2.21

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TN

¿Que haces con tu vida cuándo despiertas y te encuentras ante tu vista algo como ésto?

¿Cómo puede ser que se vea cómo un angelito, si ha sido un demonio y un despiadado jungkook hace poco?

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¿Cómo puede ser que se vea cómo un angelito, si ha sido un demonio y un despiadado jungkook hace poco?

Suspiré y me quedé allí embobada mirando como dormía. Su respiración era suave y sus facciones estaban totalmente en calma.

—¿Ya despertaste? —abrió un ojo y me vio allí observándolo como una boba.

—Creo que tendríamos que irnos. Tenemos clase dentro de dos horas y mi hermano y Eun-ji estarán preocupados —me sonríe y sé despereza un poco.

Se acercó a mí y me abrazó. Me huele el cuello y exhala con pesadez.

—Nena tengo miedo de salir de aquí, cada vez que nos separamos ocurre algo malo —besó suavemente mis labios.

—Jungkook, no es cosa de quedarse aquí eternamente —toqué su pelo.

—No estaría nada mal, ¿no? —me mira de forma provocativa —. ¿Tan mal lo pasaste?

Recordé todo lo anterior y mis mejillas se tornaron rojas.

Se ríe al darse cuenta del calor que me ha provocado.

—Lo que yo digo...sí que lo pasaste bien —le doy una palmada en su hombro para que se calle de una vez.

—¿Porqué siempre te lo tienes tan creído? —se ríe.

—Porque puedo y sabes que es verdad —bajó su mano a mis muslos y los apretó. Me hizo temblar—¿Lo ves?, yo no engaño —me guiñó un ojo.

—¡Quita! —me deshago de su mano y me muevo un poco entre el vaivén que hace la cama con cada movimiento nuestro—. Hay que irse.

Salí cómo pude, aunque no era nada fácil, me caí un par de veces encima de Jungkook haciéndolo retorcerse de dolor. Ya que una vez le di en su estómago y después con mi rodilla aplasté su mejor atributo.

—¡Mierda!, nena que me vas a matar —yo solté un pequeña risita nerviosa.

Al fin toqué el suelo firme con mis pies y respiré aliviada. Busqué mi ropa por todos lados.

Mis bragas, ¿dónde demonios había lanzado mis bragas? Miré por todos lados pero no había rastro de ellas por ningún lado.

Él estaba ya casi vestido y yo aún desnuda buscando mis malditas bragas.

—¿Qué buscas? —me dijo desde su posición algo alejado de mí.

—Mis bragas, las lanzaste cómo si le patearas el balón a tu compañero en el fútbol —le dije molesta —y no las encuentro.

Se acercó y buscó conmigo. No las encontramos.

—Nada, tendré que ir sin ellas —él apretó sus labios para no reír.

My first love ( + 18 ) Tn & JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora