No me complace ser tu esposa © (Editando)

Capítulo 18

Just The Way You Are ( Así como eres ) by Bruno Mars
AGNES

Estas dos semanas y gracias al cielo, pasaron volando, hoy miércoles me quitan este horroroso yeso, lo primero que haré será darme un baño y afeitarme bien y como dios manda las piernas ya que debe estar bien peluda, sonrío, estoy sola en mi habitación pensando en puras pendejadas.

Bueno la verdad es que no estuvo tan mal el reposo, mis hermanos vinieron casi a diario, Joshua y yo creo que vimos todas las películas animadas que hay desde que él nació, ya que después que llegaba del colegio, subía y me colocaba por los menos dos de ella, así que mi hermano menor también contribuyo a ocupar mi mente y evitar que cayera en indicios de locura.

Veo mi yeso, ya que estoy a la espera de que Ángela venga por mí, ya que me llevará con el traumatólogo que retirará mi bota, hoy Steven no puede, ¡bueno!, no es que no puede, más bien fue que le impedí que anulara una reunión para llevarme al médico, él insistió e insistió en llevarme pero me negué, mi hermana Ángela no está ocupada así que ella se hará cargo de la situación.

Steven.... Ayyy Steven... Este hombre se encargó de venir todos y cada uno de los días que estuve aquí, me entretuvo hasta el cansancio, después de la salida loca que tuve con Aarón y con él no salí más, ya que el trajín hizo que el día anterior la pasara casí todo el día drogada por la cantidad de analgésicos que usé para el dolor, así que por mi salud y mi cuerpo me quede encerrada en la mansión, pero ¿de verdad?, con Steven fue mas que suficiente.

Observo mi pierna enyesada, el yeso está todo pintado con cada una de las cosas que se le ocurrieron a Steven, tiene imágenes de todos y cada uno de los rostros y expresiones que él vio en mi cada día, salgo seria, feliz, aburrida, triste, molesta, en fin él llegaba a mi habitación, me traía cualquier cosa para merendar y después de quitarse su saco y arremangarse la camisa de puños, tomaba su carboncillo y comenzaba a dibujar.

Me sentía como un lienzo, sólo me encargaba de observar lo detallista que es con el carboncillo, se esmeró en hacer dibujos espectaculares, lástima que el traumatólogo va a picar esto por la mitad para luego desecharlo, mientras pienso en miles de cosas, Ángela entra a la habitación, me mira y me dice

―¿Lista chiquita?―yo asiento, claro que estoy más que lista, al fin me van a quitar esta bota horrible, mi hermana abre le closet y rebusca en la zapatera unas zapatillas para llevarlas, eso se me había olvidado, me da la de pie bueno y la otra la lleva en la mano con ella, así que me anima a levantarme. -¡Vamos!, Tengo prisa. Luego iremos a otro sitio- Frunzo el ceño, que será lo que quiere hacer ahora Ángela?.

Bueno de verdad que todo en el hospital fue bastante rápido, Ángela estaba renuente de venir aquí, ella es una mujer muy élite, así que ve los hospitales de forma extraña, no le gusta mezclarse e inmiscuirse con personas mortales, normales, comunes y corrientes.. Que estupidez, esta es la parte mala de esta sociedad y lamentándolo mucho mi hermana es un ejemplo magnificado de ella.

Me quitaron el yeso, revisaron que todo esta a la perfección y me indicaron unos ejercicios que debo hacer en casa, la bota hiperdibujada quedo en la basura, la volvieron añicos así que deje que la desecharan.

Salimos de el hospital y noto que Ángela se dirige a una de las mejores Boutiques que engalanan a Londres, ella se detiene y me dice

―¡Baja chiquita!- frunzo el ceño- El sábado hay una gala de la élite y vamos a ir- abro los ojos como platos y le respondo

―¡No quiero ir a esa mierda!!!-

―Ahhh no Agnes!!!, eso si que no!!, vinimos a comprar un vestido para la gala, Steven va a todas las galas y no va a ir sólo, va a ir contigo, además que la rubia estúpida de Bea también frecuenta esos eventos, así que te bajas del carro y por las buenas, como la niña bella que eres, te metes en esa boutique que vamos a comprar un vestido para cada una, ¿entendido?- asiento y furiosa me bajo del auto, lanzo la puerta y entro al lugar en cuestión.