EL RENACER DE LOS DRAGONES

20. LA NUEVA VALYRIA

Desde los cielos descienden los que se creían muertos, Caníbal y Fantasma Gris. Un par de dragones que nacieron durante el reinado del rey Jahaerys I Targaryen y que se pensaba que estaban muertos, en la caso de Fantasma Gris se creía que murió en batalla contra Fuegosol el dragón del rey Aegon II Targaryen mientras que se creía que Caníbal ya había muerto pues luego de la danza de dragones a la cual sobrevivió, nunca se tuvo registro de algún avistamiento de este salvaje y aterrador dragón, mismo del cual se baja el rey Rhaego Targaryen y se dirige a la sala de trono de piedra.

-El rey Rhaego I de la casa Targaryen, primero con el nombre, rey de los Andals, los Rohynar y los primeros hombres, rey de los siete reinos y protector del reino, el gran semental, rey de la bahía de dragones, señor de Dragonstone, la sangre de la antigua Valyria- Exclamó con fuerza Sir Kalus para así anunciar la presencia del rey en la sala del trono.

Todos los presentes hicieron una reverencia para el rey quien se sentó en el trono de piedra de la fortaleza ancestral de la casa Targaryen. Todos estaban asombrados por lo que Rhaego había logrado y es que se vínculo con dos dragones más y muy grandes también, logrando así ser el primer señor dragón vinculado a un total de cinco dragones.

-Gracias por venir ha mi castillo mis lores y mi lady- Afirma el rey Targaryen.

-Estamos para servirle majestad- Dice Maron Martell, el príncipe de Dorne.

-A usted le debo el poseer una nueva vida, estoy para apoyarlo y darle mi ejército- Exclamó la feroz y temida reina de espinas, Olenna Tyrell.

-La flota Velaryon también está a su servicio mi rey. Aunque no es lo mismo que en los tiempos de la serpiente marina, sigue siendo una flota con barcos poderosos- Dijo el señor de la mareas, lord Corlys Velaryon quien es el cuñado del rey, es decir el hermano de la reina Rhaena.

-La flota Greyjoy está a su disposición también majestad- Menciona lady Yara Greyjoy.

El rey observa a sus aliados con una mirada de grandeza sabiendo que si lo desea puede tomar los siete reinos en ese preciso momento, pero aún no es el momento.

-El ejército de Stormlands también está al servicio del rey dragón- Exclama Gendry Baratheon.

-Gracias por su apoyo, ejércitos y barcos. Con todos ustedes como mis aliados estoy seguro que podría conquistar a los reinos rebeldes sin mucho problema...pero aún no lo haré- Afirmó el rey lo cual desilusionó un poco a sus aliados quienes esperaban que el rey iniciara su campaña militar inmediatamente al estar en Westeros.

-¿Acaso no quiere tener a los reinos?- Preguntó el príncipe dorniense.

-Si, pero aún tengo algo que hacer en Essos antes de poner toda mi atención en Westeros- Respondió el rey y se retiró al archivo de Dragonstone donde se encontraban varios libros y pergaminos referentes a la casa Targaryen y su historia además del cráneo del dragón de la reina Rhaenys, Meraxes, la madre de dragones. El lugar no fue manipulado ni remodelado por Stannis quien valoraba mucho la historia por lo que lo dejó tal cual lo encontró al recibir el castillo. En ese lugar estaba Daeron esperando al rey para conversar diferentes temas.

-La reunión fue más tranquila de lo que me esperaba- Dice el príncipe Fuegoscuro.

-Si, aunque pensé que este viaje sería un pérdida de tiempo pero salió mejor de lo que esperaba- Agregó el rey.

-Claro, reclamaste a dos dragones que se pensaban muertos. Supongo que ahora buscarás a Ala de Plata y Ladrón de Ovejas- Menciona Daeron.

-Pero después, ahora me concentraré en otro objetivo- Menciona el rey a los que Daeron le pregunta cuál sería ese objetivo que recibirá toda su atención.