Tanto Sesshōmaru como las gemelas ya no dormían en la habitación de sus padres. Irasue había supervisado a Tōga para que no rompiera nada mientras acomodaba la habitación de las niñas, pues la primera vez que ellas entraron a la cocina, por poco está explotaba en pedazos.
Irasue: Por fin... (estirándose, sentada en el futón con su yukata puesta) No es que no las quiera Pero...
Tōga: ¿Pero qué? (secándose el cabello)
Irasue: Ya más de quinientos años de casados y no entiendo por qué duermes con tu misma ropa.
Tōga: Alégrate que no me duermo con mi armadura...
Irasue: (negando con la cabeza, para volver al tema) Y te voy a hechar una regañada; no creas que no me daba cuenta que todavía hablabas con ellas cuando ya las mandaba a dormir.
Tōga: Jeje... Perdón...
Irasue: De cualquier forma era adorable escuchar esas conversaciones. Aunque nunca llegaban a nada.
Tōga: (abraza a Irasue) ¿Quieres jugar?
Irasue: Con cualquier otro hombre lo podría malpensar... ¿A qué?
Tōga: Hace poco acabo de conseguir un shogi (sonrisa)
Irasue: Lo sabía...
Pensamientos de Irasue: Es imposible malpensar con él. Parece más inocente que Sesshōmaru...Tōga: ¿¡Sí!? (emocionado)
Irasue: (arqueando una ceja) ¿Y por qué no les enseñas a las gemelas a jugar...?
Tōga: Sí te soy sincero... Me da cosa que se vayan a comer las piezas...
Irasue: (una leve risita) Sí... Aún no entiendo cómo le hicieron para mordisquear toda la puerta...
Tōga: (ríe a carcajadas) Sí... ¿Entonces sí jugamos?
Irasue: Bueno, una partida... Y el que pierda hace lo que el otro le ordene ¿Sí?
Tōga: De acuerdo... (acomodando el shogi que sacó del oshiire)
Irasue: Bien, sé un poco de la teoría... No puedo decir que he jugado antes.
Tōga: Me parece perfecto, inicie usted, megami-san
Después de un rato jugando, reñidamente, casi empatados, con varios jaques, pero ambos se mostraban reacios a la idea de perder.
Irasue: (capturando una pieza para salir del jaque) No te dejes ganar.
Tōga: La verdad es mi primera vez jugando. (promoviendo su general de plata)
Irasue: Pues eres bueno, para ser tu primera vez. (capturando una de las piezas de su marido)
Tōga: (mirando a Irasue, deteniendo su mano) ¿No que era tu primera vez también? (agregando una de las piezas que había capturado de Irasue)
Irasue: ... (moviendo con gracia su lancero para promoverlo) Mentí.
Tōga: (se queda callado unos momentos y después ríe) Y no te arrepientes ¿No? (haciendo jaque a Irasue)
Irasue: Aún así me vas ganan... Mierda.
Tōga: (sorprendido, pues ni siquiera sabe cómo consiguió darle mate a su mujer) ¡Genial! (dando dos puñetazos al aire de felicidad)
Irasue: (ríe un poco) Eres nuevo... Y me ganaste... Ju... ¿Que me ordenarás hacer?
Tōga: (semblante serio -se podría decir que incluso sombrío-, claramente ya no se trataba de un juego) Mañana, me encuentro con varios daiyōkai importantes... Por favor, acompáñame...
ESTÁS LEYENDO
Mi nombre es Irasue Minayashi
RandomSoy Irasue. Pero para ti, lector humano, soy Inu no Kami. No soy culpable de lo que leas en MIS anotaciones se te quede grabado permanentemente en tu retina.