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Los fuertes choques de la cadera del alfa contra el omega lo estaban llevando a la cima del placer.

La noche anterior habían visto películas, cenado e incluso bebido un poco, había sido una noche maravillosa para el par de lobos que poco a poco se entregaban al sentimiento que nacía en sus corazones.

De un momento a otro las cosas cambiaron y terminaron follando casi toda la madrugada en la habitación de Rodrigo, ya era de mañana y no habían parado de hacerlo.

—E-el nudo...¡Ah! Sácalo alfa

Unas embestidas más y el alfa salió del omega para derramarse fuera del castaño.

Ambos estaban agitados y sudados.

—Tenemos que ir a la universidad, Iván- apenas podía pronunciar aquellas palabras, él realmente estaba agotado

—¿Por qué? Mejor pasemos el día juntos, acurrucados en la cama- Iván terminaba de ponerse la ropa interior mientras el castaño se tapaba con las sábanas

—¿Quieres que te probemos, Iván? ¿Tan poco te importa tu omega?

El azabache alzó una ceja y se cruzó de brazos—Levantate entonces, Rodrigo

—¡Claro que lo haré!

Y vaya que había sido una mala idea, porque al levantarse y dar unos cuantos pasos el dolor de su trasero y cadera era horrible, con toda la cara roja y con los ojos abiertos miró al alfa.

—Qué me hiciste...

El alfa se encogió de hombros y se acercó para cargarlo y llevarlo al baño.

—¿Te duele, bonito?- preguntó con burla ganándose un gran sonrojo avergonzando al omega, ocultando su cara en el cuello del alfa—Hey, no te avergüences, no hicimos nada malo, cariño

—Me...duele mucho

El azabache se preocupó de inmediato, quizás había sido demasiado bruto en cuanto a su fuerza.

—Te daré un baño, haré el desayuno, te traeré una pastilla y luego descansarás ¿Bien?

—Pero tus clases...estás por graduarte...

—Me iré cuando estés durmiendo y le avisaré a tu profesor que estás un poco enfermo

Rodrigo asintió dejándose hacer por el alfa.

Quizás, tan solo quizás, el alfa no parecía ser lo que él había pensado desde el principio.

[...]

Agustina estaba atenta a los alumnos que entraban al aula, pero en ningún momento vió a Rodrigo entrar, se sintió un poco preocupada, pero aun más se sentía curiosa, tampoco había visto a Buhajeruk por la universidad.

Sus sospechas crecían cada vez más y odiaba sentirse así con su amigo, pero si Rodrigo era el omega que le estaba quitando a su alfa, ella no se quedaría de brazos cruzados, porque él sabía lo mucho que el alfa le gustaba, él era testigo de todo sus sentimientos.

El pensar que Rodrigo tuviera algo con el alfa la llenaba de irá y resentimiento.

Salió de sus pensamientos cuando vió como el alfa de sus sueños apareció dirigiéndose al profesor, le dijo algo al oído y luego se retiró.

Algo estaba pasando.

Cuando la clase terminó ella empezó a buscar al alfa y lo encontró con sus amigos, se estaba acercando a él y escuchó cuando el teléfono de azabache empezó a sonar y se detuvo.

—¡Hey! Ya despertaste...

—¿No te sientes bien? Mis clases terminaron, iré para allá de inmediato

—¿Helado de fresa? Claro, te llevaré lo que quieras

Los amigos del alfa empezaron a bromear con el azabache entre risas, Iván se despidió y corrió hacia la salida

Agustina estaba llena de rabia y sin duda alguna descubriría quien mierda era ese omega estúpido. Cuando decidió que seguiría al alfa, la mano de alguien la tomó fuerte del brazo.

—¿Qué...

—Ya deja de seguirlo ¿Estás obsesionada acaso? Él ya encontró a su omega, no intentes nada más, vas a lastimarte, agustina- Tomás, el amigo de Iván la había detenido, pues él habia visto a la omega seguir a su amigo por toda la universidad

—¿Quien es? ¿Quien es ese puto omega de mierda? Todo estaba bien hasta que él llegó- la omega se soltó del agarre de Tomás con brusquedad

—¿Bien? Por dios, Agustina, eso no era "estar bien"

—Él estaba conmigo

—Y con cinco más, que no se te olvide. Además, solo tuvieron sexo una vez, todos lo saben

La risa escandalosa de la ex-morocha llamó la atención de los otros dos amigos del omega

—¿Estás celoso? Si así fuera ¿No estaría cambiándome a ti también por ese estúpido omega?

—¿Cambiándome? Soy su mejor amigo, él no va a dejarme, Agustina, yo soy alguien importante para él, mientras tú...

—¡Cállate!- la castaña se abalanzó al omega para golpearlo, pero fue detenida por los otros dos alfas

—Es mejor que te alejes, chiquilla, nadie toca a Tomás- aquel alfa la empujó antes de que le tocara siquiera un pelo al omega.

Agustina vió como ambos alfas estaban preparados para atacarla, claro que al ser Tomás su unico amigo omega lo protegían a capa y espada, incluso Iván lo hacía.

La omega les gruñó, para luego empezar a caminar hacia la salida por dónde se había ido el alfa.

Tomás solo espero haber distraído lo suficiente como para que el alfa se haya ido de una vez...

Hate You- RODRIVAN !!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora