Mi nombre es Irasue Minayashi

Capítulo 79. La familia aumenta.

Se alivió al sentir ese aún débil yōki salir del vientre de su "hermana"

No podía creer que enserio su marido, ese idiota hubiera embarazado a esa chiquilla.

Pensamientos de Irasue: No creo que ese día lo haya dicho enserio, pero cómo no tengo nada mejor que hacer... A despertarla se ha dicho.

Picó la costilla de la humana con poca fuerza.

Irasue: Izayoi, yo ya me voy a ir. No va a ser mi culpa si después te pierdes en el castillo. ¿Me escuchaste, Iza?

Izayoi: Voy, oneesama... (trata de abrir los ojos pero los vuelve a cerrar)

Pensamientos de Irasue: Pobre madrugador. Tener dos esposas y las dos dormilonas.

Irasue: Oi, Izayoi.

Izayoi: ¿Sí, diga? (amodorrada)

Irasue: ¿Me dejas tocar tu pancita? (sin quitar la vista del aún inexistente vientre de su amiga)

Izayoi: Cómo guste... (aún sin abrir los ojos)

Irasue: (acaricia suavemente la pancita de la humana)

Pensamientos de Irasue: ¿Qué diría Toshi si viera que su padre engendró más cómo él, hanyō?

Irasue: Ay, ¿En dónde se habrá metido tu esposo, Izayoi?

Izayoi: (ríe, un poco más despierta) ¿Oneesama...?

Irasue: (se separa y se levanta, comenzando a acomodar su futón) ¿Que pasa, querida?

Izayoi: (también se levanta y hace lo mismo que Irasue) Mi hermano me trataba de forma lacerante desde que mi padre murió. (sonrisa) Por eso me alegra poder contar con usted.

Cuando la pelinegra la abrazó sintió por unos momentos que su corazón se detenía, pues al inicio ella también la había tratado mal.

Irasue: (susurrando) Lo lamento...

Izayoi: (se sorprende, pero hace cómo que no oyó)

Al cabo de un rato las gemelas ya estaban jugando con Izayoi y con Kumo en la entrada principal, mientras Irasue leía (y obviamente las vigilaba, por que esas tres niñas eran capaces de hacer cada cosa...) sentada en su trono.

Suzu: ¿Cómo le vas a poner a tus hijos, Izayoi okasan? (lanzando la temari a la pelinegra)

Irasue se sorprendió: sí, era obvio y hasta unas niñas de su edad podía saber que la humana estaba embarazada, pero ¿Saber que eran dos? su olfato era muy desarrollado. Bueno, al menos no sabían que eran...

Inoko: ¡¿Nos dejas ponerle el nombre a la niña?! (ojitos de emoción)

Pensamientos de Irasue: (sorprendida, pero haciendo cómo si siguiera leyendo) Mierda, si saben.

Irasue: Déjenla. Aún es muy pronto.

Suzu/Inoko: Sí, mamá. (tono monótono)

Izayoi: (ríe un poco) Su padre será el que lo decida.

Irasue: No entiendo cómo no le piensas dar batalla con eso... (canturreando)

Aetherio: (le quita la pelota a Izayoi de las manos)

Suzu/Inoko: (comienzan a perseguirlo) ¡Vuelve acá! ¡Ladrón! (risas)

Irasue siguió a sus hijas con la mirada, con una pequeña sonrisa en su rostro. Y se percató de que Izayoi se sentó a su lado, en el suelo, con la espalda recargada en el trono. La pelinegra dobló sus piernas y las pegó contra su torso.