo pasaste mal sin mí.

- A saber que fotos subió...

Tenía claro que lo primero que haría al colgar sería ir a darle un buen tirón de orejas a mi hermano pequeño, era la indiscreción en persona. Seguí hablando unos quince minutos más con él, me contó cómo le iba en la universidad y demás y yo me dediqué a escuchar y a contestar las preguntas que me hacía de Nevaeh.
Estaba hablando con mi amigo del motivo por el que había decidido hacer un pequeño descanso de las motos, cuando de pronto escuché voces provenientes del pasillo, eran Alex y Nevaeh, estaba seguro.

- Edgar, te llamo mañana, ¿vale?

- Vale máquina, cuídate.

Le colgué a mi amigo y, al abrir la puerta de mi habitación, vi una imagen que no me gustó para nada.