En casa las cosas con papá habían mejorado parcialmente.
El sábado por la tarde cuando llegué de casa de Alex hablamos sobre el día anterior y la conversación tan desastrosa que habíamos tenido. Me había explicado el motivo de la ruptura con mamá, y a pesar de que había hecho las cosas mal, en cierta parte lo comprendía.
Mi abuela paterna había enfermado cuando cumplí los dos años y medio. Papá para ese entonces estaba viviendo en Inglaterra. Había viajado a España tras la noticia y durante un año y medio había estado haciendo viajes frecuentes para estar con mi abuela.
Durante ese tiempo las peleas en casa se hicieron frecuentes, y mamá solía discutir mucho por inseguridad y desconfianza. Tenía miedo de que papá le estuviera engañando durante sus viajes a España o que estuviera conociendo a otras mujeres.
Mi padre me había contado casi con lágrimas en los ojos como una relación tan bonita y sana había pasado a convertirse en algo tóxico debido a una mala comunicación y unos celos irracionales. «Seguíamos siendo críos» había dicho más para un autoconvencimiento de sí mismo que una explicación para mi.
Al final mi abuela terminó falleciendo y papá le propuso a mi madre que se fueran a vivir a España, lo cual ella terminó rechazando.
Poco tiempo después, papá se fue y yo me quedé con mamá en Inglaterra.A partir de ahí es historia.
No comprendía el completo abandono por su parte, el no venir a visitarme... Pero podía llegar a comprender su historia, había visto el dolor y la nostalgia a través de su mirada.
Yo era demasiado pequeña para recordar nada de esa época. Por lo que nunca había sabido su versión de la historia. Solo la que me había contado mi madre cuando estaba demasiado triste o drogada.
Lo había estado escuchando atenta durante todo su relato y al finalizar había podido vislumbrar la tristeza y la nostalgia que teñían sus ojos.
Estaba claro que nada de lo que ocurrió entraba en sus planes de vida y que estaba verdaderamente arrepentido. Me había pedido perdón por el daño de todos aquellos años y por haberse perdido etapas tan importantes de mi vida. Había reconocido su error por no haberse dado cuenta antes de lo que ocurría en casa; aunque también había mencionado que mamá le había prohibido venir a visitarme. Al final toda la conversación había concluido con su trabajo.
Era necesario el sacrificio.
Y eso era algo de lo que yo era muy consciente. En su jerarquía de importancia yo nunca sería el puesto número uno.
Le había reprochado con lágrimas en los ojos el abandono de su parte, la crianza fría y su figura de padre presente ausente. A lo que Fernando Astorga no había podido hacer otra cosa más que reconocer sus errores y volver a pedir perdón. Después de verme llorar desconsoladamente, me había prometido que intentaría ser mejor padre, que se esforzaría por no centrar su atención tanto en el trabajo y que a partir de aquel momento las cosas irían mejor.
Me regañé a mi misma por los ápices de esperanza que iban creciendo en lo más hondo de mi. Me reproché todas las veces anteriores en las que papá me había jurado que todo iría mejor y no había sido así. Siempre había caído en sus mentiras endulzadas...Y a pesar de que no quería hacerlo, aquella vez le creí.
***
El domingo había estado haciendo tareas de la universidad, maratón de juegos de la Nintendo Switch y había llevado a Coco al parque para ver el atardecer (al cual le había hecho múltiples fotos para posteriormente publicarlas en mi instagram). También había realizado algunas compras por internet de ropa deportiva.
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Déjame quererte.
Fiksi Remaja¿Y si te dijeran que el chico que vas a conocer en terapia cambiará tu vida por completo? ¿Comenzarías la primera sesión a pesar del escepticismo? Alicia Turner es una chica golpeada por la vida, una que nunca ha conocido el sentimiento del amor y l...