No me complace ser tu esposa © (Editando)

Capítulo 25

Lucky (Suerte) by Jason Mraz ft. Colbie Caillat

AGNES

-¡Ya...!-

-¡Ya...!-

-¡No aguanto!, paremos un poco...- le digo a Steven en un último suspiro antes de llegar al extasis...

Es domingo, muy de madrugada y Steven literalmente me secuestró todo un fin de semana para convertirme en una esclava sexual a merced de él...

El sexo cansa y a horrores, lo bueno es que luego de el maratón a la cuál nos hemos dedicado queda una sensación de infinito y extremo placer, te sientes plena, saciada, relajada y hasta... drogada creo yo que me siento.

Los pechos me arden un poco producto de la jornada sexual a la que este hombre me ha tenido sometida, ya me quedo muy en claro que muere por unas tetas o mejor dicho por ¡mis tetas!, otra cosa de la que me he dado cuenta  ¡Steven es bastante insaciable!... Sólo me ha dejado dormir un poco... ¿¡No puedo creer que me he convertido en una adicta a él, en tan pocas horas!?...

Tengo la respiración y el corazón acelerado producto de el último orgasmo que acabo de tener... Está vez estoy encima de él, ya que me lo pidió y así lo hice, debo aprender muchas cosas pero Steve tiene muchísima paciencia y en poco tiempo me ha enseñado con gestos, miradas y pocas palabras un sin número de cosas, cosas que le gustan y cosas que he descubierto que me gustan.

Caigo en su pecho desnudo, todavía sigue encajado en mi ser así que le digo

-¡Dios! Esto de verdad es un secuestro sexual...- él comienza a reír y por cada movimiento que produce sus carcajadas,  su abdomen sube y baja por lo que me mueve a mí que estoy encima de él- ¿No te cansas ni un poquito?- acaricia mi espalda y me dice

-Claro que me canso pero es imposible no atacar a una mujer como tú, que está con poca ropa, dormida,  en mi cama, con unos labios rosados entreabiertos, emitiendo unos ronquidos que me despertaron...- levanto la mirada con el ceño muy fruncido y le digo

-¡Yo no ronco tonto!- él ahora ríe más fuerte

-No nena!! pero si haces unos ruiditos bastante llamativos-

-¿Cómo qué ruidos? ¿De qué hablas?-

-Ruidos princesa, suspiros, gemidos, quejidos... ruidos- él ahora me da una nalgada, que me hace emitir un fuerte quejido  y me dice- ¡Si no te levantas lo que está entre mis piernas se volverá  a despertar!- Abro los ojos muy grandes y me salgo de su cuerpo, la sensación de vacío de mi ser es bastante extraña, supongo que con el pasar de los días se sentirá cada vez menos.

Me siento en la cama y tomo una almohada la cual abrazo a mi cuerpo, Steven se levanta y va al baño, por ende busco en la cama mi pantie y me la coloco, tomo la playera que Steve me dió para dormir e igual cubro mi cuerpo, abro el cubrecama y me arropo con el,  siento mucho frío, la mañana y el día de hoy van a estar extremadamente fríos en Londres, pienso.

Observo sin decir nada cuando Steven sale del baño, trae un bóxer en las manos así que veo como se lo coloca y detallo, lo poco que la luz que se filtra por las cortinas de su cuarto me lo permite, su cuerpo, es un cuerpo escultural, definido, muy bien trabajado es más creo que es la primera vez que estoy observando el cuerpo de mi prometido con ¿lujuria?, si eso es...

Siento como Steven comienza a escalar por la cama hasta llegar a mi y me dice

-¿Te gusta lo qué ves?-  yo sólo asiento y me echo a reír ya que ni yo misma entiendo lo que me sucede, me siento algo descarada por lo que acabo de afirmar pero no puedo negar que su ser me atrae con la misma fuerza que lo hace un imán ante el hierro, es más me siento tal cuál, totalmente magnetizada frente a Steven.-¿Será posible saber que hay en esta cabecita?-